El PSOE intenta ligar el recurso previo del TC al recorte de escaños autonómicos

Los socialistas se baten a la desesperada para frenar la reducción de escaños en las cámaras regionales de Galicia y Castilla-La Mancha, primer recorte de aparato parlamentario que se acomete en el Estado de las autonomías. En el Congreso, el grupo socialista apela a la próxima reposición del recurso previo ante el Tribunal Constitucional para impedir después el ajuste institucional promovido por María Dolores de Cospedal que se tramita ya en la Cámara Baja.

La portavoz del grupo socialista en el Congreso, Soraya Rodríguez, se ha mostrado oficialmente escandalizada con que la Cámara vaya a aprobar en las próximas semanas la reforma del estatuto de autonomía de Castilla-La Mancha para reducir el número de sus diputados de los actuales 49 a una horquilla entre 25 y 35 sin esperar a los cambios en el TC. La propuesta sobre la iniciativa autonómica, cerrado ayer mismo el trámite de presentación de enmiendas, pasa ya a debate y votación definitiva.

PP y PSOE están ya de acuerdo en promover una reforma de la ley orgánica del Tribunal Constitucional para reponer la figura del recurso previo, medida que habría evitado, por ejemplo, que el Estatuto de autonomía de Cataluña fuera sometido a consulta popular antes de que el TC se pronunciara sobre el texto.

Las proposiciones de ley correspondientes están presentadas por los dos grupos, pero falta que el Gobierno informe y dé su conformidad para que se debata en el pleno de la Cámara. Tiene un mes para hacerlo.

Los socialistas de Castilla-La Mancha, con su secretario general, Emiliano García-Page al frente, pretenden que esa reforma del TC tenga carácter retroactivo para intentar que se paralice después el recorte de diputados en la región que consideran contrario a la Constitución y un “pucherazo electoral”. Soraya Rodríguez quiso contentar a sus compañeros de Toledo al acusar al PP de tener mucha prisa en aprobar la reforma del estatuto y obedecer órdenes de María Dolores de Cospedal, como si se pudieran cambiar los plazos legislativos; pero no acabó de defender la posible retroactividad.

En fuentes parlamentarias puntualizaron ante la discusión pública entre ambos grupos que no está en peligro el acuerdo sobre la reforma del TC, uno de los pocos entre ambos partidos, y que la dirección del PSOE es consciente de que, cuando entre en vigor, no se podrá aplicar sobre cambios estatutarios ya aprobados, como será el caso del de Castilla-La Mancha. La proposición de ley del Grupo Popular especifica que la futura reforma de las facultades del TC no podrá afectar a los cambios estatutarios que estén en trámite.

En Galicia la reducción de escaños que postula Alberto Núñez-Feijóo para pasar de los 75 actuales a 61 no requiere reforma del estatuto de autonomía, sólo de la ley electoral regional, y también ha chocado con el rechazo en bloque de socialistas y nacionalistas gallegos, que se niegan a admitir un ajuste de aparato político en la Cámara.

La iniciativa del presidente de la Xunta, incluida en sus compromisos electorales ante las urnas, también es considerada como un “pucherazo” por PSOE y BNG. Llega ahora al pleno de la Cámara gallega, la oposición lo considera una ruptura del consenso parlamentario, pero el PP sacará la reforma adelante con su mayoría absoluta y suficiente para acometer los cambios en la normativa electoral.