Es noticia
La bolsa resiste a Podemos... pero sigue con la mosca detrás de la oreja
  1. Mercados
LOS ANALISTAS DAN POR TERMINADA LA EUFORIA

La bolsa resiste a Podemos... pero sigue con la mosca detrás de la oreja

El terremoto electoral no ha tenido excesivas consecuencias en bolsa esta semana, pero sí en la mentalidad de los inversores: se acabó la alegría y los próximos movimientos políticos serán cruciales

Foto: Pablo Iglesias, líder de Podemos. (Reuters)
Pablo Iglesias, líder de Podemos. (Reuters)

El arranque de la semana en bolsa hacía temer lo peor, con una caída del 2% en el Ibex el lunes por culpa de la resaca electoral, con el fuerte avance de Podemos (incluyendo la conquista de los ayuntamiento de Madrid y Barcelona) y el desplome de los partidos mayoritarios. Estas caídas continuaban el martes, pero de forma mucho más moderada (0,7%) con la vuelta del resto de Europa tras el festivo del lunes, e incluso el miércoles el mercado lograba un fuerte repunte (+1,7%) alentado por la posibilidad de un acuerdo de Grecia con sus acreedores. Y el jueves y el viernes se mantuvo tranquila con descensos menores que los del resto de Europa. El saldo semanal es un descenso del 2,91%

Así pues, la sangre no ha llegado al río... de momento. Porque las elecciones sí han tenido el efecto, según coinciden todos los participantes en el mercado, de enfriar radicalmente los ánimos sobre España. Se acabó la euforia que ha permitido que se batan récords de salidas a bolsa en esta primera mitad de año, según advierte el mismísimo Santander. Las grandes gestoras internacionales han llamado a consultas a sus directivos en España y todo el mundo ha congelado las inversiones que dependan del BOE hasta después de las generales por lo que pueda pasar, como ha informado El Confidencial.

Los inversores extranjeros ya tenían "la percepción de que los mercados están caros y que sólo están sostenidos por el exceso de liquidez", y "desde hace meses, ya había bastante preocupación por la gobernabilidad y los casos de corrupción, pero habían seguido apostando por España", según Íñigo Bastarrica, director de Equity Capital Markets de Banco Santander. Después de las elecciones, "se ha incrementado la imprevisibilidad de cara al futuro . Lo importante ahora es ver cómo se van a ir formando los Gobiernos locales y regionales, y si eso sube la cuota de impredecibilidad de cara a las generales o no".

Los gestores y bancos de inversión se muestran divididos entre los que creen que lo ocurrido en España tampoco es para tanto y que no hay que exagerar, y aquellos que piensan que sí hay motivos para preocuparse seriamente. Entre los primeros, se encuentra la mayoría de los inversores extranjeros -"que hacen un análisis muy simplista", según el CEO de una empresa cotizada-, en especial los alemanes: "Allí están convencidos de que habrá una gran coalición entre PP y PSOE como la que se hizo allí. No entienden por qué en España sería mucho más difícil, casi impensable", explica un banco privado internacional.

PP y PSOE mantienen la mayoría

El argumento de estos analistas es que, pese a lo ocurrido en Madrid y Barcelona, los dos grandes partidos mantienen una holgada mayoría de votos y uno de los dos será el que gobernará a partir de noviembre. Asimismo, ponen en duda que el PSOE vaya a formar un bloque alegremente con Podemos para gobernar ayuntamientos y comunidades, porque "es una estrategia muy arriesgada para los socialistas", según Kepler Cheuvreux.

Pimco se suma a esta lectura: "La cuestión es su España puede elegir un Gobierno radical de izquierda en las generales que replique al de Syriza en Grecia. Las posibilidades de un resultado así son muy escasas. En primer lugar, según las encuestas, Podemos sigue por detrás de los dos partidos del establishment. En segundo lugar, el sistema electoral español, al contrario que el griego, no asigna una gran prima al ganador de las elecciones. Esto significa que Podemos necesitaría buscar una alianza con un partido moderado para llegar al poder incluso en el (improbable) escenario de que obtenga la mayoría en las generales".

Riesgo para la recuperación económica

El otro bando sí cree que hay motivos para la preocupación, en especial para los sectores regulados (como demuestra la caída de las eléctricas esta semana), la banca (estos partidos apoyan numerosas medidas en su contra) y el inmobiliario, muy afectado por los nuevos Gobiernos municipales. Lo que más temen ees que en el nuevo Congreso no va a haber ningún partido con mayoría suficiente para continuar el impulso reformista y el PP tampoco se va a atrever a ir más allá en lo que queda de legislatura a la vista del batacazo que se ha pegado en las municipales. Y el temor de algunos, como Morgan Stanley, es que este parón reformista afecte a la recuperación económica.

Así lo cree N+1, que considera que las políticas conjuntas de PSOE y Podemos "van a estar mucho menos orientadas a las reformas y van a ser mucho menos market friendly que las del PP. A su juicio, el giro a la izquierda, el incremento de la fragmentación y la elevada incertidumbre sobre las generales "suponen un riesgo de dañar la mejoría económica". Hasta Moody's admite que una ruptura de la continuidad de las políticas actuales tendría consecuencias para España.

Vídeo: Moody´s alerta de la ruptura de la continuidad política en España

Los pactos electorales, cruciales

No todo el mundo está de acuerdo: José Ramón Iturriaga, de Abante, opina que las reformas más importantes ya se han hecho y que “no se va a poder dar marcha atrás en estas reformas independientemente de quien gane; es el peaje de estar en la unión monetaria que, por otra parte, tiene muchos beneficios”. Independientemente de quién tenga razón, todo el mundo coincide en que los próximos meses serán cruciales para nuestro mercado: "Lo importante ahora es ver cómo se van a ir formando los Gobiernos locales y regionales, y si eso incrementa la cuota de impredecibilidad de cara a las generales o no", concluye Bastarrica.

En todo caso, España ha dejado de ser el mercado favorito para buscar el crecimiento que no se da en el resto de Europa. Después de las elecciones ya no se nos percibe como un país seguro, algo que confirma la prima de riesgo de nuestra deuda pública: se ha disparado más de un 20% desde el jueves de la semana pasada, hasta cerrar el viernes 135,5 puntos básicos respecto al bono alemán, por encima del nivel alcanzado en el susto del 21 de abril. Un claro mensaje de alerta.

El arranque de la semana en bolsa hacía temer lo peor, con una caída del 2% en el Ibex el lunes por culpa de la resaca electoral, con el fuerte avance de Podemos (incluyendo la conquista de los ayuntamiento de Madrid y Barcelona) y el desplome de los partidos mayoritarios. Estas caídas continuaban el martes, pero de forma mucho más moderada (0,7%) con la vuelta del resto de Europa tras el festivo del lunes, e incluso el miércoles el mercado lograba un fuerte repunte (+1,7%) alentado por la posibilidad de un acuerdo de Grecia con sus acreedores. Y el jueves y el viernes se mantuvo tranquila con descensos menores que los del resto de Europa. El saldo semanal es un descenso del 2,91%

Ibex 35 Moodys Prima de riesgo
El redactor recomienda