En el fútbol americano no sólo tienes que esquivar a los jugadores rivales, también a los obstáculos inmóviles con los que te encuentras en tu camino.Un buen ejemplo es lo que le sucedió a Mitch Thompson, receptor del equipo de fútbol americano de la Universidad de Regina. Corría hacia la 'end zone' (zona de anotación) para coger un pase largo y conseguir el 'touchdown'. Mientras corría, no pudo evitar dirigirse contra el soporte de los palos y al final le salió todo mal: no cogió el balón y se dio un golpe bastante fuerte. Al menos había protecciones, pero eso no evitó que se quedara aturdido durante unos minutos.