La Policía descarta que hackearan el móvil del investigador del caso Nicolás

El departamento de Informática Forense de la Policía Nacional descarta que alguien hackeara el teléfono del investigador del caso Nicolás, Marcelino Martín Blas, para tener acceso a la conversación que mantuvo este con dos miembros del Centro Nacional de Inteligencia (CNI). Así lo han establecido los analistas de la Unidad Central de Criminalística de la corporación en un informe firmado por el comisario jefe del área el pasado 15 de noviembre y presentado recientemente ante el titular del Juzgado número 2 de Madrid, Arturo Zamarriego, instructor del procedimiento.

"En función de la información recopilada y analizada, tanto de la aplicación MDM diseñada por Samsung, como de la aplicación ComSec diseñada por Indra, se determina que no sería posible administrar ni gestionar los periféricos de forma remota sin autorización del usuario del terminal; siendo, en todo caso, éste el que debe permitir y activar dichos servicios", concluye el mencionado informe, que añade además que el móvil de Martín Blas "carecía de los certificados válidos en el conjunto de las aplicaciones objeto de estudio, en las fechas interesadas (...), por lo que no hubiera sido posible el correcto funcionamiento de las mismas".

El documento explica que las mencionadas aplicaciones "están dirigidas a implementar seguridad en las comunicaciones efectuadas a través de los dispositivos móviles" en los que se instalan, ambas "requieren de certificados válidados y en vigor para su funcionamiento" y la primera (MDM) "no tiene capacidad de controlar de forma remota las comunicaciones de un dispositivo móvil", por lo que "no permite grabar con el micrófono ni con el vídeo". ComSec, por su parte, añade, sirve únicamente para "efectuar llamadas de voz, videollamadas, transmisión de archivos, todo ello cifrado, con un alto nivel de seguridad".

El comisario Martín Blas denunció que alguien utilizó su móvil de forma remota para grabar la conversación que tuvo lugar el 20 de octubre de 2014 entre el propio jefe de la investigación, dos de sus policías y otros dos agentes del CNI. Parte del contenido de lo que hablaron los cinco interlocutores apareció días después en varios medios de comunicación, entre ellos la web Información Sensible, vinculada con el comisario José Villarejo, imputado en una causa en la que ha ido a declarar -aunque en esta ocasión como testigo- hasta el propio exdirector general de la Policía, Ignacio Cosidó.

Villarejo alegó ante el juez Zamarriego que él mantenía una enemistad manifiesta con el investigador principal, Martín Blas, que le situaba en un plano de indefensión. En una línea similar se posicionó el fiscal Alfonso San Román, que ha reclamado en varias ocasiones apartar a la comisión judicial -conformada por Martín Blas y el inspector Rubén Eladio López Martínez- de las diligencias. Según el representante del ministerio público, además de esa enemistad mencionada por Villarejo, los investigadores han demostrado falta de imparcialidad al promover una conversación "improcedente" con el acusado Francisco Nicolás Gómez Iglesias en los pasillos de los juzgados y al llevar a cabo la citada reunión con el CNI.

Tras las reiteradas peticiones, el magistrado por fin se pronunció el pasado 2 de diciembre y lo hizo, sin embargo, en contra del criterio del ministerio público. En un auto, el instructor acordó "desestimar la petición del fiscal de apartar a Martín Blas" y al inspector y mantener a ambos al frente de la investigación. Argumenta que esa conversación "improcendente" -en palabras del fiscal- en los pasillos de plaza de Castilla es insuficiente para apartarles y que el ministerio público conocía "sobradamente (...) desde el inicio de la investigación" la reunión entre el comisario y los miembros del CNI.

"Una simple conversación 'improcedente' con el acusado no es suficiente para apartar a un funcionario policial de la investigación; máxime cuando tanto el comisario Martín Blas como el inspector López Martínez vienen desarrollando su cometido con dedicación plena y a entera satisfacción de este juez instructor", razona el magistrado, quien también niega los argumentos alegados por Villarejo. "La particular versión de la enemistad del comisario Martín Blas con el investigado Villarejo que ofrece este último no va más allá de sus propias manifestaciones que, además, ofrecen un resultado contradictorio", asegura.

"Más bien parece que es Villarejo el que tiene motivos para enemistarse con Martín Blas y no a la inversa", añade Zamarriego, quien arguye también que el informe del investigador que mencionó a comisario imputado "no le atribuye" delito alguno "de manera tajante, clara e inequívoca". "Al contrario, expresa la presunción de que podría ser él y los indicios en que se funda, pero categóricamente afirma que no se puede confirmar la identidad", agrega el juez, quien concluye que Martín Blas "no presenta el menor indicio de enemistad hacia el investigado".