Mas debe 68 millones por el palacio donde se reúne hoy el Foro Mediterráneo

Chapuzas a domicilio. Ése parece ser el sino del primer Foro Económico del Mediterráneo Occidental, enmarcado dentro del Diálogo 5+5 (que hace referencia a cinco países del norte y cinco del sur del Mare Nostrum). Y no por la calidad o cantidad de los presentes en el mismo (o sea, los países de la ribera del Mediterráneo), sino por las polémicas caseras que tienen como protagonista al que debería ser el principal anfitrión: Artur Mas, presidente de la Generalitat de Cataluña.

Para empezar, Mas ha recibido hoy a los asistentes al foro y luego se ha marchado sin escuchar al presidente español, Mariano Rajoy, que dio la bienvenida a los ministros de Asuntos Exteriores de diezpaíses ribereños, además de empresarios y representantes de asociaciones empresariales de estos países. Y todo porque al presidente de la Generalitat no le han dejado hablar en público “tres minutos”.

Pero hay más: el lugar elegido para el encuentro, el emblemático Palacio de Pedralbes, está en el centro de otra polémica, aunque los miembros del Foro que hoy se reúnen allí ignoren la historia.

Y es que la Generalitat se hizo con el Palacio de Pedralbes en el año 2006 a cambio de financiar el Museo DHUB, también conocido como Disseny Hub Barcelona, Museo del Diseño o, simplemente, la popular Grapadora de la plaza de las Glorias, pero el problema es que no ha puesto encima de la mesa todavía ni un euro. En el 2011, Generalitat y Ayuntamiento firmaron una modificación del convenio para establecer nuevos plazos de pago, pero no sirvió de nada.

Sin palacio y sin dinero

En otras palabras: el Ayuntamiento de Barcelona, que era el auténtico dueño del palacio, se ha quedado sin el mismo y, además, ha tenido que sufragar el museo que debía haber pagado el Gobierno autonómico. Un agravio más de la Generalitat para con la capital catalana, a la que adeuda cientos de millones de eurosy por la que la oposición ha pedido explicaciones al alcalde XavierTrias.

En total, el Ayuntamiento ha reconocido que la Generalitat le debe 58,6 millones de euros, que es la parte que le corresponde de lo que cuestan los 25.000 metros cuadrados del DHUB. Esa es la deuda oficial, ya que el convenio establecía que el Gobierno se haría cargo de dos tercios de la obra y el consistorio del tercio restante. La inversión prevista en este museo era de 88 millones y su importancia era tal, según señalan fuentes del PP a El Confidencial, que su construcción se priorizó por encima de otros 19 equipamientos, como la construcción de 600 viviendas públicas, un centro de atención primaria, una residencia de ancianos o un colegio que todavía da clases en barracones.

Pero los presupuestos de las obras se desviaron tanto que el museo acabó costando 102 millones de euros. Según datos del PP, a día de hoy, la deuda de la Generalitat por el Palacio de Pedralbes se sitúa en 67,8 millones de euros debido a esa desviación del presupuesto. Ello da pie al líder popular en el consistorio barcelonés, Alberto Fernández Díaz, a reclamar “que Artur Mas devuelva el Palacio de Pedralbes por moroso”.

No es el único reproche al presidente de la Generalitat. “En los últimos Mundiales de Natación celebrados en Barcelona, el Gobierno autonómico debía poner 5 millones para su organización, pero tampoco puso ni un euro”, subraya Alberto Fernández Díaz a este diario. Las deudas, pues, se le acumulan a Artur Mas.