Las sanciones del SER por estacionar en plazas verdes son ilegales, según AEA

La organización de defensa de los conductores,Automovilistas Europeos Asociados (AEA),ha denunciado que “la señalización que utiliza el Ayuntamiento de Madrid para delimitar las plazas verdes de las zonas afectadas por el SER es ilegal y, por tanto, las sanciones que se han venido imponiendo por no colocar el ticket en estas zonas de aparcamiento son nulas, por cuanto se amparan en una señalización ilegal e inexistente”.

Según ha explicado el presidente de AEA, Mario Arnaldo, “la propia Ordenanza de Movilidad del Ayuntamiento de Madrid establece que la señalización se realizará conforme a las normas y modelos de señales establecidos en el Reglamento General de Circulación. Sin embargo, las marcas delimitadoras del estacionamiento limitado de color verde no están contempladas en dicha norma del Estado, por lo que se trata de una señalización inexistente e inventada”.

Tal y como se puede comprobar en el Catalogo Oficial de Señales de circulación del Reglamento General de Circulación, la única marca vial autorizada para delimitar los lugares en los que el estacionamiento está permitido en ciertos periodos del día, estando limitada su duración, es de color azul. Por ello, el uso de marcas verdes empleado en ciertas zonas de aparcamiento limitado en Madrid es ilegal.

Pero no solo esto sino que las nuevas señalizaciones, de color naranja, que el ayuntamiento ha establecido para las zonas de aparcamiento de larga duración también son ilegales. El Ayuntamiento de Madrid ha delimitado las plazas de estacionamiento en el Ámbito Diferenciado de los Establecimientos Sanitarios y de Larga Estancia que han empezado a funcionar desde el pasado lunes con este color, que no está contemplado en el Reglamento General de Circulación.

Por ello, AEA, la asociación que protege los derechos de los conductores, ha anunciado que en las próximas semanas va a recurrir las dos ordenanzas aprobadas recientemente por el Ayuntamiento de Madrid (la fiscal y la de movilidad), si no se subsana esta ilegalidad.

Y también la exigencia “diabólica” de tener que estar dado de alta en el Padrón del Impuesto sobre Vehículos para poder tener la consideración de residente. Este es un requisito muy perjudicial para miles de automovilistas, especialmente para aquellos que compran coches de segunda mano matriculados en otro municipio, dado que no se puede obtener el distintivo de residente hasta el año siguiente a la compra.