Cospedal prepara un presupuesto de Defensa claro y al alza con apoyo del PSOE

El Gobierno intenta consolidar y ampliar sus antiguos pactos de Estado con el PSOE, también en el ámbito de Defensa, y prepara unos Presupuestos al alza en ese departamento que incluirán una vieja reivindicación de los socialistas: incluir en las cuentas ordinarias los pagos de los grandes programas de modernización de armamento (fragatas, cazas, aviones de transporte A-400M, helicópteros y carros). Entre las facturas pendientes del año que termina —que el Ejecutivo no pudo abonar este verano al estar en funciones— y las de 2017, Defensa sumará de entrada a su gasto ordinario un total de 1.824 millones de euros.

El propio PSOE recurrió ante el Tribunal Constitucional los pagos por decreto ley de ese tipo de partidas como crédito extraordinario en los dos primeros ejercicios del Ejecutivo de Rajoy, el alto tribunal le dio la razón y obligó a que el abono siguiente se tramitara como proyecto de ley. Las facturas que correspondía pagar el pasado verano se tuvieron que quedar en el cajón del Gobierno en 'refunciones'.

El ministro de Defensa, Pedro Morenés, estaba cesado desde el 21 de diciembre de 2015, y su sucesora, María Dolores de Cospedal, llegó al departamento en noviembre pasado sin tiempo, margen de maniobra ni apoyos para habilitar otro crédito extraordinario antes de fin de año. En el Consejo de Ministros del 9 de diciembre, llevó su fórmula para abordar el 'desdoble' de los gastos en Defensa con una "reprogramación de anualidades" en 18 programas especiales de modernización de las Fuerzas Armadas.

En el proyecto de Presupuestos del Estado para el próximo año, quedarán integrados los pagos de ambos ejercicios, el atrasado de 2016 y el correspondiente a 2017: 1.107 millones de euros más otros 716. A Defensa le tocaba hacer pagos este año que termina por la compra de cazas europeos Eurofighter, carros de combate de fabricación nacional Pizarro II o helicópteros NH-90.

El retraso ha sido un duro golpe para las empresas españolas y consorcios europeos afectados. El sector de la defensa, la seguridad y el aeronáutico cuenta en España con unos 20.000 puestos de trabajo directos y otros 120.000 relacionados.

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En fuentes del grupo socialista, confirmaron a El Confidencial su apoyo a la iniciativa de Cospedal para agrupar en los presupuestos ordinarios de Defensa todas las inversiones y gastos, también los programas especiales de modernización del armamento. En parte viene forzada por la herencia de la etapa de Zapatero, pero también por su labor de oposición en la última legislatura útil. El PSOE quiere ahora ser consecuente con su exigencia de transparencia absoluta en la materia, aunque pueda dar pie a la demagogia antimilitar. El resultado final de la integración será una cifra global muy superior al presupuesto original del ministerio, casi un 30%, según el proyecto del verano de 2015: 5.787 millones de euros. Y las misiones en el exterior costaron otros 963 millones.

El gasto total será al final el mismo de siempre (ministerio, más misiones en el exterior e inversiones en armamento), pero englobado en el proyecto de Presupuesto General del Estado ordinario. Cospedal está dispuesta a asumir el desgaste por la demagogia que puedan hacer Podemos o los partidos independentistas ante su esfuerzo por dotar a las Fuerzas Armadas de los medios necesarios para cumplir sus misiones; y el PSOE, comprometido en apoyar esa labor, con lo que se mantendrá el pacto de Estado en materia de Defensa.