El Supremo ordena a la Audiencia sentar en el banquillo al presidente de Damm

El Tribunal Supremo acaba de propinar un revésa la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional estimando los recursos tanto de la Abogacía del Estado como de la Fiscalía Anticorrupción contra la decisión de cerrar una investigación contra el presidente de la cervecera Damm, Demetrio Carceller Arce, imputado por gestionar el negocio iniciado por su padre, Demetrio Carceller Coll, también imputado, y para quienes se pedía 14 años y 48 años de cárcel respectivamente.

Según ha podido saber El Confidencial, el Supremo considera que Abogacía y Fiscalía tienen razones suficientes para entender que el dueño de la compañía debe sentarseen el banquillo de los acusados. La Audiencia Nacional había acordado el sobreseimiento libre después de que el juez Pablo Ruz ordenara su procesamiento.

Fuentes jurídicas señalan que el Alto tribunal, en su auto, entiende que hay indicios suficientes para entender que ha podido cometer los delitos que fijan tanto la Abogacía como la Fiscalía. Así, los magistrados coinciden con el auto de Ruz:Carceller gestionaba o contralaba la gestión de la empresa para que sea igual de responsable. Una vez que el sobreseimiento ha sido revocado, la Audiencia Nacional tendrá que sentarle en el banquillo de los acusados porgestionar los negocios familiaresa través de los cuales su padre cometería fraude fiscal, tal y como sostiene la Fiscalía.

Los recursos se habían interpuesto después de que la Sala, presidida por Alfonso Guevara, archivara la parte relacionada conCarceller Arce al entender que Ruz no tenía ningún indicio de delito contra él.

El actual presidente de la cervecera estabaimputado por Ruz en el marco de una investigación sobre una trama fiscal con la que elpadre-Demetrio Carceller Coll- estaba acusado de haber defraudado72,04 millonesde euros a Hacienda.En octubre del año pasado, el juez había abierto juicio oral contra los dos empresarios y otras dos personas. En concreto, Carceller Arce estaba acusado de"gestionar" los negocios familiaresa través de los cuales Carceller Coll cometía fraude fiscal.

La Audiencia Nacional, sin embargo, aseguró que esa gestión se movió dentro de los cauces legales:"La actividad de gestión del recurrente (Carceller Arce) no resulta acreditadamente integrada en lo ilícito por actividades de clase algunas encaminadas al fraude fiscal", explicaba el auto que ahora ha sido rechazado por el Supremo.

Con la decisión del Alto Tribunal se da vía libre a la acusación de la Fiscalía Anticorrupción y da vigencia al auto de apertura de juicio oral, por el que Ruz exigía una fianza de 353,6 millones de euros.