Condenado a siete años y medio el Robin Hood de Vallecas

La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a Carlos Martín Iglesias, el Robin Hood de Vallecas, a siete años y medio de prisión por atracar dos entidades bancarias a las que accedió desde las alcantarillas. El ladrón confeso, que ejecutaba los robos disfrazado con vestimentadel Rayo junto a sus compinches, también deberá abonar una multa de 1.140 euros y devolver el dinero robado. Fiscalía, acusados y bancos afectadosllegaron a un acuerdo de conformidad que ahora se ha traducido en sentencia fechada el pasado 17 de febrero que conllevaba el compromiso por parte de los condenados aretornar el citado montante, que supera los 70.000 euros.

El equipo de Martín Iglesias también ha sido condenado, aunque a penas menores. Suscolegas Omar Orozco, Karim Cristobal Bel Allal y Rubén Reyes han sido castigados con tres años y nueve meses por uno solo de los atracos, además de la correspondiente multa. Sus otros compañeros de andanzas Geysa Marielle Neves, Ana María Cristea y José Manuel Barros, a un año y 10 meses de cárcel, además de 600 euros de multa, también únicamente por uno de los atracos. Y Sergio Pérez y Antonio Otero, a un año y un mes de prisión y 180 euros de multa.

Todos ellos, además, deben abonar 716 euros al Ayuntamiento de Madrid por los daños causados en la vía pública y72.0000 euros a Bankia,que incluye el montante sustraído y los estropicios ocasionados. El grupo fue acusado por la Fiscalía únicamente por los dos atracos mencionados -el citado contra Bankia y otro a una sucursal del Santander-, a pesar de que inicialmente la Policíales atribuía más de media docena de robos a entidades financieras a través del mismo procedimiento.

La banda entraba en las alcantarillas desde accesos situados a medio kilómetrode los bancos objetivo, luego caminabapor el subsuelo hasta colocarse a la altura de las entidades, hacían un agujero y entraban por el sótano. Luego subían a la primera planta y retenían al personal que en ese momento se encontraba en los establecimientos, les ordenaban abrir las cajas fuertes y los cajeros y se iban con el dinero por donde habían venido.

Generalmente, ejecutaban los atracos los lunes por la mañana, justo antes de que las entidades abrieran sus puertas al público. Los viernes inutilizaban los cajeros de los bancos que iban a robar con el fin de que éstos estuvieran cargados en el momento del asalto.

Martín Iglesias solía gritar frases polémicas en el momento en el que amenazaba al personal de la entidad financiera. "Voy a robar el dinero de Botín y quiero abrir las cajas de Bárcenas", dijo cuando atracó la sucursal del Santander del número 74 de la madrileña calle de Alcalá. "Soy el Robin Hood moderno, dile a Gallardón que venga a arreglar el agujero", afirmó en otra ocasión el ladrón, que luego nunca entregaba el dinero a los pobres, como sí hacía el mítico personajeinglés.