Arnault, el hombre que cambió el ladrillo por el brillante, corona su sueño con Dior

El rey del lujo pone la guinda a su imperio. El millonario Bernard Arnault se ha hecho con el control total de Christian Dior tras comprar el 25,9% que le faltaba 12.100 millones de euros en una de las mayores operaciones de su historia, según publica Bloomberg este martes. Una operación que se llevará a cabo en dos partes y que podría completarse en el segundo semestre de 2017, para que el magnate pueda simplificar la complicada estructura propietaria que tenía hasta ahora Christian Dior.

La reacción en bolsa no se ha hecho esperar y los títulos de LVMH subían cerca de un 4%, mientras que los de Christian Dior se disparaban hasta un 13%. Y es que la oferta de Arnault supone valorar en 260 euros la acción -pagará 172 euros en efectivo y 0,192 acciones de Hermès Internacional-, según un comunicado remitido por la compañía. No en vano, este precio supone una prima del 15% sobre el precio en el que cerró ayer la icónica marca parisina.

Esta operación viene alentada, además, por el resurgir del gusto de las grandes fortunas chinas por el lujo. Pocos lo saben, gran parte de las millas de oro de las principales ciudades del mundo le pertenecen de una forma u otra. Y es que hablar de lujo, en cualquiera de sus vertientes, es hablar de Arnault. Así, en una jornada de compras en la Quinta Avenida con varios ceros en la cuenta corriente para gastar, lo más fácil es que acabes portando varias de sus bolsas, ya sea de moda (Loewe, Moynat, Louis Vuitton, Fendi, Celine, Christian Dior, Kenzo, Marc Jacobs, Thomas Pink, Nikolas Kirkwood, Edun, Emilio Pucci, Givenchy, Loro Piana y Berluti), cosmética y perfumería (Guerlain, Acqua di Parma, Parfums CD, Givenchy Parfums, Benefits, Make up for ever, Fresh y Maison Francis Kurkdjian) o joyería (Chaumet, Tag Heuer, Zenith, Bvulgari, Fred y Hublot).

Todo para meterlo en una maleta Rimowa y acabar la jornada regando la cena con un buen vino de Bodega Numanthia, un champagne Dom Pérignon o Moët Chandon o un buen cognac de Hennessy, como algunos de los ejemplos de la amplia cartera que tiene el holding de vinos y bebidas espirituosas.

Pero su imperio no acaba ahí. ¿Qué quieres hacer un viaje de ensueño? Pues también LVHM, con DFS, líder mundial en la organización de viajes de lujo... ¿especies? las más exquisitas están en La Grand Epicerie de Paris... ¿Galería comercial? Le Bon Marché Rive Gauche... ¿Prefieres un crucero? Starboard Cruise Services. ¿Te apetecen unos dulces? Pues qué mejor que volar a Italia a degustar unos cuantos pasteles de Cova, la confitería más antigua del país. ¿O quieres atracciones? En ese caso hay que visitar el Jardin Acclimatation de París... Y la lista para los más sibaritas podría seguir.

Del ladrillo al brillante

Con una fortuna personal de 46.300 millones de euros, el destino de Arnault no era el lujo. Al acabar su formación, entra a trabajar en la empresa de obras pública de su padre, Ferret-Savinel. Pero le convence para vender las actividades de construcción por 40 millones de francos y reorientar su actividad hacia el mercado inmobiliario, fundando Férinel, especializada en apartamentos turísticos en la costa.

Tras emigrar a Estados Unidos, invierte la mayor parte de la fortuna familiar, 90 millones de francos, en comprar Financiére Agache, una empresa fiducidaria a través de la cual pasa a controlar el grupo Boussac en pleno hundimiento de la industria textil que, a su vez, era propietaria de Christian Dior. No obstante, la adquisición completa de la marcha de lujo estaba sujeta a la compra del grupo Boussac en su totalidad y tras su reestructuración, sus actividades textiles se venden a Prouvost.

Paralelamente, aprovecha el crack del 87 para comprar acciones de LVMH, el nuevo grupo que había surgido de la fusión de Moët Hennesy y Louis Vuitton. Poco después, alcanza el 25% convirtiéndose en el accionista de referencia de la compañía. Así, tras ponerse al frente de Dior y Louis Vuitton a finales de los 80, empieza a ampliar su imperio del lujo sumando compañía tras compañía, firma tras firma. España no queda tampoco al margen y en 2015 su fondo inversor compró el 49% de El Ganso antes de cerrar su oficina de Madrid.

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Marcos Lamelas. Barcelona

En paralelo a la oferta de la familia Arnault, LVMH y Christian Dior han rubricado un memorándum de entendimiento referido a la venta de Christian Dior Couture a LVMH por 6.500 millones de euros, un precio que representa 15,6 veces el Ebitda ajustado anual de la compañía. De este modo, Christian Dior Couture se reagrupará en el seno de LVMH con Parfums Christian Dior, que ya forma parte del grupo.

"El proyecto representa un importante hito para el grupo", declaró Bernard Arnault, presidente y consejero delegado de LVMH, quien destacó que las transacciones permitirán la simplificación de estructuras y el fortalecimiento de la división de marroquinería de LVMH gracias a la adquisición de Christian Dior Couture.