El triple crimen y el "hombre raro" del que todo el mundo habla en Usera

Es una tarde más en Marcelo Usera. Sus aceras se encuentran abarrotadas como de costumbre, mientras que la circulación sufre por deshacerse de los camiones que suelen aparcar en doble fila. El bullicio es el habitual, hasta que el alboroto callejero se transforma en un silencio sostenido, sólo roto por las sirenas que comienzan a llegar a la zona: un incendio acaba con la tranquilidad. Lo que la gente no se sabe es que algo mucho más grave está pasando.

El humo comienza a salir por las ventanas del número 40 de Marcelo Usera, pero los tenderos más cercanos empiezan a sentir que no es un incendio. La rapidez de bomberos y policía en llegar a la zona hacen pensar que algo más está pasando... confirmación que llega sólo minutos después. Un hombre ensangrentado y en parada cardiorrespiratoria es tumbado sobre la acera mientras tratan de reanimarlo. Minutos después, intentan lo propio con otras dos mujeres.

Este miércoles por la tarde, cerca de las 18:30 horas, tenía lugar uno de los asesinatos más brutales de los últimos tiempos en Madrid. Tres personas eran asesinadas en un despacho de abogados: una de la mujeres fue degollada, otra falleció tras recibir un fuerte impacto en la cabeza y un tercero, en este caso hombre, presentaba una importante herida provocada por una barra. Todos perdían la vida en el despacho Eurasia a manos de un "hombre raro". Usera sólo habla de ello.

El Confidencial estuvo en la zona, dialogando con testigos presenciales de lo ocurrido, que aún siguen conmocionados con lo sucedido. Muchos de ellos no se pueden creer que haya tenido lugar este triple asesinato, pues incluso comentan que los trabajadores del despacho eran conocidos y habituales clientes de las tiendas de la zona. Es más, incluso una de las fallecidas vivía a escasos 100 metros del lugar del triste suceso, algo de lo que todo el barrio habla.

"La sangre me hizo ver que no era un incendio"

"Empezamos a oler a humo, así que salimos a la calle, pero por fuera no se veía nada", confirma una de las trabajadora del local adyancente al despacho de abogados. Pero entonces, comenzaron a salir las llamas: "Entré a la tienda, pero cada vez olía más a quemado, así que volví a salir. Entonces ya se veían las llamas y, en pocos segundos, aparecieron los bomberos", confiesa, siguiendo desde ese momento toda la secuencia desde su propio escaparate.

Sólo unos minutos más tarde, la situación se complicaba: un hombre con el pecho y un brazo ensangrentado es tendido en plena acera, momento en el que se le empieza a prácticar la reanimación cardiopulmonar: "Cuando vi a este hombre lleno de sangre, ya supe que no era un incendio", nos confiesa otro trabajador. Sólo unos minutos más tarde, otras dos mujeres son tendidas a su lado, una de ellas completamente llena de sangre. El gesto se contrae: los vecinos la conocen.

Conocidos y habituales de la zona

"Era habitual cliente de las tiendas de la zona, venía aquí y era muy agradable", asegura la dueña de un locutorio cercano. "Vivía muy cerca de aquí, hace dos días estuve hablando con ella, es terrible", afirma. Otro comerciante de la zona confirma la situación: "Estaba todo acordonado, con mucha policía, bomberos y SAMUR presentes, mientras los cuerpos de los fallecidos estaban en la acera" esperando a que tuviera lugar el levantamiento del cadáver.

La voz de alarma la iba a dar el propio dueño del despacho, V.J.S.C. Varios clientes esperaban en la calle para subir al despacho, sin que obtuvieran respuesta desde dentro: sería el abogado quien abriría la puerta junto a ellos, encontrándose los tres un importante incendio en su interior. Según nos confirma otra trabajadora cercana, bajaría a la calle muy nervioso y terminaría hablando con ella: "Han sido mis trabajadores, los han atacado", le confesa totalmente descompuesto.

Una llamada de alerta

De los tres fallecidos, las dos mujeres eran trabajadoras del despacho -una secretaria y una abogada-, mientras que el hombre fallecido era un cliente que se encontraba en sus dependencias. Fuentes policiales confirmaron a Efe que una de las mujeres contactó por teléfono con el dueño del bufete, para decirle que un individuo con un aspecto "raro" estaba esperándole en su interior, a quien ahora las fuerzas de seguridad consideran como sospechoso.

Dicho abogado trabajó hace algunos años como fiscal en Perú y las autoridades, que "no descartan ninguna de las hipótesis" según confirmaron a este diario, valoran la posibilidad de que hubiera podido ser un ajuste de cuentas. "Estoy muy conmocionado, obnubilado, totalmente bloqueado", confesaba en declaraciones a Efe. El caso ha conmocionado a todo Usera, que no hace más que hablar del triple crimen y el "hombre raro" que sucedió este miércoles.