El PP da por superado el bache gracias a la “sobreactuación” del PSOE contra Cañete

El PP da por superado “el bache” en la campaña electoral que supuso el debate en TVE entre Miguel Arias Cañete y Elena Valenciano (más bien sus consecuencias), e incluso asegura que la posterior “sobreactuación” del PSOE (la denuncia sobre el presunto machismo del candidato) empieza a resultar beneficioso para sus intereses. El acoso al exministro ayuda al objetivo primero de los populares ante la cita con las urnas: la movilización del electorado más fiel.

Los últimos datos que maneja el equipo de campaña del PP indican un repunte en la intención de voto y la vuelta a la corta ventaja sobre el PSOE en que estaban antes del debate, según fuentes de los populares consultadas por El Confidencial. En la sede de Génova parten de la base de que la encuesta más fiable para conocer la situación de partida antes del arranque de la campaña sigue siendo el sondeo del CIS, que les otorgaba una diferencia sobre los socialistas de 2,7 puntos.

En los mismos medios reconocen que ese margen con respecto al PSOE se había diluido durante el fin de semana pasado con el fiasco de Arias Cañete en el debate y, sobre todo, con sus alusiones del día siguiente a la “superioridad intelectual” que debía disimular al medirse con Elena Valenciano por su condición de mujer. Aunque evitan dar más detalles sobre sus encuestas internas, desde el aparato han transmitido a los candidatos que las perspectivas vuelven a ser positivas, que han recuperado la ventaja inicial.

Sondeos al margen, de los que casi nadie se fía dada la alta abstención prevista, los dirigentes locales y provinciales del PP sí que han hecho llegar a la dirección nacional su percepción de que parece logrado el objetivo de que vaya a votar el grueso de “los nuestros”, del electorado más fiel a los populares. A ese fin ha contribuido la campaña personal contra Arias Cañete, en la que el PSOE centra su propia campaña desde el mismo viernes pasado.

“El debate les ha dado moral, pero sobreactúan tanto en el acoso que nos empieza a beneficiar”, sostienen en medios del PP. En la medida que los socialistas van a degüello contra Arias Cañete, dirigente que cuenta con el apoyo general de todos los sectores del partido, y se presentan como posibles vencedores en los comicios, facilitan la movilización del electorado más afín a la formación en el Gobierno. De hecho, todos los protagonistas de todos los actos electorales del PP cultivan ya el miedo a que los socialistas vuelvan al poder como eje de su campaña.

Los dirigentes populares equiparan a los socialistas con la crisis económica y como el PSOE presenta los comicios como un primer paso para recuperar el Gobierno, sostienen que “los españoles tienen que decidir si quieren continuar con la recuperación o volver al pasado de la recesión”.

La ofensiva de Alfredo Pérez Rubalcaba y Elena Valenciano contra el cabeza de lista del Partido Popular va más allá de los comicios y busca el desgaste de su imagen para cuando se negocie la vicepresidencia o comisaría que corresponderá al Gobierno español en el reparto que toca hacer después de los comicios para formar la Comisión Europea. Ese es ahora el principal temor en el Gobierno.

Arias Cañete es el candidato de Rajoy para representarlo en el futuro Ejecutivo de la UE. En fuentes del grupo popular descartan que la campaña del PSOE sobre el presunto “machismo” del exministro tenga influencia alguna sobre sus aspiraciones porque al final, según recuerdan, quien decide el reparto de puestos son los jefes de Estado o de Gobierno: Angela Merkel y Mariano Rajoy. Y además queda por ver otro dato fundamental: quién gana los comicios y por cuánto.