Es noticia
Empresa en Madeira y supervisor en Suiza: así era el ‘tinglado’ del hijo mayor de Pujol
  1. España
  2. Cataluña
RENTABILIDADES DE HASTA EL 29,5% EN NEGOCIOS MEXICANOS

Empresa en Madeira y supervisor en Suiza: así era el ‘tinglado’ del hijo mayor de Pujol

Jordi Pujol Ferrusola abrió cuentas corrientes en Andorra y Suiza y montó una empresa en Madeira, Crena, a través de la que penetró en América

Foto: El primogénito de Jordi Pujol, Jordi Pujol Ferrusola, abandona la sede de la Ciutat de la Justicia. (EFE)
El primogénito de Jordi Pujol, Jordi Pujol Ferrusola, abandona la sede de la Ciutat de la Justicia. (EFE)

Las malas lenguas dicen que Jordi Pujol Ferrusola, alias Júnior, no solo aprendió a hacer negocios con su madre, Marta Ferrusola. Es cierto que la matricarca del clan más poderoso de Cataluña inculcó a sus vástagos el ‘veneno’ de los negocios. Les enseñó a ser ‘tiburones’ y a enseñar los dientes. Y si hace falta, morder. Pero para dar el salto y posicionarse en el mundo, el primogénito, paradigma del conseguidor de negocios a la sombra del poder, tuvo otros padrinos. Para operar, abrió cuentas corrientes en Andorra y Suiza y montó una empresa en Madeira, Crena, a través de la que penetró en América.

¿Y por qué en Madeira? Vuelven a decir las malas lenguas que allí estableció el epicentro de su imperio exterior Lluís Prenafeta, fiel escudero de Jordi Pujol padre, exsecretario general del Gobierno catalán, padrino de la carrera empresarial de Jordi Pujol Ferrusola y de Artur Mas (fichó a ambos para la empresa familiar Tipel a finales de los ochenta) y padrino de uno de los hijos de Júnior. Tras Prenafeta se aposentaron en aquella isla un montón de empresas de catalanes. Pero el mayor purasangre era Jordi Pujol Ferrusola.

Júnior también hacía servir a un abogado de Suiza para cerrar sus operaciones más delicadas. Las inversiones que hacía al otro lado del Atlántico, por ejemplo, eran planificadas desde Ginebra por Charles de Bavier, un administrador de empresas muy conocido en el país alpino, que además administra fortunas diversas de corporaciones y potentados españoles. El nombre de De Bavier aparece en la documentación remitida desde Andorra al magistrado José de la Mata, titular del juzgado central número 5 de la Audiencia Nacional.Su función en Suiza era similar a la de Herbert Arthur Joseph Rainford Towning en Londres: allí este gestor le diseñó una intrincada red de sociedades pantalla, entre las que estaban las del 'holding' Bantridges para que pudiese operar con paraísos fiscales, al mismo tiempo que le pilotó varios intentos de ‘pelotazos’.

Según documentación a la que ha tenido acceso El Confidencial, un documento enviado a finales de marzo de 1998 a Charles de Bavier (y remitido por Jordi Puig Godes, socio de Jordi Pujol Ferrusola y hermano del actual consejero de Empresa, Felip Puig, en aquel tiempo alto cargo de Convergència y consejero de Medio Ambiente, más tarde consejero de Obras Públicas) le señalaba los temas “que trataremos en la próxima reunión del día 16 de abril”.

Entre otros asuntos, le adjuntaba el “borrador del contrato de prefinanciación del café para la sociedad de EEUU. Te agradecería que la revisaras para determinar su conveniencia. La rentabilidad es del 14% sobre la inversión y la repatriación de intereses alcanzará el 10% de la operación, vía gastos financieros para la sociedad americana: el resto (4%) se propone repatriarlo mediante facturas a la sociedad americana”.

Tres empresas clave

La inversión se hacía a través de un conglomerado de empresas de México. Jordi Pujol y Jordi Puig operaban con la sociedad Crena y con otra denominada Shaner Investments. En la comisión rogatoria aparece también una tercera: Conter Securities. Al mismo tiempo, utilizaban a un miembro de la alta sociedad mexicana para pasar inadvertidos: José de Alba, alias 'Chepo', que puso a su disposición la sociedad Balvanera. Chepo, asiduo de la prensa del corazón, les abrió las puertas de la sociedad pija mexicana. Su Club Balvanera, de Querétaro, es un monumental complejo con club de golf, pistas de tenis, campo de polo, hospital veterinario y una cuadra de 600 caballos purasangre.

En el fax mencionado anteriormente, los dos socios barceloneses dicen al suizo: “Se propone la conversión de la inversión de Balvanera (a través de Crena) a una sociedad que comercializará lotes o parcelas de tierra dentro del complejo. Los números propuestos aseguran una rentabilidad media del 29,5%. Te adjunto plan de capitalización que nos dio José”. En otras palabras, lo que estaban haciendo era de puros y duros promotores inmobiliarios. Y auguraba que “con José están surgiendo posibles operaciones financieras para México; creo que tendríamos que definir un esquema general que permitiera instrumentar las operaciones más interesantes de forma ágil y segura para no equivocarnos. El esquema debería contemplar la forma y repatriación de los beneficios o intereses obtenidos”.

El 9 de septiembre de ese año, le volvía a enviar un fax. “Querido Charles –decía la carta de Jordi Puig-: Hablado con Jordi [Pujol], nos parece correcto plantear la operación de un crédito al 15% de interés con un fideicomiso garante de terrenos y cinco villas. El monto total debe sumar solo 1.315.000 dólares (compuesto por 1.075.000 y 240.000 dólares), ya que el resto de los 600.000 dólares lo va a negociar Jordi cuando viaje a México la semana del 24/10/98”.

Unos días más tarde, el 15 de octubre, se dirige a José de Alba, al que le enumera lo que ha de hacer. “1.- Estudiar un plan de tesorería para determinar los flujos de caja que permitan amortizar el préstamo único (plazo de amortización, tipo de interés, pago de intereses y pago de capital) con sus correspondientes intereses compuesto por: a) 1.070.000 dólares (préstamo general); b) 240.000 dólares (préstamo personal); c) 76.683 dólares (intereses de 1.070.000 marzo-octubre 1998); d) 236.000 dólares (beneficios y dos villas préstamo 1.070.000)”. Le ordenaba, asimismo, “formalizar UN SOLO [sic] contrato de préstamo que recoja el punto 1 y 2 de este documento, para firmarlo una vez esté aceptado”. Y también le advertía:”Aclarar con Mr. Charles de Bavier el trasvase del préstamo y difeicomiso del 1.070.000 al préstamo de Channer del total de la cuantía (a+b+c+d), es decir, coste fiscal si lo hay y aumento de garantías en terrenos”.

Por último, le pedía aclaraciones sobre 31.500 dólares que tenía que pagar de intereses de otro préstamo de 600.000 dólares, y sobre este argumentaba: “Se debe cancelar el capital de 600.000 dólares prestados (recuerda que el préstamo está avalado por Jordi y no puede aplazarlo; límite máximo final de octubre 98). Recuerda que fue un acuerdo personal [y subraya estas dos palabras] entre Jordi y Tú (sic)”. Una copia de esta comunicación fue enviada el mismo día a Suiza para hacer partícipe de su contenido a Charles de Bavier.

Un mes más tarde, otra comunicación con México le pide a Chepo que envíe 14.400 dólares “de intereses correspondientes a los meses de febrero-julio a la cuenta habitual”. Y añadía otro punto: “Operación 200.000 dólares (beneficio Crena). Deberías enviarnos Contrato de Arrendamiento de las villas (2) según: contrato de arrendamiento de dos años de duración; interés 12% (1.000 dólares/mes/villa) pagadero semestralmente; amortización semestral del principal; título de propiedad de las dos villas; compromiso de recompra de las villas con la revalorización (pendiente de hablar con Jordi), transferencia de los 36.000 dólares e intereses a la cuenta de Crena”. Terminaba la misiva recordando que “el señor Charles de Bavier se pondrá en contacto contigo para determinar la instrumentalización de los contratos y aspectos fiscales”.

​Poderes para Jordi Puig

Que el suizo mandaba mucho y tenían plena confianza en él lo prueba el hecho de que el 27 de noviembre los catalanes pidieron al mexicano Chepo una documentación. ”¿Cuándo lo tendrás terminado para que Charles de Bavier lo pueda revisar? Mándalo lo antes posible”. Y más adelante, le inquirían: “¿Has modificado la cláusula del fideicomiso de 10.070.000 dólares en relación a la Comisión Técnica, tal como Charles de Bavier te especificó? Jordi necesita una copia de la modificación realizada”.

En mayo de 1999 fue Jordi Pujol quien se puso en contacto con Charles de Bavier. “Deberías indicarme qué poderes, gestiones y firmas o documentos necesitaría Jordi Puig para firmar en mi nombre; puede ocurrir que yo no pueda ir, pero no está confirmado. Por favor, dime qué tenemos que hacer para que Jordi pueda firmar en nombre de Crena (crédito de 1.070) y del nuevo fideicomiso. Piensa que las fechas están cerca”. Hace tan solo unos meses, ante el Parlamento catalán, Júnior se rio de los diputados y afirmó que con Jordi Puig no había tenido negocios y solo era “un inquilino de mi despacho. Él hacía sus operaciones y yo, las mías”. Una mentira más: los documentos demuestran todo lo contrario.

Tan solo unos días más tarde, culmina todas las operaciones transatlánticas y extiende el fideicomiso desde el 15 de mayo de1999 al 15 de mayo de 2001, estableciendo las garantías hipotecarias “correspondientes en tierra, proporcionalmente al préstamo de 1.070.000 dólares”. Y remataba: “Luego negociaremos con Chepo la cantidad de tierra garantizada”.

Crena era una sociedad, según la documentación a la que ha tenido acceso este diario, “100% 'off shore”, estaba controlada por Jordi Pujol Ferrusola y domiciliada en el paraíso fiscal de Madeira. De ella salieron 11.168.000 pesetas (casi 67.000 euros) el 4 de julio de 1997 para la compra de acciones de Laboratorios Serés. Ese préstamo fue garantizado con acciones de Hispasalud Ibérica SL.

Las malas lenguas dicen que Jordi Pujol Ferrusola, alias Júnior, no solo aprendió a hacer negocios con su madre, Marta Ferrusola. Es cierto que la matricarca del clan más poderoso de Cataluña inculcó a sus vástagos el ‘veneno’ de los negocios. Les enseñó a ser ‘tiburones’ y a enseñar los dientes. Y si hace falta, morder. Pero para dar el salto y posicionarse en el mundo, el primogénito, paradigma del conseguidor de negocios a la sombra del poder, tuvo otros padrinos. Para operar, abrió cuentas corrientes en Andorra y Suiza y montó una empresa en Madeira, Crena, a través de la que penetró en América.

Jordi Pujol Ferrusola Familia Pujol-Ferrusola Marta Ferrusola
El redactor recomienda