Ocurrió hace unos días en Plainfield (Nueva Jersey, EEUU), cuando una mujer de 67 años sufrió una caída desde unos 2 metros de altura al no percatarse de que unos operarios estaban realizando unas reparaciones en la calle.

Los trabajadores abrieron una de las arquetas de la calle para realizar un trabajo de mantenimiento, algo que la mujer que caminaba por la acera no fue capaz de ver por ir pendiente de la pantalla de su teléfono.

Tras chocar contra una de las puertas, terminó cayendo desde una altura de unos dos metros, lo que le provocó diversas lesiones en el cuerpo. Como consecuencias de las mismas, tuvo que ser evacuada en camilla por los sanitarios para ser atendida en el hospital más cercano.