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La trama Rus salpica a los Suñer, la familia del industrial secuestrado por ETA en 1981
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OPERACIÓN TAULA

La trama Rus salpica a los Suñer, la familia del industrial secuestrado por ETA en 1981

La UCO investiga los contratos para construir piscinas cubiertas de Clásica Urbana, sociedad que preside Alberto Campos, nieto del empresario y hermano del expiloto de F-1, Adrián Campos.

Foto: Proyecto inmobiliario de la firma Clásica Urbana (clasicaurbana.com)
Proyecto inmobiliario de la firma Clásica Urbana (clasicaurbana.com)

El 27 de mayo de 2010, el Boletín Oficial de la Provincia publicaba una de tantas adjudicaciones de contratos de la Diputación de Valencia. Enmarcado enen uno de los planes estrella de inversiones para pueblos publicitados por elentonces presidente de la corporación Alfonso Rus, aparecía la contratación del proyecto y ejecución de las obras de piscinas cubiertas en diversos municipios. El presupuesto base ascendía a algo mas de dos millones de euros. La empresa Clásica Urbana se lo adjudicaba por 1,7 millones de euros. No ha sido la única licitación que esta constructora se ha llevado durante la etapa en la que el que fue hombre fuerte del PP provincial manejaba los hilos en el reparto de obras. La más reciente, de noviembre de 2014, es otra para encauzar un barranco en un polígono industrial de Corbera, una población de la comarca valenciana de La Ribera. En este caso la sociedad se embolsó 614.650 euros.

La Fiscalía Anticorrupción investiga si esta empresa y sus responsables pudieron obtener los contratos a cambio de pagar comisiones y mordidas a Rus y sus hombres. El pasado 26 de enero, en el marco de la Operación Taula, fue detenido Javier Marchesi, consejero delegado de Clásica Urbana. Se libró de pasar la noche en los calabozos el presidente de la mercantil, Alberto Campos Suñer. ¿Les suena el apellido? Sí, es el nieto de Luis Suñer, el famoso industrial valenciano que fue secuestrado por la banda terrorista ETA en enero de 1981 después de que el Gobierno de Adolfo Suárez publicase un listado con los nombres de los principales contribuyentes de la Hacienda pública española. Suñer, dueño de un imperio empresarial que abarcaba desde la compañía líder en España de fabricación de helados Avidesa hasta Cartonajes Suñer, encabezaba esa lista.

Entre los detenidos por la Guardia Civil está Javier Marchesi, el hombre de confianza de los Suñer en la gestión de sus empresas

El secuestro del industrial conmocionó a la sociedad española de la época. Fue el primero más allá de las fronteras del País Vasco, el más largo hasta la fecha (tres meses) y su resolución coincidió en el tiempo con el golpe de Estado del 23-F. El Gobierno de la UCD hizo de la liberación un tema de Estado tras recibir críticas por publicar los nombres de los contribuyentes de mayor volumen. Suñer había declarado en 1978 unos ingresos de 400 millones de pesetas.

La Operación Taula ha salpicado de lleno a la que es heredera como división de construcción y obra civil de aquel conglomerado industrial del que se hizo cargo Alberto Campos en 1989, un año antes del fallecimiento de su abuelo, en Alzira, con ochenta años. Javier Marchesi, investigado por Anticorrupción y la UCO, no es un cualquiera. Es el primogénito de Luis Ignacio Marchesi, persona de la máxima confianza de Suñer, considerado siempre su número dos. En los mentideros de la época se afirmaba que fue uno de los negociadores con la banda terrorista para propiciar la liberación de su jefe. ETA reclamaba 600 millones de pesetas y recibió algo más de 350 millones en billetes marcados para seguirles el rastro.

El secuestro de Luis Suñer conmocionó a la sociedad española de la Transición; el padre de Marchesi fue quien negoció la liberación con la banda terrorista

Javier Marchesi ha heredado el rol de hombre de confianza de la familia en la gestión de los negocios. Es CEO y director general de Clásica Urbana y de la mayor parte de sus filiales, en especial de Desarrollo Urbanístico Mare Nostrum, una compañía muy vinculada a la obra pública que ha recibido encargos de ayuntamientos y sociedades públicas valencianas como la Entidad de Saneamiento de Aguas Residuales (Epsar). Clásica Urbana también fue adjudicataria en 2008 de obras de reforma de un colegio en Massamagrell por parte de Ciegsa, la mercantil de la Generalitat encargada de edificar centros docentes investigada por Anticorrupción por las sospechas de mordidas.

placeholder Alfonso Rus, con Barberá, Camps y Ricardo Costa. (EFE)
Alfonso Rus, con Barberá, Camps y Ricardo Costa. (EFE)

En las últimas semanas los herederos de Suñer también se han visto salpicados por otro de los escándalos de corrupción en la Comunidad Valenciana, aunque de forma indirecta. Alberto Campos es hermano de Adrián Campos, expiloto de Fórmula 1. El deportista ha tenido que declarar como testigo en el caso Valmor, que investiga la presunta compra fraudulenta con todas su deuda por parte de la Generalitat de la sociedad que organizaba el Gran Premio de Valencia. Campos fue una de las personas que inicialmente trató de atraer el evento deportivo a la ciudad, aunque posteriormente fue apartado de su organización. En su declaración ante el juez, el deportista explicó que fue Francisco Camps quien dirigió personalmente la organización de los grandes premios en conversaciones directas con el patrón de la F1 Bernie Ecclestone.

Mecenas y afectados por Madoff

Alberto y Adrián Campos son hijos de Marí Carmen Suñer Picó, cuya Sicav, Kapital Geld, ya inactiva, se vio envuelta en la estafa de Madoff. La única hija viva de Luis Suñer perdió más de 300.000 euros con las inversiones realizadas en vehículos contaminados por el fraude piramidal.

Los Suñer son una referencia social en la población valenciana de Alzira, donde colaboran en todo tipo de acciones deportivas y solidarias. El estadio de fútbol de la ciudad lleva el nombre de Luis Suñer Picó, el primer hijo de Luis Suñer, que falleció muy joven, con apenas 21 años. El industrial sufragó las obras de construcción del recinto del Alzira UD . “Don Luis”, como era conocido el fundador de Avidesa, ejerció de mecenas, promotor cultural y benefactor de organizaciones solidarias de forma habitual en la localidad en la que nació y murió.

El 27 de mayo de 2010, el Boletín Oficial de la Provincia publicaba una de tantas adjudicaciones de contratos de la Diputación de Valencia. Enmarcado enen uno de los planes estrella de inversiones para pueblos publicitados por elentonces presidente de la corporación Alfonso Rus, aparecía la contratación del proyecto y ejecución de las obras de piscinas cubiertas en diversos municipios. El presupuesto base ascendía a algo mas de dos millones de euros. La empresa Clásica Urbana se lo adjudicaba por 1,7 millones de euros. No ha sido la única licitación que esta constructora se ha llevado durante la etapa en la que el que fue hombre fuerte del PP provincial manejaba los hilos en el reparto de obras. La más reciente, de noviembre de 2014, es otra para encauzar un barranco en un polígono industrial de Corbera, una población de la comarca valenciana de La Ribera. En este caso la sociedad se embolsó 614.650 euros.

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