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Bienvenida Mrs. Rousseff... El Banco de Brasil sube los tipos por sorpresa al 11,25%
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Bienvenida Mrs. Rousseff... El Banco de Brasil sube los tipos por sorpresa al 11,25%

El calendario electoral no va con el Banco de Brasil. Preocupado por la inflación, la entidad ha elevado el precio del dinero y ha impulsado con fuerza al real

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Un puñetazo en la mesa. A las primeras de cambio. Con la reelección de Dilma Rousseff para una segunda legislatura aún caliente, como si quisiese reforzar así su independencia y su credibilidad. Para que nadie ponga en duda que seguirá haciendo lo que haga falta para mantener a raya la inflación. Da la sensación de que todo esto es lo que ha ponderado el Banco de Brasil para, por sorpresa, haber elevado los tipos de interés en su reunión de octubre. Se esperaba que los mantuviera en el 11% en el que se encontraban desde abril, pero los ha aumentado en un cuarto de punto, hasta el 11,25%.

El carácter inesperado de esta medida deja una clara huella en el real, que a comienzos de semana había caído con fuerza tras la victoria de Rousseff en la segunda vuelta celebrada el domingo. Aupado por el banco central, se aprecia más de un 2,5% contra el euro, hasta los 3,02 reales, y un 2% contra el dólar, hasta los 2,40 reales.

A la bolsa brasileña también le sienta bien la medida, tal vez porque demuestra a los inversores que pueden confiar en que el Banco de Brasil seguirá haciendo su trabajo. El Bovespa ha subido más de un 2,5% y vuelve a estar por encima de los 52.000 puntos.

La institución monetaria, que tras nueve subidas consecutivas de los tipos entre abril de 2013 y el mismo mes de este año había pisado el frenado desde entonces, vuelve así a la carga. Lo hace para intentar aplacar una inflación que se encuentra en el 6,75%, cuando el objetivo de la entidad consiste en mantenerla entre el 2,5 y el 6,5%, con una meta central en el 4,5%.

El problema para Dilma Rousseff radica en que el endurecimiento de las condiciones monetarias puede debilitar aún más una economía que ya se encuentra en recesión, puesto que acumula dos trimestres consecutivos de contracción.

Un puñetazo en la mesa. A las primeras de cambio. Con la reelección de Dilma Rousseff para una segunda legislatura aún caliente, como si quisiese reforzar así su independencia y su credibilidad. Para que nadie ponga en duda que seguirá haciendo lo que haga falta para mantener a raya la inflación. Da la sensación de que todo esto es lo que ha ponderado el Banco de Brasil para, por sorpresa, haber elevado los tipos de interés en su reunión de octubre. Se esperaba que los mantuviera en el 11% en el que se encontraban desde abril, pero los ha aumentado en un cuarto de punto, hasta el 11,25%.

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