Es noticia
Sacyr suspende la emisión de bonos de las autopistas de Itinere por alto riesgo
  1. Mercados
por 500 millones de euros

Sacyr suspende la emisión de bonos de las autopistas de Itinere por alto riesgo

La constructora ha tenido que echar marcha atrás una colocación de renta fija para refinanciar los 1.176 millones de euros de deuda de su concesionaria por ser valores de grado especulativo

Foto: El presidente de Sacyr, Manuel Manrique. (Reuters)
El presidente de Sacyr, Manuel Manrique. (Reuters)

Sacyr se las prometía muy felices para refinanciar en tiempo récord la millonaria deuda de Itinere, la compañía concesionaria de autopistas que no le ha dado más que disgustos desde hace casi 10 años. La constructora había contratado a Deutsche Bank para lanzar una emisión de bonos por al menos 500 millones para abaratar y alargar el vencimiento de los 1.176 millones de pasivo. Pero la operación ha tenido que ser cancelada por baja solvencia.

Según han confirmado fuentes financieras, Deutsche Bank, con el apoyo de JP Morgan, banco asesor de Itinere, salió al mercado para colocar 500 millones en títulos de renta fija de la compañía dueña de las autopistas del norte de España. Pero la respuesta del mercado fue muy tibia, con poco interés por parte de los inversores por suscribir la emisión a un coste que fuera inferior al tipo de interés que la filial de Sacyr paga por el préstamo sindicado que refinanció en 2013.

Hace dos años, en plena crisis de España y con una caída continuada de los tráficos en la mayoría de las autopistas nacionales, Sacyr, Abanca, Kutxabank y Corsair, los tres mayores accionistas de Itinere, salvaron in extremis un 'match-ball' ante el vencimiento inminente de una deuda imposible de afrontar. Mediobanca y Rothschild, los dos asesores de la concesionaria, consiguieron sacar adelante la refinanciación, pero a cambio tuvieron que aceptar el pago de un tipo de interés del índice de referencia más 300 puntos básicos.

Dada la mejoría de la circulación de vehículos en 2014 y especialmente en lo que va de 2015 gracias al resurgir de la economía, Sacyr y sus socios consideraron que era el momento oportuno para renegociar de nuevo las condiciones del préstamo y amortizarlo parcialmente con la emisión de bonos. Es decir, pagar menos a Banco Santander, Popular, Sabadell, Caixabank, BNP Paribas y Société Générale y reducir la dependencia de estos acreedores cambiando deuda bancaria por renta fija. Una estrategia que han seguido la mayoría de las empresas constructoras y eléctricas en los últimos años, dados los problemas que han tenido que afrontar en los años más ásperos de la crisis.

Sin embargo, el grupo presidido por Manuel Manrique ha tenido que retirar de momento la colocación de los 500 millones en bonos de Itinere y centrar todo su esfuerzo en refinanciar los 1.176 millones con los mismos acreedores de siempre. No obstante, algunas fuentes indican que parte de la deuda en manos de los bancos originales ya ha pasado a fondos oportunistas, que suelen ser más beligerantes en las negociaciones, como se ha demostrado en compañías como Abengoa, Codere, Isolux o TP Ferro.

Fuentes financieras apuntan a que Itinere conseguirá renovar de nuevo el préstamo sindicado, pero no al precio que inicialmente había estimado el grupo dirigido por Javier Pérez Gracia. Un contratiempo que dificultará más la venta de la concesionaria por parte de Sacyr y el resto de socios, que han intentado desprenderse de estas autopistas varias veces en los últimos tres años. El 'holding', controlado por Corsair, el fondo heredero del disuelto Citi Infraestructure, arrastra una deuda global de 3.400 millones.

Hace un mes, Standard & Poor's y Fitch le asignaron una calificación crediticia de grado especulativo o de alto riesgo, de BB-, porque, aunque afirman que la sociedad tiene unas buenas perspectivas de negocio por la recuperación del tráfico en un entorno regulatorio transparente, alertan sobre el elevado apalancamiento de la compañía, de alrededor de 14 veces sobre el ebitda (resultado bruto de explotación). A cierre de 2014, la cifra de negocio de Itinere ascendía a 268,2 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 1,6% respecto al ejercicio anterior; con un ebitda de 208 millones, un 3,5% más.

Sacyr se las prometía muy felices para refinanciar en tiempo récord la millonaria deuda de Itinere, la compañía concesionaria de autopistas que no le ha dado más que disgustos desde hace casi 10 años. La constructora había contratado a Deutsche Bank para lanzar una emisión de bonos por al menos 500 millones para abaratar y alargar el vencimiento de los 1.176 millones de pasivo. Pero la operación ha tenido que ser cancelada por baja solvencia.

Itínere Manuel Manrique Refinanciación
El redactor recomienda