La Complutense expedienta a Monedero por trabajar para terceros sin pedir permiso

El rector de la Universidad Complutense de Madrid, José Carrillo, ha acordado la apertura de un proceso de información "reservada" a raíz de las informaciones periodísticas publicadas en los últimos días sobre la actividad de consultoría del profesor y secretario de Podemos Juan Carlos Monedero. En un comunicado, la Complutense explica que el rector ha decidido estudiar los hechos "ante las noticias publicadas en los últimos días en distintos medios de información" sobre unos trabajos de asesoría a gobiernos latinoamericanos realizados por Monedero con los que ingresó 425.150 euros a finales de 2013.

La apertura de la información "reservada" se debe a que, según fuentes de la Universidad Complutense citadas en varias informaciones, el responsable de Podemos -profesor de Ciencia Política- debería haber solicitado permiso a la universidad antes de haber realizado esos trabajos como consultor. El secretario de Organización de Podemos, Sergio Pascual, defendió ayer que Monedero cobró estos trabajos a través de una empresa inscrita en el registro mercantil y pagó sus impuestos y calificó una "mera especulación" la posibilidad de que la Universidad Complutense pueda sancionar a Monedero.

Indignación entre catedráticos y profesores

La publicación el pasado viernes por parte de El Confidencial de que el profesor Titular de la Facultad de CC Politicas y Sociología de la Universidad Complutense de Madrid, Juan Carlos Monedero, lleva años compatibilizando su cargo de funcionario público con trabajos extras y ajenas a la universidad mientras cobra la dedicación exclusiva ha llenado de indignación (la han hecho llegar directa o indirectamente al autor de esta noticia) a numerosos catedráticos y profesores de este centro superior y de otras universidades públicas de toda España.

Consideran que se trata de un “clarísimo trato de favor” por parte del rector José Carrillo que estaría de esa forma devolviendo el apoyo de este grupo de profesores del Campus de Somosaguas para ser elegido rector de una de las universidades más numerosas de España.

“Lo que resulta realmente sorprendente, dice un catedrático de ese centro madrileño que tuvo que dejar la dedicación exclusiva para poder trabajar fuera de ella, es que Carrillo haya dejado pasar tanto tiempo y que no actuara de oficio cuando conocía perfectamente la situación laboral de Monedero y sus trabajos y sus viajes fuera de España y los informes por dinero que hacía para diferentes ‘clientes’…”.

Subrayan otros profesores que el Rector debería haber actuado de oficio contra Monedero “y no lo ha hecho… Habría que pedirles explicaciones o simplemente presentarle una denuncia ante las instancias administrativas y en los tribunales para que diera alguna explicación sobre su actitud de condescendencia…”, subrayan otras fuentes que insisten en el trato de favor “intolerable” hacia un dirigente político que va predicando moralidad y ética para los demás y él abusa y se lleva un dinero público que no le corresponde.

El fraude

“Para hacer lo que todavía hace Monedero con la condescendencia del Rector no sólo es una autorización expresa por parte de la Universidad, que es lo que necesitan en general los funcionarios que no tienen obligación de dedicación exclusiva (Ley 53/1984 de Incompatibilidades de Funcionarios Públicos, artículo 15), es que ello conlleva una bajada de sueldo que supera el 70 por ciento –por ejemplo, puede pasar de 3.000 euros netos mensuales a 1.000)-, por lo tanto, Juan Carlos Monedero habría estado percibiendo dinero público que no le correspondía al decir del ordenamiento jurídico en vigor.

“No es que le falte un papel, no. Es que cobra lo que no es suyo y en clara discriminación positiva en relación con centenares de compañeros funcionarios que sí han tenido que dejar la “exclusiva” para poder trabajar fuera del centro con la correspondiente rebaja de sueldo.

“Lo que ha hecho Monedero es un clarísima infracción que debería suponer una sanción disciplinaria fuerte, amén del reproche social y ético consiguiente”, sostiene un catedrático con despacho de abogados de la propia Universidad Complutense.

¿Se atreverá Carrillo?

Las quejas llegan anónimamente a raudales, según informaciones recogidas por este periódico de fuentes solventes de la Complutense. “Denunciar abiertamente es más difícil… Hay temor a represalias y a acosos de todo tipo… Conocemos a estos personajes”, sostienen compañeros de la propia Facultad.

Es al rector Carrillo al que insisten para que meta en cintura a Monedero. De hecho, la directora general de Universidades de la Comunidad de Madrid, Lorena de las Heras y la propia consejera Lucía Figar requirieron de Carrillo información sobre el “caso Monedero” cuando estalló el escándalo al conocerse que había percibido 425.185 euros procedentes de Venezuela por trabajos de asesoría mientras mantenía la dedicación exclusiva y cobraba por ella de la Complutense. Carrillo se limitó a tirar balones fuera en una actitud que no sorprende a nadie dentro de la UCM porque conocen su posición “habitualmente genuflexa” ante los auténticos amos de la Facultad de CC Políticas.

De hecho, todavía no ha firmado la compatibilidad pedida por Monedero el 18 de diciembre del 2014, justo después de que estallara el “escándalo Errejón” en la Universidad de Málaga donde tenía un contrato de investigador sobre la vivienda en Andalucía sin cumplir los requisitos establecidos y en claro caso de amiguismo entre conmilitones políticos.