Una edil del PP de Madrid no justifica 40 viajes a balnearios reservados para ancianos

Programas para que jubilados del distrito de Hortaleza de Madrid disfrutaran de un balneario de cuatro estrellas en algún punto de la costa española acabaron en manos de personas cercanas a la concejal del PP de ese distrito durante 2007 y 2011, Elena Sánchez-Gallar. Según ha podido comprobar El Confidencial, los viajes para vecinos de la tercera edad que se pagaban con dinero público fueron, en algunos casos, utilizados fraudulentamente por personas que no podían acceder al programa por edad. También disfrutó de este privilegio gente vinculada al Partido Popular y, en particular, próximos a la concejal Sánchez-Gallar, que ayer hizo caso omiso a las reiteradas llamadas que recibió de este diario y se limitó a anunciar, a través de una intermediaria, que hoy haría público un escrito explicando el destino de estos viajes.

El distrito de Hortaleza desarrolló durante la pasada legislatura un programa social para que las personas más mayores del barrio pudiesen visitar balnearios. En el contrato que se firmó con la agencia de Viajes Cemo se exigía que, por cada 50 plazas ocupadas, se regalaran dos más. La oficina también aceptó la cláusula en la que se comprometía a proporcionar dos bonos de viaje de fin de semana “con estancia de dos noches y pensión completa” si las dos plazas gratuitas no se disfrutaban en cada excursión. Esos sitios debían ocuparse por los servicios municipales para conocer la calidad de los lugares ofertados y los servicios, pero no siempre fue así.

El Grupo Parlamentario municipal de Unión Progreso y Democracia pidió la relación de personas que disfrutaron de al menos 38 viajes de bonos viaje de fin de semana y que estaban injustificados en la relación de los expedientes completos remitidos desde la coordinación general de la alcaldía. El distrito de Hortaleza, que ahora dirige Ángel Donesteve, sólo respondió ante dos viajes: el de dos miembros del departamento de Servicios Sociales del barrio que estuvieron en el hotel Ágora de Peñíscola en mayo de 2011. Los viajes de los otros 36 turistas premium de nombre desconocido están valorados en unos 24.000 euros.

Según ha podido comprobar este diario, la vocal vecino María Prado Cabañas Serrano y su hijo, Pascual Oliver Cabañas, fueron dos de los agraciados con estos viajes. Otra afortunada fue la consuegra de la propia Gallar, Isabel Hernández Jiménez, madre de Isabel Blanco, consejera técnica del distrito de Ciudad Lineal que iba en el puesto 47 de la lista del PP del Ayuntamiento de Madrid.

“Exigimos al Ayuntamiento que dé una explicación clara, seria y contundente sobre quién ha utilizado estos viajes. Queremos saber quién ha pasado gratis total un fin de semana pagado por todos los madrileños”, apuntó ayer a este diario David Ortega, portavoz municipal de UPyD. “Ya tenemos algunos nombres y, con ellos, la certeza de que se han utilizado recursos públicos para tener satisfecha a una red clientelar ligada a la figura de Sánchez-Gallar. Por eso pedimos su dimisión”, añade.

Casi 800.000 euros en cuatro años

El distrito de Hortaleza destinó una buena parte de su presupuesto para sufragar estas minivacaciones. En el año 2008 se inyectaron 139.000 euros para costear cinco viajes que disfrutaron 250 vecinos. Dicho de otro modo: el Ayuntamiento de Madrid desembolsó 556 euros por cada usuario. En el año 2009, el presupuesto se elevó hasta los 192.500 euros y se realizaron siete turnos de otros 50 participantes. Un ejercicio después, la víspera a las elecciones de 2011, se dedicaron 280.000 euros más del presupuesto público para el disfrute de otros 500 vecinos. Ya en el 2011, el último ejercicio en el que se subvencionaron estos viajes, se redujo hasta los 173.055 euros.

Los cuatro contratos fueron firmados con la misma agencia de viajes, aunque se disputó con otros gigantes del sector como Viajes El Corte Inglés, Halcón Viajes, Viajes Iberia o Viajes Olimpia. Llama la atención que, durante los años 2010 y 2011, los contratos se adjudicaran por un procedimiento excepcional sin publicidad. De hecho, en el contrato que presta el servicio en el último ejercicio fue declarado de "especial urgencia".