Toma de Granada: ultras en el 525 aniversario de la conquista de los Reyes Católicos

“¡Fuera, fuera!”, gritan los de No a la Toma. También los del Sí. Símbolos de la Falange y franquistas versus banderas andaluzas con la estrella roja en el centro. La polémica entre grupos de extrema derecha y de extrema izquierda se reaviva cada vez más en la celebración del 525 aniversario de la conquista de Granada por parte de los Reyes Católicos. Dos novedades de este año: la presencia de la Legión y una comparsa de moros y cristianos. Algo anecdótico dentro de un contexto enfrentado, no exento de matices, en la primera Toma con Francisco Cuenca (PSOE) al frente de la alcaldía de Granada.

Cuenca incluso votó un pleno municipal contra la celebración de esta efeméride, como apunta Francisco Puentedura, portavoz de IU en el ayuntamiento, que se quedó en su casa sin asistir a los actos. Puentedura forma parte de la Plataforma Granada Abierta contra el 2 de Enero. Piden trasladar la festividad local de la Toma al 26 de mayo, el Día de Mariana Pineda, heroína liberal ejecutada tras la restauración absolutista de Fernando VII.

“El 2 de enero no presenta valores democráticos. La fiesta la han usado determinados grupos ultra y fascistas. Además, la ciudad fue entregada, nunca fue tomada. Las capitulaciones nunca se cumplieron. No hay nada que celebrar”, subraya Puentedura en declaraciones a El Confidencial. ¿Qué opina el alcalde? “Esta celebración existe desde hace siglos y no nos planteamos retirarla. Hoy es un día de unidad y entendimiento, eso es lo que se firmó en las capitulaciones”, apunta Cuenca.

Rocío Díaz, del PP, que perdió la alcaldía tras la investigación al exalcalde José Torres Hurtado por un caso de corrupción urbanística, presentó el pasado 24 de junio en pleno municipal una moción para forzar que el alcalde socialista apoyara la Toma de Granada frente a la intención de IU y la portavoz de Podemos, Marta Gutiérrez, de renunciar a la festividad y reclamar la figura de Mariana Pineda. Su moción fue justificada “por el arraigo popular y tradicional de la conmemoración, así como la significación histórica de la jornada como precedente del Estado moderno”.

Para Luis Salvador, portavoz municipal de Ciudadanos y diputado en el Congreso de la formación naranja, apenas han sido “dos pequeñitos grupitos” los que han “estorbado” la celebración. “La gente se ha echado a la calle y esos grupos están muy acotados. Son ellos los que sobran. La gran mayoría de las personas han dado colorido”, manifiesta Salvador a este diario.

“No eran moros, eran granadinos”

Una de las proclamas de la plataforma Granada Abierta es que “no eran moros, eran granadinos”. En un manifiesto leído el 12 de octubre, resaltaban: “No venimos para alimentar el odio ni la irresponsabilidad ante la historia, sino para facilitar el reconocimiento y la curación de las heridas del pasado y, sobre todo, para favorecer la interculturalidad y una serena integración mutua, desde el diálogo, la igualdad y la reciprocidad con vosotros. Queremos ser capaces de leer la historia pasando sus páginas, no manipulándola ni exacerbando nacionalismos”.

En Twitter también compitieron los 'hashtags' #Noalatoma y #EspañaEsReconquista. Santiago Abascal, presidente del partido Vox, tuiteó: “Hoy, 525° Aniversario de la toma de Granada y de la expulsión definitiva del invasor musulmán. #EspañaEsReconquista”. En la etiqueta #TomadeGranada se sucedieron los mensajes a favor y en contra de la efeméride, que se conmemoraba en la II República.

No se produjeron incidentes al final de los actos, pero las posturas siguen cada vez más enconadas en un día festivo que acabó con una simbólica entrega de llaves de la ciudad nazarí.