El iPhone lo puede todo: Apple sube un 12% en 4 días y se coloca en máximos anuales

Apple resurge en este final de verano como el ave fénix. La compañía es una máquina total de hacer dinero. Su generación de caja es enorme y le ha valido desde hace años para situarse como la compañía con mayor liquidez del mundo, con más de 200.000 millones de dólares. No es de extrañar que lleve años como la empresa con mayor capitalización bursátil.

En lo que va de semana se ha revalorizado casi un 12%. Ha sido el valor más alcista todos los días dentro del índice Dow Jones en el que cotiza. El propio selectivo apenas se ha elevado en estos días medio punto porcentual. Con este rally alcista, Apple recupera los 600.000 millones de dólares de valor en el mercado y se distancia de Alphabet, la matriz de Google (538.000 millones de dólares). Ahora mismo está en máximos del año y más cerca de su máximo histórico.

El producto estrella de Apple ha vuelto para tirar del carro y poner a la empresa de Cupertino en órbita. El iPhone 7 llegaba con muchas dudas. Su presentación no fue recibida con demasiada algarabía entre los expertos. Mismos tamaños y diseño presagiaban una vez más falta de sorpresa. Pero la realidad es tozuda. Los expertos que han podido probarlo en los últimos días hablan mejor de lo que se esperaba. No obstante, más allá de opiniones, las cifras vuelven a un lugar conocido para Apple: a los récord.

Las empresas de telecomunicaciones que van a comercializar el terminal, T-Mobile y Sprint, señalaron esta semana que han recibido cuatro veces más de pedidos que con el anterior serie, la del iPhone 6. Mañana llegará a la calle y quien quiera hacerse con uno tendrá que esperar. La propia Apple ha informado de que se le ha agotado toda la producción destinada al lanzamiento. Por si todo esto fuera poco, su principal competidor, Samsung, pasa por un momento delicado de credibilidad dado el problema de las baterías de su Galaxy Note 7. Algunos terminales llegaron a explotar, lo que ha desatado un crisis para la marca.

Las empresas que van a comercializar el terminal, T-Mobile y Sprint, señalan que han recibido 4 veces más de pedidos que con la anterior serie, la de iPhone 6

Con estos datos, los inversores han vuelto a apostar con fuerza por las acciones de Apple.

En lo que va de año, sus detractores empezaban a ver cierto agotamiento. Las dos últimas presentaciones trimestrales de resultados de la compañía iban en línea con sus presagios. Con la figura de Steve Jobs cada vez más lejos, algunos comenzaban a notar cierta falta de capacidad de sorprender. Además, otros actores tecnológicos estaban ya pisándole los talones. No en vano, Google llegó a superar a la firma de la manzana en capitalización bursátil a principios de 2016.

Apple reportó en 2016 cifras que por primera vez no superaban a las anteriores. Las ventas de iPhones, aunque seguían siendo enormes, habían tocado techo. Pero el séptimo de sus smartphones ha sido un soplo de aire fresco en una año de sin sabores. Con las ventes de nuevo disparadas, la multa que ha impuesto recientemente la Comisión Europea a la firma que lidera Tim Cook es más un problema reputacional que económico, a pesar de que se le reclaman 13.000 millones de euros en impuestos no pagados.

Ahora, muchos expertos consideran que Apple seguirá siendo el líder en la medida en que sea capaz de innovar e invertir bien su ingente liquidez. Por el momento, el iPhone sigue siendo el rey Midas que da brilo a la manzana.