Es noticia
La CUP propone recortar altos sueldos y rescatar los peajes en Cataluña
  1. España
  2. Cataluña
LAS DURAS EXIGENCIAS DE LOS ANTICAPITALISTAS A PUIGDEMONT

La CUP propone recortar altos sueldos y rescatar los peajes en Cataluña

Los anticapitalistas quieren también “eliminar los avales concedidos al Formula One Group de Bernie Ecclestone y al deficitario Circuito de Montmeló”

Foto: El vicepresidente del Govern y 'conseller' de Economía, Oriol Junqueras (i), junto al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont. (EFE)
El vicepresidente del Govern y 'conseller' de Economía, Oriol Junqueras (i), junto al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont. (EFE)

La Candidatura d’Unitat Popular (CUP) no da tregua al presidente catalán, Carles Puigdemont. Este martes, permitió que se tramitasen los Presupuestos de la Generalitat para 2017, pero ahora comienza el calvario para el Govern, porque ha de elaborar unas cuentas que agraden a los anticapitalistas. Y no se lo van a poner fácil.

La CUP ha presentado ya una serie de enmiendas que permitirán rescatar 760 millones de euros para destinarlos a fines sociales sin subir impuestos ni incrementar los ingresos. No es magia, simplemente se trata de dar la vuelta a los capítulos de ingresos y gastos recortando de unos sitios y metiendo dinero en otros.

Una de las medidas que propone la CUP es “la reducción del 19% de las retribuciones complementarias de los altos cargos y de los cargos de confianza para destinarlo íntegramente al fondo de renta garantizada de ciudadanía”. Con esta medida, se rescatan solo tres millones, pero ese dinero se destina, precisamente, a fines sociales en vez de a remuneraciones de salarios que ya son, en ocasiones, escandalosamente elevados. Eulàlia Reguant, diputada de la CUP, ya se lo espetó a Puigdemont este martes por la tarde, quejándose de que en un momento de crisis la Consejería de Trabajo, Asuntos Sociales y Familia solo aumente sus recursos en 100 millones de euros sobre un total de 27.000 millones.

Los anticapitalistas quieren también “eliminar los avales concedidos al Formula One Group de Bernie Ecclestone y al deficitario Circuito de Montmeló”. Reguant había criticado también los rescates de las pistas de esquí o los gastos generados para impulsar Barcelona World. Asimismo, exigen que los avales de más de 10 millones de euros tengan que ser aprobados por el Parlamento y que no dependan directamente del Ejecutivo.

La partida más onerosa de ahorro, en cambio, es la de la eliminación de la externalización de servicios. La CUP propone la reversión de estas externalizaciones, con lo que el Gobierno se ahorrará 293,9 millones de euros. Estos ahorros se completarían con la rebaja de los gastos en Protocolo y el recorte del 10% de externalizaciones en salud.

Un dinero poco transparente

También prestan especial atención a las partidas que maneja el Centro de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (CTTI), que califican de “estratosféricas”. Este organismo, recuerdan los cuperos, tiene una “gestión poco transparente”. No olvidemos que fue el CTTI quien repartió decenas de millones de euros a empresas vinculadas a familiares del expresidente Artur Mas. Por si fuera poco, la mayoría de fondos públicos que maneja este organismo van a parar a empresas con representante en la sectorial TIC de Convergència Democràtica (CDC). El dinero recortado en ese órgano se repartiría entre un Fondo de Vivienda, Fondo de Renta Garantizada de la Ciudadanía, Fondo para la Mejora de la Educación Pública, Fondo de Cooperación y Fondo para la Recuperación de la Gestión Pública.

La CUP propone, asimismo, “combatir las políticas de austeridad y déficit, eliminando topes y frenos a la contratación de personal y de aumento del gasto en los sectores públicos estratégicos”. Los anticapitalistas critican, en este sentido, la política de contratación en la educación, proponiendo la contratación de 6.000 profesores más. Para ello, se necesitan 140 millones de euros, aunque el Parlamento catalán solo aprobó un aumento de 55 millones a los conciertos educativos. LaA CUP, en cambio, quiere un mayor control de estos conciertos, “eliminando los de los centros que segregan por sexo o que no cumplen con los criterios de escuela inclusiva o segregan por motivos raciales, sociales o culturales y, por tanto, no tengan una composición del alumnado similar a los centros públicos cercanos por zona y población”.

Once nuevos programas

También proponen los antisistema la creación de 11 programas presupuestarios nuevos “vinculados a fondos transversales e interdepartamentales”. El primero de esos fondos tendría como objetivo luchar contra la corrupción y la evasión fiscal. El mecanismo para ello sería una nueva herramienta del Gobierno que se llamaría Mecanismo Catalán contra la Corrupción.

Otro de los fondos trataría de revertir los servicios externalizados y recuperar la gestión pública

Otro de los fondos trataría de revertir los servicios externalizados y recuperar la gestión pública. Paralelamente, se crearían mecanismos para la gestión integral de las emergencias, la eliminación de la precariedad de la política cultural y rescatar y hacer públicas las autopistas catalanas. Esto se haría a través del organismo autónomo Emergencias de Cataluña y de Autopistas Públicas, que como empresa de capital exclusivamente público estaría adscrita a la Consejería de Territorio y Sostenibilidad.

La CUP propone, asimismo, crear un parque público de vivienda, una Banca Pública Catalana como entidad de derecho público y un Banco de Tierras cuya misión sería la creación de un “parque público de tierras vía adquisición, cesión o arrendamiento de fincas rústicas para poder cederlas en el marco de un desarrollo agrícola comunitario”. También propone un Fondo Estructural de Cohesión Social y fondos específicos de ayuda a la cooperación, de lucha contra el cambio climático, de defensa del patrimonio natural, de políticas de igualdad de género y lucha contra la violencia machista y de fomento de la economía cooperativa. Para fomento del cooperativismo, los cuperos proponen destinar 180,6 millones de euros, mientras que a educación destinarían 54,1 millones, 45,4 millones a renta garantizada de la ciudadanía y 41 a vivienda pública de alquiler.

La Candidatura d’Unitat Popular (CUP) no da tregua al presidente catalán, Carles Puigdemont. Este martes, permitió que se tramitasen los Presupuestos de la Generalitat para 2017, pero ahora comienza el calvario para el Govern, porque ha de elaborar unas cuentas que agraden a los anticapitalistas. Y no se lo van a poner fácil.

Carles Puigdemont Sueldos Parlamento de Cataluña Artur Mas