Rubalcaba elogia la "fortaleza política" de Díaz y se desmarca de la estrategia de López

Como él mismo dice, dentro de poco le acusarán de haber sido el responsable del asesinato de Prim en la calle del Turco. Alfredo Pérez Rubalcaba es el secretario general del PSOE que nunca acabó de irse porque su influencia sigue siendo demasiado alargada. Lo fue menos con Pedro Sánchez en el poder, pero lo es mucho más ahora, dada su enorme proximidad con Javier Fernández. Pero su inteligencia política, o su "maquiavelismo" y caracter intrigante, para otros, le sitúa siempre en el epicentro de todas las maniobras, las habidas y por haber. Aunque en algunas realmente, o al menos según afirma, no esté. Se ha hablado mucho en las últimas semanas, y otros medios lo han publicado y dado por bueno, que su mano está detrás del lanzamiento de Patxi López. Pero él mismo hizo ver que no es así: no solo valora la "fortaleza política" de Susana Díaz, sino que no comparte las críticas a la labor de oposición con las que ha saltado a escena el exlendakari, con el que además llevaba sin hablar "meses" antes de que este le comunicara, el pasado sábado, su paso adelante.

Rubalcaba aprovechó este jueves su paso por la Ser para deshacer ese mito de que él apoya en realidad al diputado vasco y evidenciar su apoyo (menos entusiasta que el de José Luis Rodríguez Zapatero, y es que la personalidad de ambos nada tiene que ver) a la presidenta de la Junta, y al tiempo defender la gestión de su amigo Javier Fernández al frente del PSOE, porque con él el PSOE está comenzando a desmontar las políticas más lesivas de Mariano Rajoy, con su acuerdo o contra él.

El exlíder socialista reconoció en 'Hoy por hoy' que mantiene una "relación entrañable" con López, porque a fin de cuentas estuvo en su ejecutiva como secretario de Relaciones Políticas y sobre porque ambos, uno en el Ministerio del Interior y otro como jefe del Gobierno vasco, condujeron a ETA a su final, "lo más importante" que hicieron "juntos". Una relación que "va a seguir existiendo". Pero no hablaba con él "hace meses". Una afirmación que por sí misma intentaba demostrar que no ha complotado con él para lanzar su candidatura.

Recuerda que Zapatero fue a la vez líder de su partido y presidente, como Rajoy. "Quien puede lo grande, puede lo pequeño", apunta sobre Díaz

Con Díaz sí conversa con frecuencia. "Me llama y me pongo" —unas veces le hace caso y otras no—, "valoro su fortaleza política y que gane elecciones", el mismo argumento empleado por otros dirigentes, entre ellos su amigo Guillermo Fernández Vara. Y cree que puede compatibilizar la presidencia de la Junta y la secretaría general del PSOE: "El presidente del Gobierno es presidente del PP, y Zapatero era presidente del Gobierno y secretario general del PSOE. Quien puede lo grande, puede lo pequeño".

También compartirá escenario con López

Rubalcaba confirmó, como ya adelantó El Confidencial, que participará en un acto en Alcalá de los Gazules (Cádiz), el 27 de enero, con la que fue su vicesecretaria general, la eurodiputada Elena Valenciano, y al que acudirá también Díaz, y él está "encantado" con que lo haga. En su caso, lo hace porque la agrupación de Alcalá, una de las más emblemáticas del PSOE andaluz, ha cumplido 130 años y le han invitado, y es la cuna del exsecretario de Organización regional Luis Pizarro y del fallecido Alfonso Perales. "Pero le voy a dar una noticia", anticipó a Pepa Bueno: el 25 de febrero participará en un homenaje al exconsejero José Ramón Rekalde, que murió en julio de 2016, en San Sebastián, y al que dio por seguro que asistirá López. "Las cosas son más sencillas: el día que crea que tengo que decir si apoyo a alguien o no créame que lo voy a decir. En mi vida política me he caracterizado por casi todo menos por callarme aquello que creo que debo decir".

¿Debe Sánchez presentarse a liderar el PSOE? "Debe hacer lo que le pida su razón e inteligencia política, y si lo hace, lo respetaré", responde

Sí calló lo que cree que debe hacer Sánchez, ahora que parece bastante probable que dará el paso, una vez que ha decidido que retoma su gira por España para "escuchar a los militantes". "Debe hacer lo que le pida su razón e inteligencia política, y si lo hace, pues yo lo respetaré". Rubalcaba añadió que si le llama, le dará su opinión. Pero la relación entre los dos está completamente rota.

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Lo que espera, en cualquier caso, es que la campaña por el liderazgo del PSOE se desarrolle por los "cauces" de la anterior, la de 2014 —la que enfrentó a Sánchez con Eduardo Madina y José Antonio Pérez Tapias—, con un "debate civilizado". Sí dio por hecho que habrá urnas finalmente: "Es evidente que vamos a votar, parece mentira que algunos duden de eso". Aunque la "primera necesidad" que tiene el partido es la de recuperar el diálogo interno.

A Díaz le lastra la bajada del PSOE-A que pronostican encuestas como la publicada ayer por la Universidad de Granada (Egopa), que vaticina una bajada de 6,8 puntos (del 35,43% de las autonómicas de marzo de 2015 al 28,6%). El exsecretario quitó hierro a ese sondeo, porque el partido bajó en toda España en los estudios demoscópicos tras el "innombrable" comité federal del 1 de octubre, el que acabó decapitando a Sánchez, "y también en Andalucía". Pero las últimas encuestas, recordó, dicen que el PSOE "ha pasado ese bache" y está recuperándose. Lo significativo es, a su juicio, que en la comunidad "el PSOE sigue ganando al PP", que se queda en el 26,2%. Para Rubalcaba, la razón del desplome no tiene que ver con la abstención a Mariano Rajoy, cuyo problema es que se explicó "muy tarde", sino con el "espectáculo" que se dio aquel funesto día, "y eso se paga". Por eso repitió que lo que toca ahora es desplegar la oposición "útil" al PP y emprender la etapa de "fortalecimiento interno".

A López: el PSOE "nunca" se fue del socialismo

En cuanto a la primera tarea, el ex secretario general defendió la labor de Javier Fernández, contra el criterio de Patxi López. Rubalcaba señaló que, para rescatar la "credibilidad" perdida en los años de Gobierno, por no haber sabido "hacer frente" a la crisis, los socialistas han de demostrar que son capaces de recuperar los derechos que "la derecha quitó". Negó que el PSOE esté "apoyando" al PP: lo que está haciendo es "obligando" a Rajoy a cambiar sus políticas, algunas con su acuerdo y otras contra él. Y ahí están, recordó, la subida del salario mínimo de un 8%, la paralización de las reválidas, la prohibición de los cortes de luz, la necesaria reforma de la 'ley mordaza' o el reciente pacto sobre la devolución de las cláusulas suelo.

Subraya que el PSOE está "obligando" al PP a cambiar sus políticas y lamenta la "contaminación orgánica de la política" que hace "daño" al partido

El exlendakari lleva asegurando estos días que él quiere abanderar una "izquierda exigente", razonando que el PSOE está quedándose corto en sus demandas al PP, y promete la "vuelta al socialismo". Rubalcaba replicó que el partido "nunca" se fue del socialismo, sino que se fue "mal del Gobierno". Y remachó que hay que ser "coherentes", porque en el acuerdo que Sánchez firmó con Ciudadanos se hablaba de una subida del SMI de un 1%, y ahora será del 8%. Para el exlíder, López acertó al hablar de "analgésico", pero "se equivocó de sujeto", porque el hecho de que los estudiantes no deban enfrentarse ya a las reválidas o que las familias no deban temer un corte del suministro sí es "analgesia".

"Si ponemos en cuestión la estrategia, tenemos un problema. ¿Alguien piensa que el PP tomaría estas medidas si no tuviera más remedio que hacerlo?", se preguntó. Rubalcaba rechazó que la "camiseta de la moderación" se la pueda apropiar el PP, porque el PSOE es quien le está "quitando las muelas sin anestesia". "Se trata de explicar lo que hacemos", de aplicar pedagogía. Argumentó que la situación actual deriva en realidad de las generales del 26-J, en las que el PSOE "solo tenía dos opciones", o ir a unos nuevos comicios (que habrían generado un "desastre institucional" y habrían debilitado aún más a los socialistas) o dejar gobernar a la lista más votada, y el "error" fue "no decirlo".

No se hizo, según confesó Fernández en su "excepcional" discurso del pasado sábado, ante el comité federal, porque los dirigentes no sabían "cómo ganar el congreso" después de dar paso a la abstención. Esa "contaminación orgánica de la política hace mucho daño al PSOE", analizó. Lo que no cabía era un Ejecutivo alternativo, como quería Sánchez.

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De cara al futuro, hay que pensar, según Rubalcaba, en que el mapa político, más fragmentado, ha llegado para quedarse una temporada, y por eso el PSOE necesita reflexionar sobre su proyecto, porque sin él es imposible volver a ganar. Así que gobernar de nuevo "pasa por tener una mayoría y a partir de ahí buscar coaliciones". Pero "con 85 escaños no se puede gobernar", y más si se necesita como socios a los independentistas. No dijo Rubalcaba con qué aliados debe pactar el PSOE, aunque a Pablo Iglesias y a Podemos les recriminó, por lo pronto, que por "educación" no se inmiscuyan en los asuntos internos de los socialistas: "Si tú fuiste quien impediste a Pedro que fuera presidente. Arregla tu casa y yo arreglo la mía".

López no da por seguro a Sánchez en la carrera y Sara Hernández da su apoyo al exlendakari

Aunque en el PSOE sí se ha consolidado ya la idea de que Pedro Sánchez intentará reconquistar el trono perdido de Ferraz, una sensación que se apuntala por su decisión de reemprender la gira con militantes (que arranca el 28 de enero en Sevilla capital), Patxi López prefiere ser prudente en público: "Lo que doy por hecho es lo que ha anunciado, que va a escuchar a la militancia, y la militancia tiene derecho a ser escuchada y a escuchar lo que proponemos, y después tiene derecho a decidir", aseguró este jueves en 'Espejo público', en Antena 3.

Más tarde, a su llegada a la Diputación Permanente del Congreso, añadió: "Me parece bien que Pedro quiera escuchar a la militancia y que la militancia escuche a Pedro que es lo que tenemos que hacer todos". Con eso dejaba también claro que no solo Sánchez oye a las bases. 

López restó importancia al hecho de que Rubalcaba acuda a Alcalá de los Gazules a la jornada a la que también insistirá Susana Díaz, porque no es un "acto de candidato", sino el centenario de una mítica agrupación. El exlendakari se dijo convencido de que si pide al ex secretario general que le acompañe en algún acto, también lo hará.

El diputado insistió en que no es ningún tapado que vaya a pactar con Díaz. Y remarcó que no le parece "disparatada ni acertada" la posibilidad de una bicefalia (él secretario general, ella candidata) porque ahora lo que importa es conseguir tener "bien cerradas las heridas del partido" para conseguir que los ciudadanos vuelvan a escucharlos, informa Europa Press.

Quien le prestó apoyo decidido este jueves fue la baronesa madrileña, Sara Hernández. Ya se sabía que ella, como todos los secretarios críticos, había dado la espalda a Sánchez. Pero hoy oficializó su apoyo al exlendakari, porque su modelo de partido coincide "plenamente" con el suyo. Hernández, en un homenaje al exalcalde socialista Enrique Tierno Galván por el 31 aniversario de su muerte, añadió que coincide con el proyecto de López en cuanto a la unidad que propone para "trabajar todos juntos y superar la situación dramática que vive el partido", así como en su valor como "patrimonio" de la militancia socialista.

Hernández también destacó el propósito de López de "recuperar al cien por cien el proyecto netamente de izquierdas, netamente socialista, que responde a las inquietudes y necesidades de la ciudadanía", informa Efe.