Las ayudas para libros caen por debajo de los niveles de hace una década

Wert lo definió ayer, lisa y llanamente, como una “barbaridad”. Hay que remontarse más de una década en el tiempo para encontrar un nivel similar al recorte que este año han sufrido las ayudas económicas para los libros de texto y el material escolar, financiado por el Ministerio de Educación y las comunidades autónomas. Los recortes en educación se dejan sentir ya en las familias y, por supuesto, en las estadísticas. Casi 600.000 alumnos han perdido, a lo largo del último curso, la ayuda con la que se mitigaban los efectos de la vuelta al cole en muchas familias en situación desfavorable. La inversión en este apartado, 68.570 millones de euros en el curso 2012/13 está por debajo de lo que se invirtió en 2001, con Pilar del Castillo como ministra del ramo (88.271 millones de euros). El número de beneficiarios es también el más bajo de toda la década.

En el curso que terminó en junio, sólo 396.781 alumnos pudieron tener acceso a esta ayuda para material escolar que se cofinancia entre el Ministerio que dirige José Ignacio Wert y el resto de las comunidades autónomas. Los recortes aplicados en este apartado por las autonomías han arrastrado también a la parte que cosubvenciona el Gobierno central hasta llegar a unos niveles bajísimos. De hecho, casi dos de cada tres estudiantes perdieron la ayuda en el último curso. De 975.330 personas beneficiadas en 2001/2012 a sólo 396.781 del curso 2012/2013. En total, un 59,3% menos.

Wert reconoció ayer que “se ha sacrificado en otras becas que no tienen componente social”, como estas destinadas a los libros, para tratar de salvar, en la medida de lo posible, las becas generales para el estudio que reciben las familias con menos recursos. Estas han bajado también, pero sólo un 3%, lo que ha dejado a 24.520 alumnos sin la ayuda económica.

En este aspecto, fuentes ministeriales han mencionado las necesidades de reducción del déficit público de las autonomías, que dedicaban parte de las becas a través de programas de cooperación territorial con el Estado. “La causa es que todas las administraciones educativas (las comunidades autónomas) se han visto obligadas a reducir recursos que se destinaban a la adquisición de libros y de material escolar, y eso se refleja en este descenso”, explicó Wert.

El reconocimiento de que la caída es una “barbaridad” no espara menos. Las 396.781 personas que obtuvieron esta ayuda están muy lejos del millón (1.027.705) de alumnos que la recibió en el curso 2008/2009, cuando comenzó a sentirse la crisis económica. Aun así, la cifra también supone casi la mitad de los beneficiarios que había en el curso 2001/2002. Entonces, con una inversión de 88.271 millones de euros había 788.923 alumnos beneficiados. A día de hoy, la inversión ha caído hasta los 68.570 millones de euros.

La convocatoria general de este curso contará con 250 millones de euros más sobre el presupuesto de 2013, que es de 1.167 millones euros. El resto de becas tendrá "la consignación" que le asignen los presupuestos del Estado de 2014, aunque el conjunto de programas experimentará un "crecimiento".

Según las fuentes, sólo subiría la partida de becas generales; el resto se vería afectado a la baja en alguna medida, al tiempo que han recordado, desde el Ministerio, que ya se suprimió algún programa el curso pasado.