Mercedes C 63 AMG Coupé, para marcar un buen tiempo

Mercedes lanzará al mercado a finales de este mismo año las variantes más deportivas de un nuevo modelo, el Clase C Coupé, que se ofrecerá con dos motores diferentes de 476 o 510 caballos y que solo estará disponible con un cambio automático de siete marchas asociado con un diferencial autoblocante. Un coche casi de carreras firmado por AMG.

Hace unos días la marca de la estrella desvelaba las primeras fotos e informaciones del nuevo Clase C Coupé, un coche que llegará al mercado europeo antes de final de año y que se mostrará en el Salón de Fráncfort, a mediados de septiembre. Ahora, Mercedes muestra la variante más deportiva de este modelo, con las ya carismáticas siglas de AMG en su nombre. Una versión espectacular por su aspecto estético pero también por su mecánica, con dos variantes de motores diferentes con 476 o 510 caballos.

En su aspecto estético hay bastantes diferencias con respecto a su hermano más civilizado, el C Coupé. Donde más se aprecia es en su mayor anchura de vías y su carrocería rebajada en altura, lo que permite un comportamiento más deportivo. Y también en sus ruedas, que son de diferente medida entre el eje delantero y el trasero para optimizar su comportamiento en las condiciones más extremas. Van pintadas en color negro, lo que le hace aún más llamativo.

También se encuentran diferencias en algunos elementos aerodinámicos, que en estas versiones AMG pueden ir pintados en color negro para destacar aún más esas diferencias y sobre todo para proporcionar un aspecto deportivo aún más radical. De serie las llantas son de 18 pulgadas en el C 63, mientras que la variante más potente emplea las de 19 pulgadas.

Pero lo que realmente hace diferentes a estos C Coupé AMG de sus variantes sin este apellido tan emblemático son sus motores. El punto de partida es el C63 que emplea un motor V8 con doble turbocompresor y cuatro litros de cilindrada cuya potencia se sitúa en los 476 caballos. En cuanto a la versión más potente, el C63 S, emplea el mismo grupo motriz V8 biturbo, pero con su potencia aumentada hasta los 510 caballos.

Además de sus motores y de los neumáticos empleados, ambas versiones difieren en otro aspecto importante como es su diferencial. Mientras que el pequeño tiene uno de accionamiento mecánico, en el caso del C63 S emplea un sistema de gestión electrónica, más eficaz cuando se quiere hacer una conducción radical.

Hay un último cambio importante relacionado con los modos de conducción. Todos los Coupé ofrecen de serie el selector del modo de conducción, el AMG Dynamic Select, con el que el conductor puede elegir entre diferentes modos de uso desde uno más confortable hasta otro más radical y deportivo. Mientras que el C63 tiene cuatro modos diferentes, en el caso del C63S de 510 caballos añade un quinto modo, el “Race”, pensado para rodar al límite en un circuito. En ambos casos una de las opciones es el modo individual en el que el conductor puede elegir entre diferentes parámetros en cuanto a suspensiones, cambio de marchas, dirección y demás.