Éstas son las firmas que pondrán nota a los edificios con el nuevo 'rating' inmobiliario

La profesionalización del sector inmobiliario está a punto de dar otro importante paso adelante con el nombramiento de los Moody's y Standard&Poor's (S&P) del sector inmobiliario. La próxima semana, la AEO (Asociación Española de Oficinas) homologará a las 13 firmas que han solicitado acreditarse como evaluadoras del popularmente bautizado 'rating' del sector inmobiliario.

A partir de este mismo año, las mayores compañías inmobiliarias del país, empezarán a calificar sus edificios conforme a los 45 parámetros técnicos que contempla este nuevo estándar y que miden la arquitectura, instalaciones, dotaciones singulares, antigüedad y certificaciones de los inmuebles. Cada uno de estos parámetros recibe una puntuación (óptima, intermedia o baja) y de su suma resultará la calificación definitiva del edificio: C, B, B+, A y A+.

Las firmas que han solicitado a AEO homologarse como evaluadoras son Tasvalor, Valladares Ingeniería, JG Ingenieros, UNEN, Proteyco, Bovis Project Management, Acerta Project Management, Gesvalt, CBRE, ARUP, Aprotecnic, Artelia y JLL. La próxima semana, la AEO acreditará si cumplen con todos los requisitos establecidos para poder calificar la calidad de los inmuebles conforme a sus parámetros.

Además, para garantizar transparencia del proceso, la AEO seleccionará a una auditora técnica, que será la encargada de certificar cada informe que realicen las firmas evaluadoras. Euroconsult, Eurocontrol y SGS Tecnos son las firmas que se han postulado para hacer este trabajo, y la asociación elegirá a una de ellas también la próxima semana.

Todas las evaluadoras deberán recibir ahora la formación en el estándar desarrollado por la asociación, y sus certificaciones, en caso de no superar la auditoría técnica, darán lugar a la apertura de un proceso de alegaciones.

Grandes patrimonialistas como Merlin, Mutua, Colonial o Pontegadea han unido fuerzas para clarificar la calidad técnica de los edificios

La creación de un rating de edificios es una iniciativa impulsada por los grandes caseros, socios de AEO, entre los que figuran patrimonialistas como Merlin, Pontegadea, Mutua Madrileña, Colonial o GMP; y grandes empresas como Telefónica, Banco Popular, BBVA o Iberdrola.

Con esta iniciativa, que se suma al primer estándar español para medir las superficies de oficinas, elaborado por Inmospace y compatible con modelos internacionales como RISC y Boma, se persigue profesionalizar el sector, dotándolo de mayor transparencia y rigurosidad.

Además, al clarificar tanto la superficie como la calidad técnica de los edificios, las empresas de la AEO persiguen clarificar qué valor objetivo tienen sus inmuebles y qué alquileres deben pagarse por ellos.

En toda España, el sector de las oficinas y los centros de trabajo suma 30 millones de metros cuadrados, valorados en 65.000 millones de euros, generando unas rentas anuales de 4.500 millones de euros, según estimaciones de la AEO. A pesar de estas cifras, se trata de un mercado carente de consenso en aspectos tan básicos como qué es un metro cuadrado o un edificio de calidad.