El instructor del caso Púnica, el juez Eloy Velasco, tiene en su mesa un informe de la Guardia Civil que prueba la vinculación de Francisco Granados con una finca de Ávila que presuntamente le fue obsequiada por constructores a los que favoreció con adjudicaciones públicas y recalificaciones urbanísticas. Aunque los empresarios aparecían como titulares del terreno, el exsecretario general del PP de Madrid y exconsejero autonómico de Presidencia llegó a controlar hasta el 50% de la propiedad, valorado en 1,3 millones de euros, a través de testaferros y sociedades instrumentales.
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Hasta ahora, Granados se había defendido asegurando que solo acudió a la finca ocasionalmente y que siempre lo hizo por invitación de uno de los empresarios, Ramiro Cid, también imputado en Púnica. Pero los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) del Instituto Armado han localizado fotografías que confirman que actuó durante años como verdadero propietario de la finca.
Los investigadores de la UCO han facilitado al juez Eloy Velasco, instructor del caso Púnica, fotografías que demuestran que Francisco Granados, exsecretario general del PP de Madrid, disfrutó durante años de una finca de 84 hectáreas situada en Ávila regalada por constructores.