La mayoría de la gente recuerda lo que es trabajar sin internet y todos nos damos cuenta de la importancia y el cambio que esta herramienta ha supuesto, pero, en lo esencial, seguimos manteniendo una forma de trabajar tradicional: acudimos cada día a una oficina y pasamos en ella una serie de horas, por las que percibimos un salario...Pero este modelo puede tener los días contados. La crisis acelerará algunos cambios que ya estaban en marcha en algunos países, como la forma de trabajar y las relaciones laborales. El empleo será en el futuro más flexible y menos seguro, se trabajará por resultados y habrá más mujeres en la dirección de las empresas. Esto ya se percibe de forma clara en Estados Unidos, pero falta mucho para que el cambio se produzca en España.

Uno de los motivos por los que el modo de trabajar en el futuro tardará más en llegar a España es la “falta de confianza en los empleados por parte de los directivos”, destaca Pilar Nieto, directora de Organización y Personas de KPMG en España. Esta desconfianza pone freno a las distintas modalidades de teletrabajo y a la flexibilidad horaria. Además, como consecuencia de la crisis “se está controlando mucho más el día a día”, se vigila de cerca a los empleados.

Por otra parte, en España “existe una barrera cultural”, opina Nieto, para que se produzca un cambio como el que ya se aprecia en Estados Unidos. El mercado laboral tiene muchos más condicionantes, como en el resto de Europa, y es menos flexible. “Falta mucho”, dice la experta, que tampoco ve, en el corto plazo, que vaya a haber una presencia notable de mujeres en las direcciones de las empresas. Sin embargo, Nieto sí cree que “habrá a medio plazo una valoración más por objetivos que en función de una jornada laboral”.

Alejandro Gortari, socio de la firma de búsqueda de altos ejecutivos Zavala Gortari, considera que “va a haber ciertos cambios provocados por la situación actual, pero no va a haber una revolución”. Los directivos españoles están, por el momento, centrados en cómo salir de la crisis. “Ahora los directivos tienen que ir inventándose las soluciones todos los días”. Lo que sí ha detectado Gortari es que “cada vez se da más atención a la gente más capaz y preparada” en los niveles de dirección y considera que va a haber cambios estructurales.

Sobre la gestión del talento, Gortari cree que “es un tema recurrente” y “no es sencillo”, porque “hay que tener una cultura y abrirse a la gente de fuera”. Gortari coincide con Nieto en que en Europa hay limitaciones que impiden que el modelo de trabajo vaya a cambiar a medio plazo.

Sin embargo, Mariana Spata, responsable de área de Hays, sí ve indicios del cambio. Apunta que “el mercado tiende progresivamente a la especialización en todas las áreas de la empresa”. Spata cree que las empresas irán externalizando todos los servicios que no estén directamente relacionados con su actividad y “aumentará cada vez más el trabajo cualificado”. Además, “gracias a los avances tecnológicos y a la reducción de costes innecesarios, desaparecerán paulatinamente las oficinas físicas”.

Cómo será el trabajo en el futuro

Aunque jugar a adivinar el futuro es arriesgado, todo apunta a que en el terreno laboral se van a producir cambios estructurales importantes. En Estados Unidos llevan tiempo publicando artículos sobre el tema y todo apunta a que tras la crisis los cambios empezarán a notarse. El trabajo será más flexible, habrá más colaboraciones y servicios de autónomos y menos seguridad laboral.

El cambio es posible por las nuevas tecnologías de la información, un sector en el que la demanda de trabajadores aumentará, según los expertos. Según el Departamento de Trabajo de EEUU, habrá una gran oferta de puestos de trabajo en las áreas de comunicaciones e ingeniería informática hacia el año 2016. Se espera que en los próximos siete años el número de empleos en el sector de las tecnologías de la información crezca un 24%. 

Gracias a las nuevas herramientas, es posible el teletrabajo y la flexibilidad, ni el jefe ni los empleados (dependiendo de los puestos) tendrán que estar en la misma oficina durante un número determinado de horas. No sólo las mujeres buscan la conciliación laboral, el interés por equilibrar la vida fuera y dentro del trabajo es una tendencia que irá en aumento. Distintas firmas, como Capitol One o Best Buy confirman que cuando una empresa da más libertad a sus trabajadores, la productividad aumenta.

Los expertos esperan que tras la crisis la mayoría de los licenciados estadounidenses no opten por una carrera financiera, como sucedía hasta ahora, sino que busquen otras posiciones, lo que hará florecer nuevos sectores. Además, consideran que se premiarán los conocimientos tecnológicos y las actitudes analíticas. También ocuparán un papel central el talento, el valor añadido y el espíritu emprendedor.

Por otra parte, muchos analistas creen que habrá más mujeres dirigiendo empresas, basándose en resultados de diferentes estudios, como el del grupo de investigación Catalyst sobre 350  empresas de la lista Fortune de 500 mayores compañías, que pone de relieve que las empresas que tenían más mujeres directivas, incrementaban su valor. Y diferentes estudios realizados por las universidades de Cambridge y Pittsburg sugieren que las  mujeres gestionan con más cuidado y se fijan más en el largo plazo que los hombres.

Además, los expertos destacan que como consecuencia de la crisis, las empresas se centrarán más en su negocio central y subcontratarán el resto. Y las empresas ofrecerán menos beneficios sociales (como planes de pensiones o seguros médicos), según estudios consultados por Market Watch.

12.  Brisio31/05/2009, 19:56 h.

Pues claro que nunca se producirá en España. Pero no porque aqui seamos mas burros o porque tengamos unos directivos de pacotilla de los cuales se mofan en toda Europa [excepto algunos casos]. El problema es que en este país no tenemos empleados a los que poner a "teletrabajar" porque aqui todos los trabajos corresponden a sectores que necesitan presencia fisica: construccion, pesca, agricultura, ganadería, turismo.... Por lo tanto habria que tener una masa laboral a la cual poner a "teletrabajar". ¿Nuevos sectores? Claro que los habrá, los copiaremos de los que se vayan creando en USA y resto de paises de Europa. Serán profesiones que llegaran con retraso a España y nos llevarán ventaja. ¿Todos autonomos? Seguramente, pero la regulacion laboral respecto a esta figura deberá cambiar también y para eso, ufff......, con el Corbacho,...., repuffff. ¡Ah! Y no nos olvidemos que para "teletrabajar" o trabajar en cualquier sitio hace falta infraestructura tecnologica: banda ancha en toda España [y no solo en las capis, que estoy hasta los huevos], a buen precio [y no con el ADSL mas caro de Europa] y con desarrollos propios no importados, para que el manido I+D+i empiece a funcionar...

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11.  dubar29/05/2009, 21:19 h.

Esto de trabajar on-line suena muy bonito, y es factible llevando tu propio negocio, pero creo q será imposible en el caso de las empresas.

Pienso q si tentamos a la suerte lo q conseguiremos es q reemplacen a 100 personas por un software, q los hay para todo y así engrosaremos las listas del desempleo.

Esto si sería buena idea en el caso de los funcionarios, pero creo q todavía no hay software q pueda reemplazarlos.

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10.  V. HUGO29/05/2009, 18:58 h.

Todo esto del talento, etc. es recurrente. Una filfa, una mentira más para tenernos entretenidos. En España todo funciona por clanes, donde el talento ni está ni se le espera [me refiero a la brillantez, la creatividad, la capacidad para dirigir equipos heterogeneos, etc.] el único talento es el de que "he llegao y estos son los mios" que además son "similar to me" mi empresa se gasta un pastón en marketing interno y externo, que si best place to work y otras gilipolleces, y la verdad es que cuando la gente puede hablar en un círculo de confianza, estan hasta los huevos de tanta desfachatez, tanto derroche y tanta falta de categoria personal y profesional.

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9.  servet29/05/2009, 16:33 h.

#7#8 Comprendo perfectamente sus caso. Es de libro, su único fallo fue dejar en evidencia a los jefes, eso se paga muy caro. A usted le toco despido, en otros casos y en general en la Administración es el acoso laboral en todas lsa formas en las que se le pueda imaginar. Hay gente que puede y huye, pide traslado "voluntario", otros son carne de psiquiatra, a veces incluso no se recuperan.

Sus jefes serían uno niñatos pero la gran mayoría no bajan de los 55, y muchos no saben ni lo que es un Pc. Así nos va, innovación cero, trabajo en equipo cero, distribución racional de la carga de trabajo cero,...en cuanto a la de la secretaria, faltaría más, quién sino haria mejor la labor de descredito y difamación, ah! si, se me olvidaba el conductor del Jefe, otra figura de mucho peligro.

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8.  analista29/05/2009, 14:39 h.

#7 perdón, dijeron que era mejor que el resto de cliente NO lo supiera, para ellos era una vergüenza, y curiosamente, es la ministra de Cª y tecnología, o sea de innovación. Para ellos era una vergüenza que se supiera. Son anacrónicos, machistas, pijos, babosos, incultos, millonarios, estresados, insolidarios, despectivos, ignorantes, superficiales, reaccionarios, de misa de domingo y de doble vida por la noche, pero lo peor de todo es que semejantes defensores a ultranza de la autorregularización y la no intervención de los organos de control de ningún tipo, tienen en sus manos el destino de miles de trabajadores y todo el dinero. En mi caso eran expertos en fondos de inversión, en capital riesgo, en grandes especulaciones, tienen un cojo-departamento de asesoría fiscal [evasión de impuesto, blanqueo,etc etc] y otro de laboral [para asesorar en EREs, despidos, etc]. Los clientes, obviamente, son empresas, nunca particulares a no ser que sean millonarios, pues jamás podrían pagarlo. Son un grupo original de siete niñatos más el jefe, ahora son todos socios y he visto como la secretaria original del grupo, tiene más influencia que cualquier mando medio, siendo experta en difamación

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