PPC y PSC alertan a Puigdemont del error de ir al Congreso "tras decir fecha y pregunta"

Carles Puigdemont parece estar cada vez más cerca de la puerta de los leones del Congreso de los Diputados. El presidente de Cataluña ha asegurado en una entrevista en 'ara.cat' que acudirá al hemiciclo "una vez anunciada la fecha y la pregunta" de la consulta. "La determinación de este Gobierno es hacer el referéndum y tenemos todo el interés del mundo en irlo a explicar". "Estaré encantado en debatir con todo el mundo que quiera saber por qué hemos llegado hasta aquí", ha añadido, culpando al Ejecutivo de "fiarlo todo al poder judicial y, una vez fracasada esta vía, insistir en el poder legislativo".

Tanto el PP de Cataluña como el PSC se han apresurado a contestar al 'president', al que acusan de no pretender dialogar, dado que, antes de presentarse ante las Cortes, tiene intención de aprobar la pregunta y la fecha de la consulta secesionista.

El secretario del Organización de los socialistas catalanes, Salvador Illa, ha afirmado que el "ofrecimiento" de Puigdemont "demuestra que no tiene voluntad de dialogar", ya que descarta ir al Congreso "antes de fijar fecha y pregunta".

Illa ha subrayado que "la única forma de salir" del conflicto por el proceso soberanista es "diálogo, negociación y pacto", y una "buena manera" de aplicarlo es, a su juicio, acudir al Congreso de los Diputados, pero sin haber fijado antes en la agenda un referéndum unilateral.

La reacción de Albiol

Por su parte, el líder del PPC, Xavier García Albiol, ha alertado a Puigdemont, del "grave error" que supondría, a su juicio, fijar fecha y pregunta del referéndum unilateralmente, porque no dejaría "margen para intentar resolver de una forma consensuada" la situación política en Cataluña. Aunque Albiol ha querido dejar claro también que cualquier resolución no conducirá "en ningún caso a la celebración de un referéndum" de independencia en Cataluña.

Cara a cara en el Congreso

La entrevista con Puigdemont ha revelado la disposición del presidente catalán a mantener un cara a cara con Rajoy en el Congreso, aunque asegura que "si es para participar en una maniobra de escarnio, no es necesario". Además, rechaza que el hemiciclo vote a favor o en contra del referéndum catalán porque "la votación ya ha sido, en el Parlamento [catalán]". "El tiempo del acuerdo político en España se ha acabado, lo han dejado morir. Ir al Congreso sin que el Gobierno haya dialogado y acordado el modo de salir reforzados los dos no tiene sentido. En un debate y propuesta en el Congreso, hay que ir dialogado y pactado de casa".

La pregunta "será clara". "Nadie que la lea podrá decir que hay ningún tipo de engaño. Sabrás lo que estás votando cuando votas sí o no"

El presidente catalán también ha hablado de la posibilidad de que el Gobierno retire o revise las competencias de la comunidad autónoma. "Siempre quiero creer que alardean más de lo que realmente tienen intención de hacer. Creo que harían bien en calmarse un poco. De relajarse, serenarse y entender que es un problema político. El radicalismo en que se ha instalado la política española cuando habla de Cataluña no es un buen presagio".

Asegura Puigdemont que aunque la pregunta del referéndum no está cerrada, "será clara". "Nadie que la lea podrá decir que hay ningún tipo de engaño. Sabrás lo que estás votando cuando votas sí o no".

¿Presión internacional?

Puigdemont ha asegurado que ve difícil que la comunidad internacional pueda presionar al Estado para que negocie una solución en el contencioso abierto con el Govern a raíz del proceso independentista: "Creo que no tenemos que ser ingenuos".

El presidente catalán ha explicado que su Ejecutivo está diseñando todas las garantías democráticas para que la votación sea efectiva y vinculante, pero ha insistido en que "la mejor garantía habría sido un acuerdo con el Estado". Sobre este pacto, ha aseverado que no hay que descartar "hasta el último día" que el Gobierno central acceda a acordar el referéndum, si bien ha reiterado su voluntad de llevarlo a cabo igualmente si no hay una respuesta en este sentido por parte del Ejecutivo de Mariano Rajoy.

Asimismo, considera curioso que se acuse al Govern de presionar funcionarios: "Nos han dicho que los que amenazábamos a funcionarios éramos nosotros, y creo que todo el mundo tiene claro que si lo hace alguien, es el Estado".