Wall Street resiste en plano la resaca de la fiesta organizada por la Reserva Federal

Wall Street consiguió resisitir en plano la resaca de la fiesta que ayer patrocinó la Reserva Federal después de anunciar que rebajará hasta 75.000 los millones que de manera mensual inyecta en la economía estadounidense. La medida desató las compras en el parqué y permitió que el Dow Jones y el S&P 500 se anotaran nuevos máximos históricos, por lo que en la sesión de este jueves cabía esperar que los inversores se decantaran por las ventas.

Y así comenzó la jornada, pero a medida que ésta fue avanzando las ventas remitieron hasta el punto de que el Dow Jones consiguió incluso avanzar un 0,07%, con lo que se anotó un nuevo máximo en 16.179 puntos. El S&P 500, por su parte, se dejó un 0,06% y pudo mantenerse por encima de los 1.800 puntos, mientras que el Nasdaq retrocedió un 0,29%, hasta los 4.058 puntos.

Entre las noticias económicas de la sesión destacó que las solicitudes del subsidio por desempleo en Estados Unidos aumentaron en 10.000, hasta 379.000, el dato más alto desde finales de marzo. Este dato es solo aparentemente negativo, pues refleja las fluctuaciones que habitualmente ocurren en la temporada de fiestas cuando las empresas contratan trabajadores temporales, que luego son despedidos.

Por valores, y dentro del Dow Jones, Wal Mart lideró las caídas al dejarse un 0,91%. Microsoft retrocedió un 0,87% y McDonalds completó el trío con una caída del 0,83%. En el capítulo de subidas destacaron Chevron, que avanzó un 1,32%, Walt Disney, que repuntó un 1,07%, e IBM, que subió un 0,86%.

En el Nasdaq, Gogole avanzó un 0,14%, lo que le permitió llegar a los 1.086 dólares y anotarse un nuevo máximo histórico. Por su parte, Facebook se dejó cerca de un punto porcentual y cayó a los 55,05 dólares después de que su cofundador, Mark Zuckerberg, anunciara que venderá 41,3 millones de acciones por un valor de 2.300 millones de dólares.

En otros mercados, el petróleo de Texas repuntó un 1%, hasta los 98,77 dólares por barril. La deuda estadounidense, afectada directamente por la rebaja de compras de la Fed, elevó su rentabilidad y el bono a 10 años está ya en el 2,93%, niveles que no se registraban desde septiembre. Por último, el euro se depreció un 0,2% y se acercó a los 1,365 dólares.