López Madrid, Granados y Marjaliza compartieron yate: la UCO aporta los correos

Los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil encargados de la investigación del caso Púnica se están topando de forma insistente, desde que se iniciaron las pesquisas, con algunas personalidades que parecían ajenos a la trama. Una de esas personas es Javier López Madrid, alto directivo de OHL,exconsejero de Bankiayyerno de Juan Miguel Villar Mir. Fuentes cercanas al caso han confirmado a El Confidencial que la UCO ha detectado comunicaciones hasta ahora secretas entre López Madrid y dos de los principales implicados en la trama, el exconsejero de Presidencia Francisco Granados y su socio, el constructor David Marjaliza, que girarían en torno a una embarcación de lujo que los tres habrían compartido.

Las conversaciones aparecen en correos electrónicos que fueron intervenidos por los agentes de la Guardia Civil en la primera fase de la operación el pasado mes de octubre y están integrados en la parte del sumario que sigue instruyendo bajo secreto el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco. Según han precisado fuentes próximas al caso, los diálogos giran sobre un yate botado con el nombre de Miriam de 15 metros de eslora y 20 años de antigüedad que pertenecía en ese momento a la familia de López Madrid y que este habría dejado a Granados y Marjaliza para que lo disfrutaran con sus respectivas familias.

Gastos de combustible y amarres

Fuentes próximas al directivo admiten a este diario que López Madrid mantenía una estrecha relación con los dos presuntos cabecillas de Púnica y reconocen que llegó a prestarles la embarcación familiar en al menos tres ocasiones. Sin embargo, niegan que esos favores sirvieran para ocultar un supuesto pago en especie a la trama ni que tengan algún otro tipo de relación con el caso Púnica. Al contrario, desde el entorno de López Madrid se asegura que los correos detectados fueron enviados precisamente para reclamar a Granados y Marjaliza que abonaran los gastos de combustible, amarre y patrón que habían generado esas tres supuestas únicas navegaciones. Fuentes cercanas a los dos acusados también confirman los correos, pero rechazan igualmente que tengan relación con los hechos que se están investigando.

Pero el episodio no es tan anecdótico para el juez Velasco, que reclamó a López Madrid que remitiera a su juzgado la documentación del yate y explicara el motivo por el que se lo había prestado a Granados y Marjaliza. El instructor de la causa cree que esas comunicaciones podrían demostrar que la presunta red corrupta también realizó operaciones con las empresas vinculadas a López Madrid, del mismo modo que ya han quedado acreditados negocios de Púnica con otras grandes compañías. En los casi nueve meses que dura la instrucción, ya han tenido que testificar por presuntos pagos a la red directivos tan destacados como el expresidente de Indra, Javier Monzón, y el presidente de ACS y el Real Madrid, Florentino Pérez.

López Madrid aún no ha sido convocado a la Audiencia Nacional, pero su nombre ya había sonado antes por otro episodio relacionado también con el caso Púnica. Como adelantó este diario el pasado octubre, habría mediado para que directivos de Indra recibieran a otro de los empresarios presuntamente implicados en la trama, el experto en reputación online y redes sociales Alejandro de Pedro Llorca, acusado de cobrar con fondos públicos las campañas de imagen personal que realizó para políticos del PP de toda España. El propio expresidente de Indra confirmó meses después en su declaración como testigo que López Madrid era la persona que le había pedido que se reuniera con Pedro Llorca.

Interrogatorio a Granados

Según ha podido saber El Confidencial, el juez y la Fiscalía preguntaron expresamente a Granados por el contenido de esos correos el pasado octubre en su primera y única declaración como imputado. Sólo unas horas después, el exconsejero de Presidencia y Justicia de la Comunidad de Madrid fue enviado en régimen de prisión provisional sin fianza a la cárcel de Estremera, donde se encuentra recluido desde entonces, acusado de los delitos de blanqueo de capitales, organización criminal, contra la Hacienda Pública, tráfico de influencias, cohecho, malversación, prevaricación y fraude.

La familia López Madrid vendió la embarcación a un particular hace casi dos años,aseguran fuentes de su entorno. Además de en la operación Púnica, Javier López Madrid,que cuenta con la confianza de su suegro, que le ha nombrado vicepresidente ejecutivo del gigante Ferroglobe,se vio salpicado recientemente por el caso de las tarjetas black de Caja Madrid –gastó 34.800 euros, que ya ha devuelto–.