'No mas Artur': RBS afirma que el 'procés' presiona para una gran coalición nacional

El melón abierto en Cataluña con el nuevo 'muy honorable', Carles Puigdemont, que en su discurso de investidura ha demostrado que va a por todas tras darse un plazo de 18 meses para construir la república catalana, ha vuelto a poner el foco del mercado en el proceso independentista.

Sin embargo, mientras algunos ven el vaso medio vacío y aumentan la presión sobre la deuda española -el interés del bono a diez años ha repuntado con la prima ya claramente por encima los 120 puntos básicos- otros defienden que no hay mal que por bien no venga y que la crisis catalana puede servir para desbloquear la formación de un Gobierno a escala nacional tras el resultado de las pasadas elecciones del 20 de diciembre.

En este sentido, Alberto Gallo, director de análisis de crédito de RBS, en su último informe que titula 'No mas Artur', defiende que “la necesidad de unidad nacional contra la separación de Cataluña aumentará la urgencia de formar un Gobierno para España, incrementando la presión sobre el PSOE”, explica el experto.

Y es que la retirada de Artur Mas y la investidura de Puigdemont como presidente de la Generalitat han evitado la celebración de nuevas elecciones en la región y pisado el acelerador del proceso independentista, con la coalición de Junts pel Sí y la CUP.

Con ello, han puesto más difícil a Pedro Sánchez rechazar una gran coalición, a pesar de que el secretario general del PSOE sigue insistiendo en que sigue siendo más importante “el cambio”, mientras busca el apoyo de Podemos y Ciudadanos para liderar un gobierno de izquierdas.

Para Gallo, “más claridad en Cataluña puede acelerar la formación de un Gobierno nacional dando una razón a los principales partidos para que dejen a un lado sus diferencias y luchen juntos contra la secesión regionalista”, explica. Y añade que, aunque Sánchez continúa asegurando que votará en contra de Rajoy, necesita a Podemos y Ciudadanos para ser presidente. “Pero la independencia catalana es una clara línea divisora”.

No en vano, “Podemos se ha comprometido a celebrar un referéndum en Cataluña descartando así una alianza con un incondicional pro-unión Ciudadanos. Sin Ciudadanos, un gobierno PSOE-Podemos necesita el apoyo de los partidos independentistas catalanes, al menos, con su abstención”, con lo que Sánchez está metiéndose en un callejón sin salida, más cuando ha afirmado que su partido va a apoyar a Rajoy en cualquier actuación contra la ilegal independencia catalana.

La recuperación no está en juego

Con todo, desde RBS apuestan a que el final de la historia pasará por nuevas negociaciones que otorguen a la región una mayor autonomía financiera, más que una segregación del territorio por muchas razones que van desde el inmenso coste que supone la creación de un estado independiente, a las dudas de que la Eurozona lo declare estado ya que, según los tratados de Lisboa, los 28 miembros, incluida España, tienen que aprobar la independiencia.

Por ello, desde el departamento de análisis del banco de inversión defienden que “los titulares sobre el riesgo político van a seguir creando volatilidad en los diferenciales de crédito, pero es difícil que descarrile la recuperación económica de España”, afirman. “Bajo nuestro punto de vista, el riesgo político de España es exagerado frente al riesgo real de inestabilidad”. Así, su apuesta sigue siendo invertir a largo plazo en el país, en tanto que va a seguir haciéndolo mejor que el resto de la Eurozona. RBS, además, destaca su preferencia por España frente a Italia y, sobre valores concretos, resalta Caixabank.