La espontaneidad de los más pequeños ha vuelto a ser protagonista de la actualidad internacional. Después de que hace algunas semanas dos niños se convirtieran en los personajes más famosos de una entrevista en la BBC, la acción de una niña ha dado la vuelta al mundo por la inocencia de su gesto: le quitó el solideo al Papa ante el asombro de todos los que presenciaron la escena.

Francisco I no esperaba que, tras acercarse a besar a la pequeña durante la audiencia general de los miércoles en el Vaticano, la niña levantara el brazo hasta su cabeza y le quitara el casquete de seda que usan los eclesiásticos para cubrirse la coronilla. Ante tal impulso, el Papa no pudo hacer más que reír a carcajadas y recuperar su solideo.