Pedro Sánchez 'pasa' de la Junta en su gira estival por Andalucía

Pedro Sánchez ha elegido Andalucía para pasar unos días de descanso en familia pero su agenda, aunque era privada y no ha sido oficial como insisten desde Ferraz, ha tenido hueco para encuentros y visitas con vecinos, empresarios y dirigentes locales del PSOE. Aún de vacaciones, el secretario general del PSOE no ha dejado pasar la oportunidad de calentar motores para la próxima campaña electoral en un territorio clave, aunque ha preferido mantener unos días de silencio sobre los asuntos de actualidad más espinosos. Sin embargo, en ninguno de estos encuentros privados ha habido reuniones con los dirigentes socialistas de Andalucía, que según aclaran no tenían conocimiento oficial de esta visita de Sánchez a la comunidad y restan importancia a esa falta de contacto. Atrás quedaron los días en que las vacaciones de los expresidentes Felipe González o José Luis Rodríguez Zapatero en esta tierra, con Doñana como escenario, eran motivo de agasajos y almuerzos privados con los dirigentes del PSOE andaluz.

Sánchez ha pasado unos días en Mojácar (Almería), para después disfrutar de las playas de Cádiz en Chiclana de la Frontera y por último visitar la costa de Huelva. Aunque sus vacaciones tenían carácter privado la presencia del secretario general del PSOE ha sido recogida por los medios de comunicación tras darse a conocer varias reuniones con dirigentes locales. Ocurrió por ejemplo en la localidad de Chiclana, donde el alcalde socialista José María Román, que no es de la cuerda de la ejecutiva de Susana Díaz, difundió oficialmente a través de la web del Ayuntamiento una nota en la que dejaba constancia de una reunión donde se habló de política y el líder socialista fue agasajado con un libro de la localidad. Sobre su posterior visita a Isla Cristina (Huelva), fue el propio Sánchez quien dejó constancia en su perfil personal de Twitter de un encuentro con una empresaria local dedicada a comercializar la flor de sal.

Los socialistas andaluces no quieren alimentar una polémica de la que no pueden desquitarse y se limitan a enmarcar en la normalidad las relaciones con su secretario general. Aseguran que no tienen más noticias que las aparecidas en los medios de comunicación y subrayan que la única información que tienen es que “se trataba de una visita privada”. Da la casualidad de que a escasa distancia del lugar escogido por Pedro Sánchez para descansar en familia está también viviendo su baja por maternidad la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, una habitual de la localidad gaditana de Chipiona.

Desde la dirección del PSOE andaluz confirmaron a petición de este periódico que efectivamente no ha habido ningún encuentro formal con el secretario general, algo que consideró totalmente normal por el carácter privado de su visita. El número dos del PSOE andaluz, Juan Cornejo, estaba justo estos días fuera de la provincia de Cádiz, donde vive habitualmente. Chiclana de la Frontera es también el municipio natal y lugar de residencia del presidente en funciones, Manuel Jiménez Barrios, vicepresidente de la Junta que ha tomado el bastón de mando hasta que previsiblemente en septiembre Díaz vuelva a la primera línea. Contrasta esta ausencia de reuniones con los dirigentes del PSOE andaluz con lo ocurrido en Extremadura, donde Sánchez retomó la agenda oficial para visitar ayer domingo junto al presidente Guillermo Fernández Vara las zonas afectadas por el incendio forestal que tuvo lugar la semana pasada en la Sierra de Gata, en Cáceres.

Había tema: Cataluña alimenta los roces internos

El PSOE andaluz ha dejado constancia en los últimos días de que piensa dar la batalla ante el runrún generado por las elecciones catalanas del próximo septiembre y el debate abierto sobre el modelo territorial y la necesidad de reforma de la Constitución. Precisamente este fue el asunto que centró la última visita oficial de Sánchez a Andalucía el pasado mes de julio. Durante la reunión en Sevilla del Consejo de Política Federal, que reunió a los barones del partido con Susana Díaz como anfitriona, quedó claro que la posibilidad de dar un trato privilegiado a Cataluña es un asunto que sigue levantando ampollas entre los socialistas.

Andalucía no piensa tolerar ningún gesto en este sentido, insisten desde la dirección regional del partido. Pese al intento del secretario general del PSC, Miquel Iceta, de que el PSOE tenga algún gesto con Cataluña, nadie en Ferraz piensa calar este melón con las generales a la vuelta de la esquina. No obstante, cada vez que hay movimientos en este sentido, alguien del PSOE andaluz sale a la palestra a dejar clara su posición contraria a que haya un reconocimiento especial para Cataluña. El comité de expertos creado por los socialistas para abordar la reforma de la Constitución y cuyo dictamen inspirará la apuesta del PSOE en su programa electoral está presidido, así lo reclamó Díaz, por el catedrático andaluz Gregorio Cámara y en él toman asiento otros constitucionalistas ilustres y militantes socialistas como Amparo Rubiales, Elisa Pérez Vera o José Antonio Montilla.

Aquel encuentro en Sevilla a principios de julio sirvió para que Pedro Sánchez y Susana Díaz escenificaran el armisticio firmado al menos hasta después de las elecciones generales. Tras muchos desencuentros, agravados durante la campaña electoral de las andaluzas, Díaz por fin tuvo palabras de elogio y reconocimiento para su secretario general, de quien aseguró es “un gran candidato” y auguró su victoria en las próximas elecciones generales. No obstante, la paz firmada está claro que no conlleva citas privadas ni compartir encuentro alguno en vacaciones.