Imagine que, cogiendo el autobús, tardara menos en llegar a los sitios que si se desplazara en coche. Esto es lo que pretende el Transit Elevated Bus (TEB) que ha sido presentado en China y cuya entrada en funcionamiento se prevé para el próximo año. Con este nuevo medio de transporte sobreelevado, el autobús evitaría los atascos que pudieran producirse en el asfalto. En realidad, el sistema se compone de dos carriles sobre los que se mueve la 'cápsula' de pasajeros –hasta 1.200 pueden viajar a la vez–, permitiendo optimizar el espacio en las calles. El invento fue presentado por un grupo de ingenieros en la XIX Exposición Internacional de Tecnología china, en Pekín. El coste de su construcción es menos de la quinta parte de lo que supone el metro.