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Neymar tapa su juicio por corrupción y el riesgo de cárcel en pleno flirteo con el PSG
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logra que un juez de brasil silencie a su acusación

Neymar tapa su juicio por corrupción y el riesgo de cárcel en pleno flirteo con el PSG

Los abogados del delantero consiguen que un juez de Brasilia impida a una de las acusaciones que lo han sentado ante el banquillo denunciar su presunta estafa ante sus patrocinadores

Foto: Neymar se encara con jugadores de la Juventus en el primer partido de la pretemporada. (Reuters)
Neymar se encara con jugadores de la Juventus en el primer partido de la pretemporada. (Reuters)

Neymar quiere que una capa de silencio tape el juicio que tiene pendiente en la Audiencia Nacional por corrupción entre particulares y estafa por el contrato que firmó en 2011 con el FC Barcelona. En plenos rumores sobre su posible marcha al Paris Saint-Germain (PSG), los abogados del jugador han logrado que un juez de Brasil impida a una de las entidades que lo acusan en ese procedimiento, la Federación de Asociaciones de Atletas Profesionales (FAAP) de ese país, contactar con los patrocinadores del delantero para denunciar el perjuicio que le ocasionó el supuesto acuerdo fraudulento con el Barça. Si la FAAP desoye la prohibición, se expone a una multa por cada contacto de 20.000 reales, al cambio, unos 5.400 euros.

Como adelantó este diario, la FAAP comenzó a remitir cartas el pasado marzo a los anunciantes de Neymar para reprocharles que siguieran vinculando sus marcas a un deportista que tendrá que sentarse en el banquillo. Ya tuvo que declarar en febrero de 2016 en la Audiencia Nacional en calidad de imputado. Entonces se limitó a asegurar que no sabía "mucho" y que su padre, también acusado, se encargaba de todo y "cuida de su vida".

La FAAP, que tiene entre sus funciones principales la asistencia económica y la formación de exjugadores sin recursos, se financia por ley con una tasa del 0,8% sobre el importe de las ventas de futbolistas nacionales. Según la FAAP, el acuerdo al que llegaron el Santos, el Barça y el propio Neymar para engañar al Grupo DIS —propietario del 40% de sus derechos—, rebajando el precio real de la transacción, les privó de al menos 500.000 euros.

En concreto, la FAAP se puso en contacto con las compañías brasileñas Chimica Baruel, Ambev y Claro Telecom, las italianas Fashion Box y De Rigo, las estadounidenses Nike, Johnson Controls, Procter & Gamble y Johnson & Johnson, la japonesa Panasonic, la austriaca Red Bull y la británica Unilever. También se dirigió a las filiales en España de Nike, Procter & Gamble, Johnson & Johnson, Unilever y Panasonic. La FAAP les recordaba que estaban utilizando la imagen de una jugador que había “hurtado recursos” a la asociación y que había “demostrado una falta de ejemplaridad a lo largo del proceso”. “Estamos convencidos de que el comportamiento del señor Neymar no es éticamente correcto y nos proponemos trabajar para demostrarlo”, insistía, apelando a las políticas de Responsabilidad Social Corporativa de cada una de las compañías. Se estima que Neymar ingresó en 2015 unos 25 millones de euros solo por publicidad.

La FAAP ya no podrá seguir enviando cartas a los anunciantes del jugador. Según consta en un dictamen judicial al que ha tenido acceso El Confidencial, sus letrados han conseguido que un juez de Brasilia impida a esa institución “enviar documentos o comunicaciones por medios físicos o electrónicos cuyo contenido esté relacionado con datos sobre el procedimiento penal abierto por las autoridades judiciales españolas para depurar las responsabilidades penales derivadas de las negociaciones de transferencia” de Neymar al club azulgrana.

El juicio aún está pendiente de fecha. El titular del Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, José de la Mata, acordó el pasado mayo el procesamiento del delantero, sus padres, la sociedad familiar N&N, el Santos brasileño, el FC Barcelona, el actual presidente del club catalán, Josep María Bartomeu, y su predecesor en el cargo, Sandro Rosell, por estafa y corrupción en los negocios. Rosell firmó un primer acuerdo con el jugador en 2011, mucho antes de lo permitido por la legislación deportiva, y, además, en 2013 cerró el traspaso por una supuesta cantidad simulada de 17,1 millones de euros para reducir la cuantía que debían cobrar DIS y otras partes, como la propia FAAP. La investigación de la Audiencia Nacional ha revelado que el verdadero precio de traspaso ascendió al menos a 77 millones de euros.

La Fiscalía pide dos años de prisión para Neymar y una multa de 10 millones de euros por un delito de corrupción entre particulares, pero el delantero del Barça se enfrenta a una pena incluso mayor. DIS, que presentó la querella que provocó la apertura de este procedimiento, le imputa además un delito de estafa y solicita para él cinco años de cárcel y la inhabilitación para ejercer como futbolista durante todo el tiempo de condena. Este martes, en medio de las informaciones que apuntan a que Neymar podría salir del FC Barcelona para recalar en el PSG francés, DIS envió un comunicado para comunicar que piensa continuar con la causa con independencia de cuál sea finalmente el destino del jugador y recordar que la condena y consiguiente inhabilitación a la que se expone serían efectivas en todo el territorio de la Unión Europea.

Neymar quiere que una capa de silencio tape el juicio que tiene pendiente en la Audiencia Nacional por corrupción entre particulares y estafa por el contrato que firmó en 2011 con el FC Barcelona. En plenos rumores sobre su posible marcha al Paris Saint-Germain (PSG), los abogados del jugador han logrado que un juez de Brasil impida a una de las entidades que lo acusan en ese procedimiento, la Federación de Asociaciones de Atletas Profesionales (FAAP) de ese país, contactar con los patrocinadores del delantero para denunciar el perjuicio que le ocasionó el supuesto acuerdo fraudulento con el Barça. Si la FAAP desoye la prohibición, se expone a una multa por cada contacto de 20.000 reales, al cambio, unos 5.400 euros.

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