Es noticia
Los partidos catalanes planean dinamitar la ANC tras valerse de su movilización
  1. España
  2. Cataluña
HOY SE REÚNE LA ASAMBLEA SIN HOJA DE RUTA

Los partidos catalanes planean dinamitar la ANC tras valerse de su movilización

La partida del independentismo catalán juego hoy su última baza. Cada uno de los protagonistas va a su bola y nadie tiene información sobre lo que hace su vecino

Foto: Concentración convocada por la plataforma 'Ara es l'hora' y encabezada por la ANC y Òmnium Cultural. (EFE)
Concentración convocada por la plataforma 'Ara es l'hora' y encabezada por la ANC y Òmnium Cultural. (EFE)

La partida del independentismo catalán juega hoy su última baza. La ruta hacia la independencia encuentra cada vez más escollos y el bloque soberanista ya saltó por los aires hace meses. Aun así, los partidos y entidades partidarios de la independencia tienen convocada, hoy, una reunión para hablar de su hoja de ruta. Lo malo es que nadie sabe de qué hoja de ruta se trata. [Directo: las elecciones catalanas, al minuto]

Cada uno de los protagonistas que ha liderado la "larga marcha hacia la independencia de Cataluña" va a su bola y nadie tiene información sobre lo que hace su vecino. En esa larga marcha, se han enterrado decenas de millones de euros en organización y en propaganda. Y el suflé se ha desinflado tan rápido como se hinchó. De su trabajo quedará un recuerdo grato para muchos catalanes, un reconocimiento histórico a su labor y algunas cuentas corrientes engordadas a golpe de transferencias.

Hace aproximadamente un año, uno de los cerebros de la Asamblea Nacional Catalana (ANC), la organización que hasta ahora cortaba el bacalao y a la que el mismísimo presidente de la Generalitat, Artur Mas, parecía pedir consejo para tomar una determinación, vaticinaba a El Confidencial: “Un año. Dentro de un año, la ANC será dinamitada. Fue creada como herramienta temporal para utilizar al margen de los partidos. Si cualquier partido hubiese querido liderar una movilización ciudadana independentista, no habría aglutinado a más de 50.000 personas en el mejor de los casos. Necesitábamos ese instrumento. Pero su recorrido es limitado. Fue creada exclusivamente para crear conciencia y no puede asumir funciones que no le corresponden, como erigirse en líder política del país. Si quiere liderazgo, que se presente a las elecciones”.

Hoy, esa misma fuente, reafirma que la ANC, la organización que ha orquestado las mayores manifestaciones independentistas de la historia de Cataluña, está condenada. Y, aunque no se pueda hablar de su desintegración, sí se constata que ha perdido el protagonismo de que había gozado los últimos años. No es ni la sombra de lo que fue.

Además, su mayor activo, la presidenta Carme Forcadell, debe dejar la dirección en el mes de mayo, tras la próxima asamblea. Ya hay un nombre que suena insistentemente para sustituirla, aunque habrá que esperar acontecimientos porque el mundo del independentismo catalán es tan volátil como el humo de un cigarrillo. De momento, lo que parece cierto es que la otrora omnipresente Forcadell ya no es recibida semanalmente en el Palau de la Generalitat para dar consignas a Artur Mas.

Tras el 9-N, el president cogió de nuevo las riendas de la situación y marcó el ritmo de los acontecimientos, dibujando un nuevo escenario con un único protagonista: CiU. Comenzó entonces una recuperación del voto convergente y una caída incesante del voto de Esquerra. Mas comenzó a ganar enteros y Carme Forcadell a perder peso. Hoy, los propios dirigentes de la Asamblea lo reconocen. Y reconocen también que el independentismo ha perdido gas, hasta el punto de que los hasta ayer secesionistas han soltado ese lastre y apuestan por movimientos alternativos como Podemos, sin reclamar para nada un posicionamiento identitario. Ser catalán ya no es la primera meta de muchos de los conversos neoindependentistas.

Comienza la campaña electoral y cada uno debe estar en su sitio: la consigna del Gobierno catalán es que cada uno debe hacer campaña por lo suyo y la ANC, en su casa. En realidad, algunos altos cargos del Gobierno catalán ya habían hablado sobre la neutralización de la ANC desde hace tiempo. En el año crucial de 2015 –con elecciones municipales, generales y ahora también autonómicas–, la organización que sirvió para montar la excusa independentista del Gobierno de Artur Mas debía quedar desarticulada, porque esa había sido una de las condiciones de los dirigentes de CiU y del Gobierno autonómico para financiarla.

Se desinfló el suflé

La ANC, la organización que convocaba cumbres que hacían estremecer los cimientos políticos catalanes, es hoy una organización oscurantista cuyo último documento “secreto” dice que “se ha desinflado el suflé”, se duele de que la ANC ya no lidera el Proceso y arremete contra Artur Mas por no haber convocado las elecciones para el mes de marzo, como pedía Carme Forcadell insistentemente. Nadie se creyó jamás que Artur Mas le iba a hacer caso. Y los que estaban en el ajo sabían que Forcadell iba semanalmente al Palau de la Generalitat a recibir órdenes, no a darlas. La reunión convocada para hoy será una notificación notarial de la estrategia de los partidos soberanistas para los próximos meses.

El objetivo se ha cumplido. Ahora sólo falta saber cómo se hace fenecer a la organización sin que parezca un asesinato con nocturnidad y alevosía. Sólo ha de parecer un accidente.

La partida del independentismo catalán juega hoy su última baza. La ruta hacia la independencia encuentra cada vez más escollos y el bloque soberanista ya saltó por los aires hace meses. Aun así, los partidos y entidades partidarios de la independencia tienen convocada, hoy, una reunión para hablar de su hoja de ruta. Lo malo es que nadie sabe de qué hoja de ruta se trata. [Directo: las elecciones catalanas, al minuto]

Artur Mas Esquerra Republicana de Catalunya (ERC)
El redactor recomienda