Tráfico pone nueve multas al día gracias a los chivatazos de ciudadanos anónimos

La Dirección General de Tráfico (DGT) ha contado con la inestimable ayuda de la colaboración ciudadana para poner más de 22.500 sanciones firmes entre 2008 y 2014. Así se desprende de la respuesta remitida por Tráfico a una solicitud de acceso a la información pública presentada por El Confidencial en el Portal de Transparencia. Es decir, cada día se ponen nueve multas de promedio en toda España -sin contar Cataluña ni País Vasco, donde las competencias en materia de tráfico están transferidas-gracias a las denuncias voluntarias de ciudadanos anónimos que presencian una posible infracción.

El Reglamento de Procedimiento Sancionador en materia de tráfico habilita a cualquier persona a denunciar conductas irregulares en materia de tráfico. Segovianos y asturianos son, con gran diferencia, los que más han utilizado esta capacidad, todo lo contrario que navarros, gaditanos y melillenses. No obstante, en términos absolutos, una de cada cuatro denuncias voluntarias que han acabado en multa se registró en Madrid [descargue aquí los datos].

Después del capítulo genérico en el que la DGT agrupa las multas no categorizadas, las más habituales son las referidas a infracciones relacionadas con paradas y estacionamientos, con más de 3.000. Sin embargo, esta categoría es la más frecuente sólo en dos provincias: Asturias y Palencia. Algo diferente ocurre con las sanciones por conducción temeraria: pese a ser la tercera más relevante en España, con algo más de 2.600 multas en siete años, es la conducta más denunciada en 19 provincias.

Entre los datos curiosos que arroja la información aportada por Tráfico están los 700 conductores que fueron sancionados tras una denuncia voluntaria por usar teléfonos móviles u otros dispositivos, una cifra similar a los multados por no tener carné de conducir. Las Palmas lidera este apartado con 127 sanciones, mientras que Valencia encabeza otra categoría similar, como es la de estar inhabilitado para la conducción.

A la hora de notificar las irregularidades observadas, estos agentes circunstanciales anónimos de la circulación tienen que identificar el vehículo y al conductor en caso de conocerlo, detallar el hecho denunciado y hacer constar su profesión y domicilio. El ciudadano presentará la denuncia ante la Jefatura de Tráfico o en el ayuntamiento correspondiente o bien comunicará el hecho denunciado a los agentes de tráfico, quienes completarán el boletín de denuncia correspondiente.