El crecimiento de Estados Unidos avala el golpe de timón de la Fed y afianza al dólar

La Reserva Federal (Fed) no sorprendió este miércoles por retirar su tercer programa de compras de deuda (QE3) ni por mantener los tipos de interés entre el 0 y el 0,25%. Sorprendió por el diagnóstico más optimista que ofreció sobre la economía, en especial en lo que respecta a la mejoría del mercado laboral. Con su comunicado aún caliente, los datos conocidos este jueves avalan esa impresión. Entre julio y septiembre, la mayor economía del mundo se expandió un 3,5% en tasa trimestral anualizada, por debajo del 4,6% del trimestre anterior, peropor encima del 3% previsto por los expertos.

Este dato ratifica que la economía prolonga su recuperación y certifica que la Fed tiene el camino más despejado para seguir adelante con una progresiva normalización de las condiciones monetarios, algo que pasará por subir los tipos, anclados en el 0-0,25% desde 2008, en 2015. A su vez, este escenario afianza al dólar. Si en la noche del miércoles el euro ya se debilitó de los 1,274 a los 1,264 dólares, este jueves da continuidad a ese movimiento y se mueve en torno a los 1,259 dólares, aunque justo después de conocer el Producto Interior Bruto (PIB) del tercer trimestre ha llegado a caer hasta los 1,255 dólares.

Aunque la cifra conocida este jueves es provisional, porque se trata de la primera de las tres lecturas que se harán del PIB y puede ser revisada, concuerda con el pronóstico más favorable emitido por la Fed. En el comunicado difundido el miércoles aseguró que ya se está creando trabajo de forma más "sólida", un optimismo que sorprendió en el mercado.

Esta referencia servirá para caldear los datos de empleo de octubre, que se conocerán el 7 de noviembre. Por el momento, las previsiones contemplan una creación de más de 200.000 puestos de trabajo y un mantenimiento de la tasa de paro en el 5,9%, con lo que permanecería en el nivel más bajo desde julio de 2008. Por el momento, los datos semanales de subsidios por desempleo también confirman la impresión de la entidad presidida por Janet Yellen. En la última semana, las peticiones se han situado en las 287.000, con lo que acumulan siete consecutivas por debajo de las 300.000, algo que no se veía desde 2006.