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Confirman la condena al edil de Educación del PP que pateó a un preferentista
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mientras protestaba en la plaza mayor de Coslada

Confirman la condena al edil de Educación del PP que pateó a un preferentista

El concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Coslada se acercó por la espalda y le propinó un puntapié en la pierna que le dejó cinco días sin poder andar bien

Foto: El concejal Fernando Atienza
El concejal Fernando Atienza

La plaza Mayor estaba repleta y no era para menos. Coslada celebraba sus fiestas y la mitad del pueblo se había congregado en el punto neurálgico de la ciudad para escuchar el pregón. Sin embargo, no todo eran risas y vino. Una treintena de afectados por las preferentes aprovechaba la ocasión para protestar públicamente contra la corporación municipal.

Al alcalde, Raúl López, no le gustaban los reproches de los manifestantes y menos en ese momento tan festivo. Tampoco al concejal de Seguridad, Fernando Atienza, le agradaban aquellos gritos contra el equipo de Gobierno. Pero iban en el sueldo. O al menos así lo han visto siempre los políticos. Asumir las críticas forma parte de su cargo y aquellas personas mayores no tenían otro modo de expresar su malestar y que les escuchara mucha gente.

Sin embargo, Atienza no pareció entender esa máxima democrática y decidió que ya estaba bien de aguantar. Mientras la corporación se dirigía al Ayuntamiento en plena calle, el edil de Seguridad y Educación -que también este último concepto está incluido en su cartera- se quedó rezagado de la comitiva. Fue entonces cuando se colocó detrás de uno de estos preferentistas, Antonio H. G., que llevaba un altavoz, y, sin mediar palabra, le propinó una patada en la pierna derecha, a la altura de la pantorrilla.

Así confirma que sucedieron los hechos la Sección Séptima de la Audiencia Provincial de Madrid, que acaba de ratificar la sentencia que el pasado 10 de junio emitió el Juzgado número 2 de Coslada, que consideró al concejal culpable de una falta de lesiones contra el ciudadano, un hombre de 63 años vecino de la localidad. La Audiencia también da por buena la sanción que impuso el Juzgado número 2, que castigó al autor de la agresión a abonar 650 euros -en concepto de multa e indemnización- y al pago de las costas del proceso.

El testimonio de un agente de la Policía Local que se encontraba junto a Atienza en el momento de la patada fue determinante para que el juez diera validez a la denuncia interpuesta por la víctima, que sufrió lesiones en la pierna que le impidieron andar correctamente durante una semana.

Tras conocer la ratificación de la sentencia, la Coordinadora de Asociaciones de Vecinos de Coslada ha solicitado "la inmediata dimisión" del concejal de Seguridad por lo que ha calificado como un "acto cobarde". "No hay excusas ni componendas, es culpable de agresión a un ciudadano y este acto violento lo convierte en incapaz para seguir en el cargo", apunta la Coordinadora en un comunicado, que señala al alcalde como "cómplice" del ataque contra el jubilado si éste no cesa al edil condenado.

Atienza se encuentra actualmente imputado también por otro caso. En concreto, el Juzgado de Instrucción número 6 de Coslada le investiga a él y al jefe de la Policía Local, Gabriel Ángel Cerrato, por supuesto acoso laboral sobre el anterior responsable del cuerpo, Ginés Jiménez Buendía. El tribunal le imputa coacciones, lesiones, prevaricación y un delito contra la integridad moral presuntamente por no atribuir al denunciante las funciones que como oficial le correspondían una vez que el Juzgado de lo Contencioso número 5 de Madrid ordenara su reincorporación.

Según el denunciante, tanto Cerrato como Atienza le arrinconaron en un despacho apartado, le impidieron el acceso a las bases de datos policiales, le dejaron al margen de las operaciones y le encomendaron tareas que no tenían que ver con las que habitualmente realiza alguien de su rango profesional.

La plaza Mayor estaba repleta y no era para menos. Coslada celebraba sus fiestas y la mitad del pueblo se había congregado en el punto neurálgico de la ciudad para escuchar el pregón. Sin embargo, no todo eran risas y vino. Una treintena de afectados por las preferentes aprovechaba la ocasión para protestar públicamente contra la corporación municipal.

Multa Audiencia Provincial de Madrid
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