Puretech 3 cilindros, así ve Peugeot el futuro del motor de gasolina

La marca francesa, que durante años ha desarrollado una eficiente gama de motores de gasóleo con su familia de propulsores HDI, apuesta ahora también por los de gasolina, con la nueva tecnología Puretech. Motores de tres cilindros, muy eficientes y con un muy buen funcionamiento, con potencias que llegan hasta los 130 caballos.

Durante años, Peugeot y otros muchos fabricantes se han centrado en desarrollar motores de gasóleo de bajo consumo pero que destacaban sobre todo por su magnífica elasticidad. Esto hacía que hacía poco necesario el manejo del cambio de marchas, posibilitando una conducción más relajada. Pero ahora el objetivo se ha puesto en desarrollar a fondo los motores de gasolina.

Peugeot tiene desde el año pasado una nueva familia de motores Puretech, con tres cilindros y 1.2 litros de cilindrada que proporcionan un muy buen funcionamiento. Pero a principios del verano presentó su versión más potente, el 1.2 de 130 caballos, montado en el 308, tanto en su variante de cinco puertas como en el familiar. Y ahora ha presentado una nueva variante, en este caso el mismo 1.2 tricilíndrico pero con 110 caballos.

A nivel técnico, una de las novedades más destacadas de los nuevos motores PureTech es el revestimiento especial que tienen los segmentos y pistones, conocido como Diamond Like Carbon y la incorporación de una correa de distribución húmeda. Todo ello para reducir rozamientos y pérdidas en el interior del motor, mejorando sus consumos.

Los nuevos motores son realmente sorprendentes. He podido conducir la variante de 130 caballos y supone un importante paso adelante para la tecnología de los motores de gasolina. Y también una prueba más de que ya no es necesario que todo el mundo compre un coche de gasóleo, como ocurría en los últimos años.

No estaba muy convencido de que un motor 1.2 de tres cilindros pudiera mover con suficiente alegría un coche como el Peugeot 308, pese a sus 130 caballos. Por eso, y para ponerle en una situación aún más complicada, hice la primera prueba con este motor con la variante de carrocería familiar, el SW. Es un vehículo más pesado que el modelo compacto y por ello la prueba resultaría un poco más complicada de superar.

Pues bien, desde el momento de ponerse en marcha, el propulsor demuestra que puede perfectamente con el peso del coche. Hicimos un recorrido con el vehículo por la zona de Tarragona, en un entorno próximo al parque Port Aventura. Un trazado que contaba con un tramo por autopista en el que el coche permite rodar con toda tranquilidad hasta 150 km/h. Pero volviendo a la velocidad legal, se mueve bien, y siempre está atento ante cualquier solicitación sobre el pedal del acelerador y respondiendo con bastante agilidad.

Pero el recorrido iba a transcurrir también por zonas viradas de buenas carreteras y nuevamente sorprende la agilidad con la que el motor sube de vueltas sin necesidad de manejar mucho el cambio. La sensación que saqué después de hacer más de 150 kilómetros con el 308 SW Puretech es que estaba llevando un coche que se comporta como un vehículo de gasóleo por la forma en la que se recupera desde pocas vueltas y su facilidad de conducción, pero al mismo tiempo resulta más silencioso en su funcionamiento.

El ruido del motor merece un comentario a parte. Se trata de un propulsor de tres cilindros, pero en el que se han incorporado todos los elementos necesarios, árboles contrarrotantes y demás, para hacer que ese ruido característico que siempre tenían estos motores tricilíndricos sea mínimo. Y la verdad es que una persona normal, no demasiado experta en el mundo del automóvil, no notará que se trata de un motor de solo tres cilindros. Y para los que tienen un oído más fino, o más experto, lo podrán notar cuando se acelera a fondo y el motor está funcionando a un nivel bajo de revoluciones. Entonces, si tendremos ese ruido poco agradable.

Pero el coche se mueve muy bien, con mucha agilidad y el manejo del cambio es casi tan limitado como en un coche de gasóleo. De verdad que me ha sorprendido mucho este motor que demuestra de manera muy clara que ahora ya ha llegado el momento de plantearse, y no solo con Peugeot o Citroën, si hace falta comprarse un diesel o si con un gasolina vamos servidos.

Sobre todo porque el consumo es realmente destacable, casi tanto como su buen comportamiento dinámico. El valor homologado en el 308 de cinco puertas es de 4,7 litros, o su equivalente de 109 gr/km de CO2. Pero estamos hablando de un motor de gasolina y no de un diesel con los que es más fácil lograr estos registros.

Durante nuestra prueba el consumo también fue muy bueno. Después de más de 50 kilómetros por autopista ligeramente por encima de los 120 km/h como velocidad mantenida la cifra del ordenador de nuestro coche, ya saben una unidad del 308 SW, estaba en 5,4 litros. Y después de los más de 150 kilómetros de recorrido total de nuestra prueba, rodando con bastante rapidez por carreteras viradas pudimos dejar el valor de consumo en los 5,6 litros. Una cifra muy buena.

La marca francesa ha hecho una prueba en Almería el pasado mes de marzo con este coche y con el motor Puretech en el que se ha logrado un valor realmente récord de 2,85 litros cada 100 kilómetros, lo que supone una autonomía con un solo depósito de gasolina de 1.810 kilómetros. Es una prueba realizada en un circuito cerrado por un conductor especialista, en las mejores condiciones y sin ningún tipo de limitación de velocidad, pero el dato queda ahí.

También es destacable la llegada de una nueva caja de cambios automática a la gama del 308. Se trata un innovador cambio de 6 marchas que destaca por mejorar las fricciones internas e incorpora convertidores bloqueables, lo que evita el excesivo deslizamiento del convertidor. Gracias a ello consigue unos rendimientos muy similares a los de un cambio manual, como lo demuestran sus 5,1 litros de consumo y sus 117 g/km de CO.

La familia de propulsores Puretech ofrece ya tres alternativas dentro de la gama del 308. El punto de partida es el de 82 caballos y como tope de gama esta variante de 130 caballos de la que les acabo de hablar. Pero además, este verano se ha añadido a estas dos versiones otra intermedia, el de 110 caballos.

Si la variante de 130 caballos tiene un consumo homologado de 4,7 litros, en el caso del nuevo de 110 CV esta cifra se reduce aún una décima más hasta los 4,6 litros, con unas emisiones de 105 gramos de CO2. Y para completar la comparación, el valor de par motor de la versión de 130 caballos es de 230 Nm disponibles desde las 1.500 revoluciones. Y en el caso del 110 caballos nuevo esta cifra es de 205 Nm disponibles desde las 1.750 rpm.

Las nuevas versiones de la gama 308 con los motores Puretech de 110 y 130 caballos ya están disponibles en el mercado español. Las variantes SW con carrocería familiar suponen un sobreprecio de 800 euros respecto al de 5 puertas. Y la diferencia de precio entre una versión de 110 y otra de acabado equivalente con el de 130 caballos es de 900 euros. Por último, el cambio automático supone un sobrecoste de 1.200 euros. Estos son los precios de las principales versiones de la gama 308 Puretech,

Peugeot 308 1.2 110 CV Access, 16.050 euros

Peugeot 308 1.2 130 CV Active, 18.600 euros

Peugeot 308 1.2 110 CV Allure, 19.550 euros

Peugeot 308 1.2 130 CV Allure Automático, 21.650 euros

Peugeot 308 SW 1.2 110 CV Access, 16.850 euros

Peugeot 308 SW 1.2 130 CV Active, 19.400 euros

Peugeot 308 SW 1.2 130 CV Active Automático 20.600 euros