El truco del almendruco de las mediciones televisivas

En la actualidad las mediciones televisivas diarias en España las realiza la empresa Kantar, compañía que tiene instalados unos cuatro mil audímetros esparcidos por todo el territorio nacional, que son los que permiten extrapolar luego las audiencias globales a diario en el mundo televisivo español.

Es la única posibilidad de saber qué programas y canales ven los ciudadanos de España, país que más horas consume delante del televisor de toda Europa.

Pues bien, Kantar es una empresa a la que Atresmedia (Antena 3) y Mediaset (Telecinco) pagan 30 veces más que las televisiones pequeñas, no pueden ser accionistas, pero la sustentan económicamente. Es decir, son juez y parte a la hora de analizar dichas audiencias.

Medios del sector consideran que es altamente “casual” que Antena3 y Telecinco empaten todos los meses y que canales menores propiedad de ambos grupos (Nitro, Siete, Divinity…), que generalmente ofrecen repeticiones de sus cadenas de referencia, obtengan el doble de telespectadores que otros que ofrecen al espectador programas en directo o de actualidad.

Es lo que se ha dado en llamar 'duopolio' televisivo español bajo la batuta de José Manuel Lara (Planeta) y Paolo Vasile (Mediaset). Un duopolio que ahora presiona al Gobierno por dos cuestiones: una, evitar la vuelta de la publicidad a Televisión Española; y dos, que el mismo Gobierno del Partido Popular no les restrinja canales tras la sentencia del Tribunal Supremo declarando, en parte, nulas las adjudicaciones llevadas en su día por el de José Luis Rodríguez Zapatero.

Medios técnicos del sector audiovisual consideran que, en la actualidad, la tecnología aplicada ofrece alternativas más fiablespara poder ofrecer resultados de la audiencia televisiva diaria, y subrayan que la oposición de los dos grandes grupos a establecer otro tipo de mediciones puede comprenderse por cuanto les afecta de forma directa.

No hay que olvidar que son esas audiencias las que marcan la pauta de la inversión publicitaria, así como las tarifas que se aplican. Están en juego millones de euros.