La Generalitat vende dos edificios a 'family offices' catalanes por 28,3 millones de euros

La Generalitat ha vendido otros dos edificios por un total 28,3 millones de euros. Esta venta está en su línea de colocar en el mercado activos inmobiliarios para sanear las cuentas públicas de la administración catalana, según han explicado fuentes del sector inmobiliario.

La operación se notificará en el Consell Executiu de hoy, el último antes de Semana Santa. Los compradores han sido dos familias catalanas. Así, la familia Espelt, propietaria de la cadena hotelera H10, ha adquirido Via Laietana, 69, la antigua sede del Memorial Democrático, por 11,9 millones. Por su parte, la familia Ayuso, a través de su family office Mercury Capital han adquirido el edificio situado en Diagonal, 523 por otros 16,4 millones.

Los Ayuso vendieron en 2011 la empresa química Merquinsa y desde entonces están diversificando sus inversiones, entrando también en el mercado inmobiliario.

Con esta operación la Generalitat no sólo consigue hacer caja, sino que además reduce su deuda: en 9,5 millones, en el caso del inmueble de Via Laietana.

Por su parte, la administración catalana se compromete a seguir de inquilino en el edificio de Diagonal, por un período comprendido entre uno y tres años, por un importe anual de 1,2 millones. Esto supone que la rentabilidad de la operación para la familia Ayuso se situará en el 7,1%.

La Generalitat esta negociando la venta de otro paquete de inmuebles, durante este año que sumaría a los que ya ha colocado durante 2012 y 2013. Estos dos edificios formaban parte de este último bloque de activos sacados al mercado.

Desde el año 2012, el departamento de Economía que encabeza el conseller Andreu Mas-Colell, ha vendido un total de 21 edificios consiguiendo ingresos por valor de 331 millones, siendo la CCAA que se ha mostrado más activa tanto en el mercado de privatizaciones como en el de venta de activos inmobiliarios.

Mejor momento

Para la Generalitat es un buen momento a la hora de afrontar la venta de los edificios. La rentabilidad que están obteniendo los inversores todavía es alta, un 7%, pero se encuentra muy lejos del 10% que consiguió Axa por la compra de 13 edificios, el año pasado, lo que refleja una cierta reactivación del mercado patrimonialista en la capital catalana.

También se está intentando llevar a cabo importantes ventas de paquetes de suelo, pero dichas operaciones, pese a que son muy importantes en superficie, no acabarán de ser relevantes para las cuentas públicas. Si que servirán para reducir la abultada deuda del a empresa pública Incasol, que debe 900 millones.

Incierto plan de privatizaciones

La Generalitat tiene un incierto plan de privatizaciones este año cifrado en los Presupuestos del 2014 en 2.300 millones. El plan no ha sido especificado. Se cree que la venta de edificios aportará como mucho 300 millones, ante la avidez de inversores nacionales e internacionales por este tipo de activos. Del resto, la conselleria no ha especificado de dónde los obtendrá.