Así son los masones españoles

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Cinco miembros de la Gran Logia Española
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Cinco miembros de la Gran Logia Española

Hay más de 3.000 masones en España, muy lejos de las cifras que se manejan en los países en los que nunca fueron perseguidos (en EEUU aún hay más de un millón de masones) pero casi el doble que hace 25 años.
Posado en la sede de la masonería en Madrid
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Posado en la sede de la masonería en Madrid

En una reciente encuesta interna llegaron a la conclusión de que en España se sienten más perjudicados por los prejuicios que la comunidad de gays y lesbianas. Y quieren revertir esta situación mediante la transparencia.
Los cinco masones, durante la entrevistal
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Los cinco masones, durante la entrevistal

El Confidencial reunió a cinco miembros de la masonería madrileña para hablar de sus motivaciones y de su interés por "normalizar" su actividad en la sociedad española, como ocurre en otros países.
Nicolás Luis Calvo Francés, diseñador gráfico de 65 años
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Nicolás Luis Calvo Francés, diseñador gráfico de 65 años

"La masonería me da un sentido de pertenencia como yo nunca había tenido en mi vida porque he sido una persona muy individualista. (...) Creo que es la auténtica sabiduría de Occidente, entendida la sabiduría como la justa, correcta y adecuada administración de la experiencia y el conocimiento”.
José Manuel Laureiro, historiador de 60 años
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José Manuel Laureiro, historiador de 60 años

“Soy biznieto y nieto de masones. Mi abuelo me hablaba de la masonería como algo natural, algo de grandes hombres y grandes cosas. Me eduqué durante le franquismo y recibía informaciones de que los masones eran muy malos, sin embargo yo veía que mi abuelo era muy bueno y yo no entendía las críticas”.
Juan Carlos Garvayo, pianista y compositor de 46 años
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Juan Carlos Garvayo, pianista y compositor de 46 años

"Entré en contacto con la masonería a través de la música y me proporciona un lugar donde las cosas importantes se ponen en su sitio. Tiene una carga muy fuerte de espiritualidad y me inspiró un disco en homenaje. Estoy muy orgulloso de ser masón, creo que es algo que nos pone en contacto con los arquetipos benéficos".
Enrique Gálvez Durand, ingeniero de 46 años
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Enrique Gálvez Durand, ingeniero de 46 años

"Me inicié en Perú y continué en Chile. En Perú no hay ningún tabú con la masonería y el siete de junio las logias hacen un desfile en la plaza de la bandera. Es algo muy público y abierto que no se esconde tanto como en España. Al revés, se muestra esa identidad como algo positivo"
Henry Vargas, ingeniero informático de 39 años
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Henry Vargas, ingeniero informático de 39 años

"Yo sentía una falta de algo dentro de mi propio entorno nacional y social. Empecé a leer sobre masonería y decidí dar el paso. Me ha cambiado la vida en el sentido de que es un lugar de encuentro y he aprendido el significado de la tolerancia, de saber que no tienes nunca la razón sino sólo un punto de vista”.
Una de las salas de ceremonias de la masonería en Madrid
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Una de las salas de ceremonias de la masonería en Madrid

Espadas utilizadas en los ritos masónicos
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Espadas utilizadas en los ritos masónicos

Otra de las salas de reunión en la sede de Madrid
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Otra de las salas de reunión en la sede de Madrid

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Una fotografía del Rey Felipe VI en la sede de la masonería
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Una fotografía del Rey Felipe VI en la sede de la masonería

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La masonería española, prácticamente exterminada durante el franquismo y acorralada a derecha e izquierda por todo tipo de mitos y leyendas, se ha ido sacudiendo el miedo durante los años de democracia (fue legalizada de nuevo en 1979). Sin levantar demasiado la cabeza, sin ruido, consciente de los recelos aún latentes en diferentes estratos de la sociedad y de su falta de apoyos; trabajando en el anonimato con el objetivo de recomponer sus mimbres.

El Confidencial reunió a cinco miembros de la masonería madrileña para hablar de sus motivaciones y de su interés por "normalizar" su actividad en la sociedad española, como ocurre en otros países.  

[Lee el reportaje 'La masonería española se sacude el misterio']

 

 

 

 




 
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