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¿Quién se esconde tras el duro comunicado de Aznar a Rajoy?
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Preocupan sus intentos de desestabilizar al presidente

¿Quién se esconde tras el duro comunicado de Aznar a Rajoy?

A Aznar todavía le quedan algunos fieles dentro del Grupo Parlamentario porque son conscientes de que no repetirán en las listas electorales y de que su suerte está echada

Foto: El expresidente del Gobierno español, José María Aznar. (EFE)
El expresidente del Gobierno español, José María Aznar. (EFE)

“Sin sorpresa, porque lo conocemos, pero con indignación, una cierta rabia y mucha decepción, así reaccionamos todos cuando tuvimos noticias del comunicado del expresidente Aznar contra la actual dirección del Partido Popular y, específicamente, contra la persona que él designó como su sucesor, Mariano Rajoy”. Es la declaración con sordina de un alto dirigente de Génova 13 que tampoco quiere insistir, porque la orden impartida es muy clara: ningunear el nuevo y durísimo ataque del que fuera presidente del partido y del Gobierno cuando fue apoyado por los que ahora demoniza.

Pero no son las contradicciones aznaristas (“estamos acostumbrados a ellas”) lo que realmente llama la atención entre las mesnadas populares fieles a Rajoy. Lo que realmente les preocupa son sus intentos de desestabilizar al presidente en un momento de máxima dificultad para el PP y para el Estado. “Nadie en su sano juicio y con un mínimo de sentido de la lealtad y solidaridad con su partido emite un comunicado contra él cuando las heridas sangran por todos los costados y se hace necesaria más que nunca la aquiescencia de todos”, subrayan los mismos medios.

“Tiene que haber algo detrás, alguna intención oculta”, añaden. Hoy, el veterano Raúl del Pozo titulaba su columna 'Quieren echar a Rajoy' y apostaba por el joven diputado y vicesecretario general de Comunicación, Pablo Casado, como el 'tapado' del ala dura aznarista. Pero no es el único nombre que barajarían en FAES. El objetivo, según algunos de los conspiradores, pasa por buscar una alternativa a Mariano Rajoy “incluso antes de las elecciones generales”.

La sombra de la corrupción

Lo que también ha sorprendido es que se emitiera un comunicado oficial del expresidente bajo el manto de FAES, que es orgánicamente una fundación del Partido Popular y en calidad de tal recibe subvenciones públicas y subsiste.

La línea oficial del PP recuerda que uno de los principales argumentos objetivos para el descenso de votos y de las “cinco derrotas” que Aznar apunta en el debe de Rajoy es la corrupción. “Muchos de los casos son de su época con personas tan cercanas a él como Miguel Blesa, Francisco Correa, Jesús Sepúlveda, Luis Bárcenas, Rodrigo Rato y otros”.

No se les olvida que fue Aznar, investido con los votos pujolistas de CiU, el que cedió el 50% en la recaudación del IRPF, el mismo que ahora pide mano dura y defensa de la legalidad constitucional. “Aznar decapitó a Alejo Vidal Quadras como jefe del PP catalán cuando se lo pidió Jordi Pujol, que odiaba al exdirigente por su total oposición al nacionalismo y que fue el inicio de la creación de Ciudadanos…”, insisten las mismas fuentes oficiales populares.

En esta campaña de acoso y derribo al presidente -“las críticas de Felipe González hacia la política de Pedro Sánchez son un juego de niños frente al constante acoso de Aznar contra la persona que él cooptó como sucesor”-, el todavía presidente de FAES no está solo. Bien es cierto que su impronta e influencia dentro del PP ha decaído mucho, pero todavía le quedan algunos fieles dentro del Grupo Parlamentario porque son conscientes de que no repetirán en las listas electorales y de que su suerte está echada.

El retorno del 'clan de Valladolid'

Uno de los señalados a este respecto es el siempre escurridizo diputado por Valladolid Miguel Ángel Cortés, teóricamente dedicado a las cosas de la cultura. Hay quien le apunta como responsable de la “operación Rueda”, tras convencer a Botella y su marido, operación por la que el expresidente pidió a su amigo Miguel Blesa que Caja Madrid comprara una colección del artista Gerardo Rueda por valor de 54 millones cuando el tasador oficial de la entidad financiera dijo que eso solo valía 3,8 millones. Finalmente, la operación no se llevó a cabo por la negativa total del entonces presidente de la Fundación Caja Madrid, Rafael Spottorno, que llegó a calificar la pretensión de “disparatada”.

Cortés sostendría, siempre según algunos de sus interlocutores, que los dos meses que restan para la celebración de las elecciones legislativas no son inconveniente alguno para sustituir al candidato, ya que Aznar también tuvo solo 60 días para medirse con Felipe González cuando Fraga le nominó candidato a la presidencia del gobierno y “salvó los muebles”.

Cortés maniobraría igualmente para impedir que María Dolores de Cospedal ocupe el número dos por Madrid porque ello significaría que Soraya Saénz de Santamaría le arrebataría a él el número uno por Valladolid.

No es el único. En la alta dirección de Génova 13 y del Grupo Parlamentario tienen los nombres de los que en su opinión no deben repetir en las listas. Entre ellas, Cayetana Álvarez de Toledo y otras gentes con despacho en FAES, si bien la mencionada señora hizo campaña en Cataluña.

“Sin sorpresa, porque lo conocemos, pero con indignación, una cierta rabia y mucha decepción, así reaccionamos todos cuando tuvimos noticias del comunicado del expresidente Aznar contra la actual dirección del Partido Popular y, específicamente, contra la persona que él designó como su sucesor, Mariano Rajoy”. Es la declaración con sordina de un alto dirigente de Génova 13 que tampoco quiere insistir, porque la orden impartida es muy clara: ningunear el nuevo y durísimo ataque del que fuera presidente del partido y del Gobierno cuando fue apoyado por los que ahora demoniza.

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