Las nuevas furgonetas de PSA y Toyota llegarán en 2016

Fruto de la colaboración en el terreno del vehículo comercial del grupo francés PSA y sus marcas Peugeot y Citroën con el fabricante japonés Toyota, se ha desvelado una nueva familia de furgonetas medias, que estarán disponibles con pequeños cambios bajo las marcas francesas y también como Toyota a lo largo del próximo año.

Los modelos ahora desvelados son los Citroën Spacetourer, Peugeot Traveller y Toyota Proace. Estarán disponibles en versión monovolumen para un uso de enfoque más particular, y en variantes Combi y Shuttle, para un uso más profesional. Una confirmación importante del acuerdo firmado entre ambas compañías en el año 2012. Estos tres nuevos modelos, que se comercializarán a lo largo de 2016, se presentarán oficialmente en los respectivos stands de las tres marcas en el próximo Salón del Automóvil de Ginebra, que tendrá lugar en marzo de 2016.

Entre los aspectos más destacados de los nuevos vehículos, el hecho de que para estos modelos se ha desarrollado una nueva plataforma eficiente, para ofrecer a los clientes unos vehículos modernos y eficientes, un aspecto muy importante en este tipo de coches pensados para un enfoque más industrial, en el que los costes de utilización son claves.

El Toyota Proace está basado, desde su lanzamiento en 2013, en los Peugeot Expert y Citroën Jumpy. El acuerdo entre Toyota y PSA Peugeot Citroën, firmado en 2012, preveía además del lanzamiento de este modelo el desarrollo común de una nueva generación de vehículos, y que esa colaboración se extendería más allá de 2020.

El objetivo de ambos grupos en esta colaboración ha sido el de ofrecer un producto competitivo en los segmentos de los vehículos comerciales de tamaño medio gracias a la optimización de los costes de desarrollo y fabricación. Los vehículos de las tres marcas se producen en la fábrica de Sevelnord que PSA Peugeot Citroën tiene en la localidad francesa de Valenciennes.

Toyota Motor Europe (TME) ha participado en los costes de desarrollo y en las inversiones industriales necesarias para la producción de estos nuevos vehículos, que comparten todas las características técnicas, tanto a nivel de suspensiones, frenos y dirección como también de motorizaciones. Incluso determinados equipamientos están compartidos y las diferencias se centran en los cambios estéticos del exterior e interior, con diseños distintivos, para poder inscribirse cada uno en el universo estilístico de cada marca.