Habrá rúa. No podía ser de otra manera. Es el colofón de cualquier título ganado por el Barcelona y sus aficionados podrán compartir la gloria con sus ídolos por las calles de la Ciudad Condal. Entre el Gran Premio de Fórmula Uno y el concierto de Bruce Springsteen en el Camp Nou, el club -siempre en contacto con el Ayuntamiento- optó por suspender los festejos. Era materialmente imposible, por motivos de seguridad, que el homenaje tuviera lugar en la noche del sábado. Sin embargo, el plan inicial varió. “Haremos una rúa el domingo desde el World Trade Center hasta la Plaza de España”, desveló Josep María Bartomeu nada más finalizar el partido.
Tras varias jornadas de incertidumbre, el Barcelona sentenció con solvencia la faena en Los Cármenes. El Granada no fue rival y Luis Suárez liquidó con tres certeros remates al flojo equipo andaluz. El final no fue el esperado, porque en cuanto el colegiado dio el pitido final, una invasión de campo provocó que los jugadores de Luis Enrique se refugiaran en el vestuario. En el interior del estadio empezó el festejo, y cuando el terreno de juego se despejó, los jugadores volvieron para celebrar el éxito con los aficionados culés que aguardaban en las gradas.
Tras sufrir una serie de tropiezos inesperados, el triunfo final supo a gloria a los jugadores de Luis Enrique, sobre todo porque el Real Madrid mordió el polvo en la última jornada. Eso siempre da un sabor diferente a cualquier victoria culé. “Hace 25 años esta Liga no la habríamos ganado”, sentenció Gerard Piqué, poniendo de relieve el carácter del Barcelona que alumbró el nuevo siglo en relación al que muchas veces, en el pasado, no tenía la misma personalidad que ahora. “Somos una generación de un talento único; lo bueno es que ha coincidido en el tiempo. Al final hemos solventado esta Liga con tranquilidad”.
“Hemos sido los mejores y por eso hemos ganado esta Liga”, dijo Bartomeu, mientras Luis Enrique, en sala de prensa, animaba a sus jugadores a celebrar el éxito por todo lo alto. “He pedido a los jugadores que hagan un fiestón de la repera”, reconoció el entrenador asturiano, que dejó claro él es “muy soso” y que posiblemente no era el más indicado para animar al personal. “Supimos superar momentos delicados”, dijo el técnico, para apostillar que “este torneo premia la regularidad. El Barcelona ha sido líder durante muchas jornadas y practicando un buen fútbol”.