Es noticia
Más problemas para Gordon Brown: la falta de gasolina amenaza con paralizar el norte de Inglaterra
  1. Mercados
  2. Finanzas personales

Más problemas para Gordon Brown: la falta de gasolina amenaza con paralizar el norte de Inglaterra

No corren buenos tiempos para el primer ministro británico, Gordon Brown, a quien se le acumulan los problemas. A las duras críticas recibidas esta semana por

Foto: Más problemas para Gordon Brown: la falta de gasolina amenaza con paralizar el norte de Inglaterra
Más problemas para Gordon Brown: la falta de gasolina amenaza con paralizar el norte de Inglaterra

No corren buenos tiempos para el primer ministro británico, Gordon Brown, a quien se le acumulan los problemas. A las duras críticas recibidas esta semana por su polémica reforma fiscal, llegadas incluso desde sus propias filas, ahora se suma un escollo de no menos envergadura: la huelga de dos días en la refinería de Grangemouth, en Escocia, amenaza con provocar restricciones de combustible a conductores del norte del país.

La clave es si, como ha advertido BP, la huelga obliga a cerrar el oleoducto del Mar del Norte, “una infraestructura crucial” para el suministro de Escocia y el Norte de Inglaterra, según ha advertido Malcolm Wicks, el ministro británico de Energía. Es más, “no se puede garantizar que todas las gasolineras vayan a disponer de combustible”, concedió. Hicks pidió un comportamiento racional a la población: “Espero que la gente actúe con sentido común. Tiene que tener paciencia y mantener una actitud lógica”, según explicaba en una entrevista con la BBC recogida por el Telegraph.

El oleoducto en cuestión canaliza la mitad de la producción del Mar del Norte y necesita de la refinería de Grangemouth para su funcionamiento. Además, hay que tener en cuenta que, incluso una huelga que no alcanzara los dos días de duración, podría tener mayores consecuencias en el tiempo, en tanto la parada y arranque de la planta ralentiza el nivel operativo máximo. De hecho, ya se han hecho cálculos: cada día de parada tendría un coste de 50 millones de libras (unos 63,4 millones de euros).

Aún tiene Brown algunas horas para salvar los muebles. Está previsto que los 1.200 trabajadores del complejo petroquímico paren dos días a partir del domingo tras no llegar a un acuerdo sobre el programa de planificación de sus pensiones. No obstante, la Asociación de la Industria Petrolera, que incluye a gigantes como BP o Shell, aseguró que las reservas en Grangemouth son suficientes para abastecer Escocia durante los dos días de paro.

“El Partido Laborista se ha dado cuenta por fin de que cuenta con un perdedor como cabeza visible, no con un líder”, le lanzó el máximo representante de los tories David Cameron a Brown en el debate parlamentario del pasado miércoles. No fue más generoso The Wall Street Journal, que se cuestionaba ayer la necesidad de que el primer ministro acometiera una reforma fiscal que perjudica a los que tienen menos ingresos. “La cuestión no es ya si puede perder votos. Lo que cabe cuestionar es el juicio económico que llevó a Brown a meterse en este lío”, apuntaba.

No corren buenos tiempos para el primer ministro británico, Gordon Brown, a quien se le acumulan los problemas. A las duras críticas recibidas esta semana por su polémica reforma fiscal, llegadas incluso desde sus propias filas, ahora se suma un escollo de no menos envergadura: la huelga de dos días en la refinería de Grangemouth, en Escocia, amenaza con provocar restricciones de combustible a conductores del norte del país.

Gordon Brown