La Audiencia archiva las denuncias contra el psiquiatra de la aristocracia sevillana

La Audiencia de Sevilla ha confirmado este jueves el archivo de las denuncias presentadas contra el psiquiatra sevillano Javier Criado por prescripción de los delitos denunciados y sin entrar en el fondo de los hechos. Confirma así, sin posibilidad de recurso, la decisión de la jueza de instrucción número 19, que previamente dio carpetazo a estas diligencias, abiertas tras las denuncias por mala praxis y abusos que fueron interpuestas por ocho mujeres en diciembre de 2015.

La Fiscalía abrió la investigación contra este conocido psiquiatra sevillano después de que en julio de 2015 el Colegio de Médicos pusiera en su conocimiento los supuestos abusos cometidos en la consulta de uno de los especialistas más visitados por la aristocracia sevillana. De hecho, entre las mujeres que han dado testimonio de los supuestos abusos, está Matilde Solís, exesposa del actual duque de Alba. Esta ha sido la segunda ocasión en la que Criado ha tenido que enfrentarse a los tribunales, y de nuevo sale airoso, pese a que en esta ocasión el caso ha tenido una gran repercusión social y su consulta se ha pasado meses cerrada. Anteriormente, el psiquiatra fue detenido en 2005 y su caso archivado en 2007 ante la falta de pruebas y la retirada de algunos de los testimonios en su contra.

Ahora, la Audiencia de Sevilla no entra en el fondo pero da por prescritos los delitos denunciados por un grupo de 32 mujeres reunidas en la Asociación de Víctimas de Abusos Veritas. Las afectadas se fueron reuniendo tras salir a la luz el caso hace un año. “Era previsible”, admiten fuentes de la instrucción. Ya en su momento, incluso la Fiscalía solicitó a la jueza el archivo de la causa por la prescripción de los presuntos delitos, pese a que señaló “serios indicios de culpabilidad” del psiquiatra.

Diligencias abiertas

Quedan archivadas siete denuncias y sigue adelante una octava por la que hay abiertas diligencias previas. Los hechos denunciados en este caso son quizá menos graves, agresiones verbales y no físicas, que los descritos en otros testimonios archivados. Sin embargo, para el abogado de las víctimas, Manuel Seco, este testimonio “sigue demostrando que en su consulta ocurrieron hechos que nada tienen que ver con la medicina ni con la psiquiatría, sino con una posición de dominio y de abuso”.

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Estas ocho mujeres denunciaron al psiquiatra por un delito continuado de intrusismo profesional, un delito de omisión del deber de socorro, un delito continuado contra la integridad moral, tres delitos continuados de abuso sexual, dos delitos de abuso sexual y uno de inducción al suicidio, pero la instructora decidió que la investigación siguiera adelante únicamente respecto al presunto delito contra la integridad moral cometido sobre una de las víctimas en 2015. Los plazos de prescripción son de tres, cinco y 10 años, según los distintos delitos denunciados. La denuncia se interpuso a finales de 2015 y los hechos ocurrieron entre 1985 y 2006.

Uno de los abogados de las víctimas ha señalado a El Confidencial que “esto no ha acabado” y que pese a “la enorme tristeza” que ha provocado en las víctimas esta decisión de la Audiencia, hay diligencias que continúan abiertas y seguirán adelante con nuevas vías de trabajo. “Respetamos la decisión de la Audiencia, que aplica escrupulosamente la ley respecto a la prescripción de los delitos denunciados, pero no creemos que sea una situación justa porque las víctimas de abusos sexuales en la consulta de este psiquiatra no han podido denunciar hasta que han estado curadas, y no es hasta entonces cuando debería empezar a contarse el plazo para la prescripción. Muchas hoy todavía ni siquiera han podido recuperarse psicológicamente”, defiende el letrado Manuel Seco. Avanza que una de las nuevas líneas de trabajo que seguirán será pedir la modificación de la ley para que con estas víctimas se considere como con lo menores, que no empieza a computar el plazo para la prescripción hasta que alcanzan la mayoría de edad.

Desde el entorno del psiquiatra se anunciaron diversas querellas tras airearse las denuncias que no han llegado a los tribunales, apunta Seco. Según el relato de las mujeres denunciantes, Criado habría abusado de ellas en “su condición de médico” para someter a sus pacientes a una terapia que consistía en “hablar de sí mismo, de su sexo y sus prácticas sexuales, llegando a realizar tocamientos impúdicos a las pacientes, e incluso manteniendo relaciones sexuales con algunas de ellas, no solo durante las consultas, sino en su propia casa, alternando con ellas, acompañándolas a bares, a pesar de los problemas con el alcohol que padecían algunas de ellas y a pesar de las medicinas que él mismo les recetaba”. Con todas mantuvo “una actitud obscena” y utilizaba “un lenguaje soez y grosero”. “Era tal la manipulación, control y dominio que ejercía sobre ellas y la dependencia que estas mujeres sentían hacia él que, incluso, se permitía aprobar o desaprobar las relaciones que pudieran mantener con otros hombres, necesitando algunas de ellas su aprobación para contraer matrimonio”. Todos los hechos han quedado ahora archivados.

Los abogados de las víctimas pedirán una modificación de la ley para que no computen los plazos hasta que las mujeres estén curadas

Criado dimitió como hermano mayor de una de las hermandades más reconocidas de Sevilla, Pasión, y dejó de ser colaborador habitual del periódico ‘ABC’. Durante estos meses, ha emitido varios comunicados defendiendo su inocencia y ha anunciado querellas, por la vía civil y penal, para defender su honor de las que, según fuentes judiciales, de momento no hay constancia.

En un comunicado conjunto, las mujeres denunciantes narran que “muchas de ellas han arrastrado durante años diversos problemas psicológicos y familiares como consecuencia de unos hechos que han mantenido en silencio durante años, hasta que en 2015 conocieron otros casos por redes sociales que les hicieron tomar conciencia del drama sufrido y les decidió a dar el paso de denunciarlo”. “Fue entonces cuando mujeres que no se conocían previamente decidieron dar el paso de contarlo públicamente, a pesar de ser conscientes de los problemas que les acarrearía”, agregan.

Estudian ir al Supremo

Este grupo, formado por algunas personas muy conocidas, por pertenecer a prestigiosas familias de la ciudad, por ostentar cargos de responsabilidad institucional o por ser esposas o tener relación de parentesco con conocidos políticos y empresarios, ha tenido que contar a sus familias y entornos hechos que tenían callados durante años. Desde entonces, la lista de personas que se han puesto en contacto con ellas reconociendo ser víctimas de los abusos de este médico no ha parado de crecer. Algunas de ellas han preferido seguir en el anonimato, mientras que otras decidieron denunciar públicamente la situación. De hecho, 32 de ellas ya presentaron su testimonio ante el comité deontológico del Colegio de Médicos de Sevilla.

En las próximas fechas, las víctimas se reunirán y decidirán si cuentan con la ayuda suficiente para seguir adelante por la vía jurídica, recurriendo ante el Tribunal Supremo, o lo hacen a través de otras vías para evitar que casos así queden impunes.