Vidal-Quadras rechaza fundar un partido, pero encabeza la petición de primarias en el PP

El verso suelto del Partido Popular en el que se ha convertido Alejo Vidal-Quadras descarta que esté pensando fundar un partido con el que volver a concurrir a las europeas del año que viene, tal y como se ha especulado en las últimas semanas a raíz de su activismo en la plataforma Reconversión, de la que es uno de sus impulsores. Consciente de que el partido no contará con él en esa cita (“tampoco aceptaría ir en las listas en las circunstancias actuales”, matiza), Vidal-Quadras ha decido reconvertirse en un abanderado de la democracia interna dentro del PP, tal y como reclamó, el pasado miércoles, en persona, a la secretaria general, María Dolores de Cospedal, en su visita al Parlamento Europeo.

El actual vicepresidente de la Eurocámara explica a El Confidencial que se han malinterpretado las palabras que él mismo pronunció en un acto reciente de Reconversión, en el que dijo que los partidos sólo cambiarán cuando se vean forzados a hacerlo por la irrupción de nuevas opciones políticas. “Sólo si se ven amenazados en sus intereses, los dos grandes partidos aceptarán que el Estado debe estar al servicio de la nación y no la nación al servicio del Estado”, dijo textualmente. “Yo dije que los dos grandes partidos no reaccionarán mientras no se vean amenazados”, se justifica. Es la segunda vez que Vidal-Quadras tiene que salir al paso de especulaciones que le sitúan al frente de supuestos movimientos del sector crítico del PP y que, en su entorno, consideran que son, en buena medida, filtraciones interesadas de la propia sede nacional del partido. De hecho, recientemente se publicó también que estaría articulando una alternativa crítica junto a Jaime Mayor Oreja y Esperanza Aguirre, cuestión que ya negó en su día.  

A sus 68 años, el exdirigente del PP no está dispuesto a retirarse sin dar batalla. Al menos, sin dar la batalla para conseguir que su partido sea más democrático internamente, postura en la que Vidal-Quadras coincide con la ‘lideresa’ Esperanza Aguirre y con números colectivos de la sociedad civil que en los últimos días han dado un paso al frente para exigir una nueva ley de partidos. De hecho, a Vidal-Quadras le gustaría que el próximo candidato del PP a las europeas fuera elegido en primarias y no nombrado por el aparato de Génova. En los últimos meses se ha especulado mucho con la posibilidad de que el ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, u otros miembros del gabinete puedan ser los cabezas de cartel.

“Mi vocación política sigue inalterada. A corto plazo, lo que quiero hacer es plantear dentro del partido un debate interno serio y la democratización interna para que los candidatos sean elegidos en primarias”, explica. En este sentido, su actitud no es nueva. Como ya informó este diario el pasado mes de marzo, Vidal-Quadras y otros compañeros de Reconversión dirigieron una petición por escrito al Gobierno para que reforme la Ley de Partidos y la Ley de Financiación de los mismos. La fórmula exige del Ejecutivo una respuesta que, según apunta Vidal-Quadras, debe llegar a lo largo del próximo mes.

Así las cosas, el encuentro de Vidal-Quadras con María Dolores de Cospedal, el pasado miércoles en Bruselas, venía cargado de cierto morbo por ver cómo se desarrollaría el trato entre ambos después de meses en los que Génova se ha despertado, muchas veces, con frases cargadas de profunda crítica por parte del cargo del PP que ostenta la mayor responsabilidad en el Parlamento Europeo.

A Vidal-Quadras le gustaría que el próximo candidato del PP a las europeas fuera elegido en primarias y no nombrado por el aparato de Génova

Con ironía, el político catalán agradeció la visita de Cospedal y su “materialidad corpórea… al final de la legislatura” y, sin arredrarse ante la jefa de filas, la animó a que articulase, internamente, procedimientos para encauzar el debate ideológico que se ha abierto dentro de la formación entre diferentes sectores de opinión. También, que profundizase en una mayor democracia interna mediante el uso de las primarias y las listas abiertas y, por último, que cuidase las formas. “Queremos ser tratados humanamente”, le expresó. Una queja con la que el político resume el malestar de algunos compañeros de partido que, en su día, se cayeron de las listas sin explicación alguna por parte de Génova y que, por ejemplo, en el caso del exdiputado Luis Herrero, se enteraron por los medios de que ya no iban a concurrir a las europeas.

La secretaria general, por su parte, le pidió menos críticas, más unidad y “hacer piña” con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y con el Partido Popular “en estos momentos tan difíciles”. En su exposición inicial, Cospedal reclamó una “relación más fluida" entre el  grupo de eurodiputados y el partido, animando a defender "la posición europeísta” de esta formación política y a vender bien los temas que se deciden en el ámbito europeo.